Narra Erick.
Nuestros primeros días como novios han ido bien, aunque antes de ser algo de Christopher, ya me sentía su chico.
Estábamos pasando por etapas importantes, ahora agradezco el que haya estado de intruso en mi laptop, si él no hubiera encontrado eso, ahora realmente no seríamos nada.
- ¿En que piensas? - preguntó.
- Desde cuando tomaremos en cuenta nuestra relación.
- Mmm, explícate.
- Osea, me refiero a que si contaremos el tiempo desde que decidimos dar el paso a algo más, o desde que empezamos nuestra relación ya como novios formales.
- Yo la tomaría en cuenta desde que dimos el paso, ahí ya realmente si teníamos una pequeña conexión - respondió.
- Estaríamos prontos al mes - sonreí.
- ¡Es cierto!
- ¿Y ustedes? - preguntó Richard.
- Nosotros qué - contesté.
- Ustedes están raros - analizó caminando alrededor de ambos.
Los dos nos miramos de reojo sin decir nada, Richard podía ser como sea, pero era inteligente y estaba seguro de que nos iba a tener entre ceja y ceja.
- Tú estás loco, loco bro - dije.
- Los chicos están en el salón, digo, por si quieres ir - habló Christopher.
- Me quedo con ustedes - dijo cruzado de brazos.
Esto estaba siendo incómodo, me sentía vigilado, quizás estábamos siendo muy evidente, con Christopher ya no nos separamos ni para ir al baño.
- RICHARD.
Los tres miramos a Zabdiel, nuestro amigo avanzó hasta él dejándonos nuevamente solos.
- Eso estuvo raro - dije.
- ¿Será que sospecha?
- Estamos muy apegados, él no es tonto.
- Pero este es en el único lugar que podemos estar juntos, fuera de aquí es casi imposible - añadió.
- Lo sé, pero ya que.
- Es chiquitito Richard, míralo, es como un pitufo - señaló.
- ¡Oye! Yo también soy chiquito.
Optó por callarse, a veces hablaba más de la cuenta, pero obviamente sin mala intención.
Escuchamos el sonido que daba entender la entrada a clases. Caminé en otra dirección sin decir nada, estaba seguro de que mi novio preguntaría.
- ¿A dónde vas?
- Lo sabía - reí.
- Te acompaño - dijo pasando su brazo por mi hombro.
- ¡Nooo!
- Ay si esto es "normal" - respondió con un gesto.
- Uh, se me olvidaba que nosotros no lo somos - reí.
Las cosas nos seguían afectando, pero habían ocasiones en las cuáles era bueno tomarlo con humor, aunque por dentro realmente duelan.
- Chicos ¿llegó la maestra? - preguntó Hugo, nuestro compañero.
- No, creo que aún no - respondió mi novio.
Ví como dirigió la mirada a nuestras manos, me había tomando el atrevimiento de sostenerla en lo que su brazo descansaba sobre mi hombro, pero al sentir su contacto visual con nuestro agarre, lo solté de inmediato.
- Bueno, gracias - sonrió confundido.
Me adentré al baño lo más rápido posible, caminé hasta el final sin saber si Christopher me había seguido.
- Erick - llamó tocando la puerta.
- Estoy orinando ¿no escuchas?
Su risa me contagió, seguramente me escuché como un idiota.
- ¿Ya?
- Ya - sonreí abriendo la puerta.
- ¿Qué pasó?
- Nada, solo que me sentí incómodo con la mirada de Hugo.
- Sí, fue algo incómodo.
- ¿Viste su cara? Fue realmente de confusión.
- Hey.
- ¡Chris!
Su labios atraparon los míos sin dejarme decir más. Me adentró nuevamente al baño cargando mi delgado cuerpo.
- Te extraño mucho, vernos aquí no es suficiente.
- Créeme que yo también, es desesperante.
- ¿Me quieres?
- Sí, mucho - respondí.
No entendía el porqué me tenía cargado, pero me gustaba.
Qué no daría por tener un momento a solas con él, como los novios que somos, necesitábamos nuestro espacio y no lo teníamos.
Detuvimos el beso para mirarnos, un ruido en el baño de al lado nos interrumpió arruinando nuestro único momento.
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Amor En Libertad - Chriserick
FanfictionCuando hay amor verdadero, las críticas sobran.