Saque la pluma del cajón de la cocina y empecé a escribir la que será la última entrada del diario que mamá me obsequió después del trágico suceso, si es que puede llamarse así. Es sólo una libreta de alambre espiral, iniciado hace unos meses como sitio donde anotar una parte de las decepciones de la vida; y ahora incluiría el plan. Preparado y debidamente reseñado, y aunque ninguno de sus hechos o rumores han sido verificados, todos están convencidos de que los han vivido y experimentado en realidad. Una mala justificación para plantear la venganza hacia ellos, para lograr el objetivo propuesto, todo esto procesando por una mente, tortura.
Unas pocas palabras se convierten en un párrafo al que sigue otro, la mano me tiembla mientras escribo de emoción y no química.
Detente.
El iniciar un plan hacia ellos se puede distorsionar a obsesión y seria caer en su juego.
"¿Pero porque todo lo ves como un juego?".
"¿Cual es la necesidad de vengarse de alguien quien no te ha hecho daño?".
A cuentas... "¿Este juego es para quién?", grito mi subconsciente.
Cerré de golpe la libreta, cogí la jarra de jugo de naranja y comprobé que está vacía. Me pongo de pie, un poco tambaleante al pescar un mareo, insegura sobre mis pies, abrí la nevera y, sin pensar, cambie la libreta de notas por una botella de vodka de mi madre. Bebí un trago.
Al diablo las píldoras y su estúpida reacción tóxica en mi cuerpo. Al cabo ya detuve el ingerirlas, sin consentimientos del doctor o mi madre.
Reflexioné en otra cosa, sobre los títulos de proyecto que TaeHyung me sugirió a tratar bajo la metodología de la Institución. Aunque justo ahora, ando en blanco.
Pille que desde la entrada al Aritnem estoy tan apartada de los lugares de reunión, que deje de frecuentar. Pero ¿para qué molestarse en pensar en ellos?. Piensa de nuevo en una estrategia. ¿Un plan? Vaya chiste. Pero hubo una idea, ¿Verdad? Un plan, un puñado de elogios, y luego... nada.
Aquella conversación en el baño —palabras airadas—, se agita entre los pliegues de mi cerebro. Pero no da fruto. Imposible pensar después de un colapso.
¿Su fama en el Aritnem? Ya no me preocupa, no es tanta.
Durante los días me he preguntado por qué les tocó a ellos, en qué son destacables, por que triunfaron donde otros fracasaron; pero aun no descubro la verdad que los llevo a poseer esos privilegios. ¿Qué podía hacer, preguntar a una Instituto que ya no escucha? Y si es de recibir respuestas, ¿Quién he de creerle?.
Me obstáculo pesadamente entre ellos y no concibo con su relevancia, solo el As de mentir.
Entonces surgió la incógnita; ¿Quién habrá sido la chica que los perjudicó?, esa sería mi pieza clave. ¿Serán los rumores de pasillos concretos? O ¿Sólo quedan en rumores?.
Frote mis ojos, pero la imagen tan cerca de JungHyun logra incomodar. Es casi perfecto. Busque una imagen distinta entre los pensamientos, algo que dañar.
—El plan no es tan sencillo —emití frustrada, pensé en voz alta.
Todo en el es una actuación. Puede representar ese papel tantas veces como quiera. ¿Por qué no? Tienen todo a su poder.
Los Jeon quizás son misteriosos pueden ser buenos o malos, la gracia está en averiguarlo.
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SÉ QUIÉN FUE |Gemelos| JungKook
FanfictionDos caras completamente idénticas, ideales totalmente distintas. Las mismísimos obras de Satanás, con cuerpos envidiables casi exagerados como su capacidad de nivel superior en el Instituto, llegando a un punto de ser ídolos de muchos y rivales de o...