My Dulce Maldad.

capitulo #: 19.

*.Evelin.*

Todo mi cuerpo se debilitó al sentir su voz tan cerca de mi. mientras que sus labios al rozar levemente mi oído provocaron que un pequeño escalofrío se produciera en cada miembro de mi cuerpo.

No sé por qué, pero al estar cerca de él, es como si sintiera una pequeña conección que se hace más y más fuerte al estar a su lado.

<que es lo que me pasa?. Ni siquiera lo conozco!>

Dije dentro de mi mente, la cuál en este momento se siente muy confundída. No podía dejar de pensar en lo estúpido que fue Rick, en verdad lo quería, pero de su parte era todo lo contrario.

No podía dejar de pensar que todos los hombres son iguales, solo buscan sexo.

No puedo abrir mi corazón nuevamente a nadie. No quiero que vuelva a hacer herido, provocando grietas en cada parte de el. Eso no me lo permitiré!.

Me levanté de mi lugar tan rápido como pude alejándome a varios pasos de él, lista para decir todas las palabras negativas que se me ocurrieran, pero fue la peor idea que tuve.

Mientras caminaba hacia atrás alejándome de él, no fui lo suficientemente atenta para mirar hacia abajo mientras sin querer unos de mis pies tropezó con una pequeña piedra la cuál hizo que todo mi cuerpo lentamente cayera hacia atrás.

Cerré mis ojos esperando el momento de caer hacia el frío suelo he impactar contra el, y sentir el fuerte impacto.

Pero fue todo lo contrario.

Me sentí sostenida de mi cintura por unos suaves brazos los cuales me sostenían.

Al abrir mis ojos, sentí como mi corazón latía más rápido de lo natural haciendo que me faltara el aire para respirar.

Él me sostenía entre sus brazos mientras que su rostro estaba tan pegado al mío que podía sentir su respiración muy cerca de mis labios.

Sus ojos verdes me miraban como si penetraran mi alma solo al mirarme. Su cuerpo estaba muy pegado al mío haciéndome sentir su calor, mientras que parte de sus cabellos al estar inclinados hacia abajo se unían con el mío.

Quedé sorprendida por tan rápido reflejo de su parte.

mi respiración se hacía cada vez más rápida al mirar sus ojos, mientras sentía que el mismo tiempo se detenía ante mis ojos.

--No puedo creer que esa pequeña piedrecita te haya hecho caer!.

Dijo muy cerca de mis labios rompiendo el hielo que se formulaba entre los dos.

--Por suerte estoy aquí para sostenerte.

Dijo nuevamente acercándose más a mis labios haciéndome sentir un agradable olor a menta de su boca.

--Yo!... Yo!... Yo!.

No lo podía creer. estaba actuando como estúpida, las palabras se detenía a mitad de mi garganta.

Una pequeña sonrisa se formó en sus labios al ver mi reacción.

--Tranquila!. ya que estoy aquí, no te dejaré caer ni por un instante.

Dijo poniendo uno de sus dedos en mi rostro para suavemente acariciarlo.

Sentía que mi corazón poco a poco se detenía.

*.Evans.*

No podía dejar de ver sus hermosos ojos. era como si quedara hipnotizado por ellos. su olor tan embriagante para mí, me hacia disfrutar el momento de estar tan pegado a ella.

<Besala!, Besala!, Besala!!!>

Gritaba mi mente una y otra vez mientras que sentía la necesidad de hacerlo.

Sonreí al mirar su rostro que poco a poco se tornaba color rojo.

--Te encuentras bien?.

Dije volviendo a nuestra posición actual, pero sin soltar su cintura, mientras miraba sus ojos.

Por un momento bajó la mirada.

--Si, estoy bien, gracias!. Pero sino te importa puedes soltarme ya!!.

Dijo mientras se soltaba de mi agarre un poco molesta.

Sonreí al ver cómo se alejaba.

--Quieres saber algo?.

Dije sin moverme al verla alejarse.

--Eres una chica muy egoísta, y mal agradecida. salvé tu vida una vez y no has siquiera dado las gracias.

Culminé.

Al escucharme detuvo sus pasos mientras escuché un suspiro suave provenir de ella.

Puso una de sus manos en su pecho y sin mirar atrás suspiró una vez más.

--No soy egoísta, tampoco mal agradecida!!.

Dijo un poco enojada, lo cual provocó que una pequeña curva se dibujara en mis labios.

--Desde el momento en que pasó eso, no he dejado de pensar en porqué lo hiciste!. Por qué salvaste a una persona que no conoces!!.

Continuó.

--Tampoco he dejado de pensar el porqué de tanta preocupación.

Culminó, quedando en silencio.

Al escuchar sus palabras y sentir su silencio, Poco a poco me acerqué hasta quedar frente a ella, pero se mantenía con su rostro abajo.

--Quieres saber algo?.

Dije mientras suavemente tomaba su rostro haciendo que mirara mis ojos.

--Aun existen personas buenas en este mundo!.

Dije mientras sonreía, pero muy en lo profundo sabía que ese no era el "por qué" de sus preguntas.

La realidad, es que pude ver algo en ella que no he visto en muchas otras.

Sonreí al culminar.

Una vez más su rostro retorno al color rojo al mirarme.

--Sino te importa tengo que irme!.

Dijo al instante.

*.muchas gracias por leer*.