Nueva familia

Entierro (final)

Llegaron al gremio y dejaron el cuerpo de Acnología a un lado para luego aterrizar y todos adentrarse a este, planeando como enterrar algo tan grande, quedando en que lo harían con ayuda de Axel y Richard, que abrirían un agujero en el suelo para poder meter en él al dragón del apocalipsis.

--Me alegra que por fin Acnología esté muerto, así ya no tengo que atacar Fairy Tail --habló el mago oscuro cuando se hubo sentado en la barra.

--¿Ibas a atacar Fairy Tail? --preguntó impresionado su hermano.

--Sí, el cuerpo de Mavis tiene un gran poder oculto que no sabe, e iba a utilizarlo para matar a Acnología, pero ahora que ya está muerto no hace falta que ataque Ishgal, tendré que ver como calmo a mis seguidores en Álvarez --explicó.

--Entonces te voy retirando la marca --terminó y quitó la marca del mago oscuro. --Ha estado bien tenerte por aquí, pero si te tienes que ir no te detendremos, pero despídete de Ryû antes de irte --recordó antes de alejarse para hablar con Gray.

Suspiró antes de levantarse e irse con su sobrino, que estaba hablando con Kemono sobre esa nueva bestia que había domado.

--Ryû ¿quieres ir a caminar conmigo? --ofreció al niño, que con ilusión se despidió del ojiverde y se fue con su tío fuera del gremio, comenzando a caminar por el bosque que había alrededor de la casa de Natsu y Gray.

Zeref veía como el pequeño corría con gran ilusión al mismo tiempo que tiraba de su mano para que fuera con él y no se alejara.

--¡Vamos, tío Zeref! --animó con felicidad.

Aunque no quisiera sabía que se tenía que ir, por lo que se sentó en el césped y le pidió al pelirosa que se sentara con él.

--Ryû, en realidad, yo quería despedirme --comenzó, viendo la gran tristeza en el rostro del infante.

--¿Qué? ¿Por qué? --se alteró, subiéndose a su regazo y colocando las manos en su pecho.

--No es para siempre, pero hay gente que me espera en otro lugar --explicó, dejando que el niño se relajara encima suya. --Cuando esté desocupado te prometo que vendré, pero no puedo asegurarte que sea muy seguido --continuó con su explicación, pero notando felicidad en el rostro de su sobrino.

--Pero vendrás, con eso me basta, estaré esperando, es una promesa, no puedes romperla ¿vale? --acabó con una gran sonrisa, recibiendo un gran abrazo por parte del pelinegro.

--No la romperé --aseguró.

--¿Cuándo te vas? --preguntó cuando se separaron.

--Cuando te deje con tus padres yo me iré --respondió, comenzando a levantarse. --Vamos, te deben de extrañar --ofreció su mano, la cual Ryû tomó para empezar a dirigirse al gremio.

Llegaron y entraron, donde terminaron de despedirse y el mago oscuro partió de vuelta a su reino.

--Lo voy a echar de menos --dijo Natsu, que estaba recibiendo las caricias de su pareja en la cabeza.

--Bueno, según lo que dijo el cachorro volvería para visitarlo, por lo que lo volverás a ver --animó sin detener las caricias.

--Es increíble lo que hemos logrado ¿no te parece? --cerró los ojos, recordando todo lo que han logrado en ese tiempo.

--Sí, es impresionante, hemos conseguido lo que queríamos, y encima tenemos a nuestra familia --recordó también con una sonrisa tranquila, viendo lo relajado que parecía su pareja.

(...)

Al día siguiente, en la tarde, abrieron el gran agujero para enterrar allí al antiguo rey de los dragones, aunque no pudieron hacerlo en un solo día, ya que era demasiado grande y Axel y Richard se cansaron cuando llevaban la mitad del agujero, por lo que lo pospusieron para el siguiente día, donde lo terminaron y Natsu y Gray metieron al enorme ser para luego taparlo, donde tardaron otros dos días.