My Dulce Maldad.

capítulo: 12.

--Si te sientes afortunado: levanta las manos y muévete lentamente hacia la pared, así no tendré que mancharme las manos con tu sangre!.

Dijo la voz gruesa de un hombre tras de mí.

Mi corazón aumentaba el ritmo cardíaco a medida que pasaban los segundos.

--Quien rayos eres?, y que hiciste con mi madre?. Donde está?.

--jajajajaja!.

Su risa era como la de un maníaco al escuchar mis palabras.

--Ella se portó muy mal Dilan, por eso tuve que deshacerme de ella, sino lo hacia me iban a descubrir!.

Mi corazón estaba apunto de estallar por el dolor que sentía al escuchar sus palabras.

--De qué estás hablando imbécil?, y como es que sabes mi nombre?.

Dije sin moverme de mi lugar; aún tenía el metal tras mi cabeza.

--Así que el niño sabe maldecir!.

Dijo acercando el metal más y más a mi cabeza.

--Sino quieres morir, no vuelvas a decir esas palabras!!!.

Grito con fuerza.

--Pero de todos modos te lo diré de una forma más sencilla Dilan, para que lo puedas entender!.

Hizo una pequeña pausa antes de continuar, bajando el tono de su voz.

--Verás Dilan:

Comenzó sus palabras quedando frente a frente el uno del otro, mientras ésta vez apuntaba a mi rostro con un arma negra.

Su rostro estaba manchado de sangre y su ropa desgarrada, quemada al igual que maltratada.

--No quería nada de esto...

Continuo con sus palabras.

--Pero no tenía otra opción!. sólo quería a tu hermana, sólo a ella!, pero me a puesto todo muy incómodo, por eso tú Dilan, me vas ayudar.

Concluyó con una sonrisa aterradora.

Mi hermana?, Evelin?.

--Que tiene que ver ella con esto?.

--has silencio estúpido, no me gusta que me interrumpan mientras hablo.

Dijo poniendo el arma en mi boca.

--Por otro lado, tu madre: no dejaba de gritar y gritar al ver a un extraño en su casa, y sabes que?...

Hizo la pregunta mirándome directo a los ojos mientras una pequeña sonrisa comenzaba a dibujarse en sus labios.

--Eso me molestó mucho Dilan.

Hizo una pequeña pausa para continuar.

--por eso: tuve que matarla. por eso, esa sangre que ves en el sofá Dilan, esa sangre es la de tu querida madre.

Terminó sonriendo a carcajadas.

Mi respiración dejó de ser la misma ante sus palabras. mi corazón dolia, mis piernas comenzaban a temblar mientras algunas lágrimas recorrían mis mejillas.

--No tienes porque preocuparte niñito, lo hice sin que sintiera dolor!.

Fueron sus últimas palabras.

Mis puños se cerraron automáticamente mientras un ardor de furia se ataba en mi pecho.

--Eres un imbécil!!!!.

Grite, moviendome ligeramente golpeando su rostro con una increíble fuerza haciendo que el arma Cayera al suelo alejándose varios metros de ambos.

Sus manos inmediatamente se dirigieron a su rostro gritando de dolor.

--Te voy a matar!!!.

Dije muy enojado mientras corría hacia él y con mi rodilla golpeaba repetidas veces su estomago.

Con mucha fuerza me tomó de las piernas haciéndome girar para estrellarme contra la pared haciendo que todo lo que allí había se rompiera.

Un grito de dolor salió de mi boca, pero eso no me detenía. el dolor y la furia que sentía en mi pecho aumentaba con cada segundo.

Con una gran velocidad se dirigía hacia a mí para impactar con mi cuerpo, pero antes de hacerlo, rápidamente eleve mi pierna golpeando fuertemente su rostro haciendo que éste cayera, haciendo un fuerte impacto contra el suelo.

Mis dientes crujían al apretarlos con furia.

Me acerqué a él lentamente tomándolo por los cabellos mientras lo golpeaba con furia una y otra vez en el rostro haciendo que sangrara más.

Después de varios segundos, me detuve al mirar unos pies sobresalientes detrás del sofá.

Juraría que mi corazón se detuvo por unos instantes al acercarme y mirar su rostro.

Mis piernas ya no aguantaban más, automáticamente caí de rodillas contra el suelo mientras que mis lágrimas caían sin contención.

--no, mamá!.

Dije en un pequeño susurro con profunda melancolía.

las palabras no querían salir, un nudo se formaba en mi garganta.

--nooooo!!!!!.

Grite desesperado mientras ponía su rostro en mis rodillas.

*Gracias por leer!*.