SÉ QUIÉN FUE |Gemelos| JungKook

|021| La desaparición

Posiblemente sientas un vacío existente en tu interior, o te creas un agujero negro que absorbe todo y se engrandece. Pero en toda energía oscura hay algo que brilla en ti. Estrellas a distancia que abundan a tu alrededor con cada movimiento. Galaxias que guardan tus ojos con cada pestañeo. Pequeños planetas plasmados por rincones de tu piel. Sin faltar las nebulosas que a veces habitan en tu cuerpo. Y aunque hay asteroides que te golpean y atormentan. No habrá meteorito que te logre acabar. Que a pesar de todo frente al tiempo o las circunstancias, eres el futuro de tu universo. Sin embargo, a pesar de todo; estoy sufriendo por un amor que vale rotundamente la pena. Sufro porque descubro que doy menos de lo que recibo. Sufro porque nuestro amor no podrá ser reconocido.

Trote escalera abajó vuelta un huracán de sentimientos. Sé que no fue el impulso adecuado, pero fue simplemente eso, un impulso.

Y ya creo estar llegando a los más altos límites. No entiendo que pasa, no entiendo que sucede, no comprendo una mierda. Cuando pienso o siento que hago bien, no, voy en erróneo camino. ¿En qué fallo? —no busque el 'en qué', siempre lo harás sin tu consentimiento—. Pienso que..., ya hice suficiente, ya basta, se acabó. Ya no quiero más enredos, quiero ser libre de mis pensamientos, libre de mis actos, sin temor a mis acciones o incluso a mis sentimientos. Quiero ser yo, simplemente yo misma. Esa a quien no le importa el qué dirán, solo con la vista al frente, buscando paz y estabilidad.

Todo lo que está a mi alrededor es una prueba de vida la cual, soy yo quien decido si quiero estar en ella, dañarla o aferrarme. Pero el 'aferrarme para siempre', no está en mi diccionario. Ya que a todo lo que me aferró, se va como llegó. Realmente, todo en mi desgraciada vida es así.

Un agarré fuerte del antebrazo justo en la zona afectada, me hizo saltar de los pensamientos y, aprovecho el hecho de estar vulnerable, para empujarme contra una pared. Me observó como si se me hubiese zafado un tornillo, como si mi acción no le agrado.

Trague saliva adolorida por su brusco agarre en la herida que ahora gracias a su maltrato punza.

—¿Qué se supone que estás haciendo? —su voz no es precisamente amable. Estaba rojo de la furia.

—¡No me toques! —solté en un rugido tan firme y decidido que lo dejé pasmado—. ¿No es lo que querías fin al cabo? —repliqué áspera. Mis ojos ya persistían rojizos por estar aguantando las ganas de llorar en el recorrido. Sus ojos y actitud eran intimidantes—. Ahora que me tienes... ¿Qué esperas para destruir lo que queda?

Sabía que sí analizaba mi actitud con detenimiento podría llegar a encontrarme patética. Pero justo ahora no siento vergüenza. El que se dispuso a hablar fue el odio disfrazado de ironía, creciente en mi interior.

JungKook soltó una risa nasal sarcástica jugando con su lengua, irritado. Puso sus dos manos a los laterales de mi rostro, acorralándome. Su rostro a centímetros del mío.

—Vamos a hablar en otro... —trató de agarrarme del brazo, pero me alejé en un movimiento—. No quiero que sea así, ¿de acuerdo? —habló seco, la quijada se apretó mostrando una que otra vena sobresaliente en su frente—. ¿Quién te dio el pase libre para que finjas que te intereso?

Mira a tu alrededor Carly, es una noche muerta, has estado perdiendo todas las peleas, no tienes esperanzas y te sientes rota, tienes los pies ásperos, raspados y golpeados...tus últimas fuerzas te llevan a través de la oscuridad. Solo cierra ojos y empuja con fuerza, sé que es difícil ahora pero esto es por ti.

Rompe ese escudo potente que no deja salir al volcán dentro de ti. Libérate de todo. Alcé ambos hombros, fingiendo que no me afectaba nada y deje escapar un suspiro.