Capítulo 47

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Camila POV:

Tenía un lío en la cabeza después de todo lo que me había contado Robert pero no me esperaba la muerte de Shawn. Sentí mi mundo pararse, mi corazón doler y mi mente bloquearse. No estaba lista para esta noticia.

-¿Cabello? ¿Me escuchas?

La voz de Robert sonaba tan lejana, mi vista no podía enfocarlo, las lágrimas empezaron a nublar mi campo de visión.

-¡Charlotte! ¡Trae agua por favor!

Escuche pasos apresurados y sentí un líquido frio ingresar por mi boca, bebí y empecé a llorar. No podía ser cierto, no era cierto.

-¡Mamá! ¿Estás bien? ¿Qué le pasa?

Escuchar la voz de Joe me hizo reaccionar, mi dolor no importaba ahora, quién sufriría más iba a ser mi pequeño. Apenas nos había recuperado y ahora perdió a su padre. Esta vista estaba siendo muy injusta.

Abracé a mi hijo lo más fuerte que pude y balbucee que me perdonara por no darle la familia que deseaba. Daría cualquier cosa por no tener que darle la triste noticia.

-Cabello tienes que calmarte primero –ese era Robert- tomate tu tiempo y piensas las cosas.

Asentí soltando a Joe y respirando profundamente. Necesitaba pensar en cómo decirle a mi hijo mayor que su padre había fallecido, que lo había vuelto a perder y esta vez para siempre.

-¿Mamá? –la voz de Alejandro se hizo presente-

Limpié mis lágrimas y voltee a verlo, tenía sus ojitos cristalinos, signo de que iba a llorar. Lo mantuve entre mis brazos y susurré palabras para calmarlo, hizo preguntas pero no podía responderlas ahora. Mi mente no estaba bien.

Pasaron minutos, que sentí como horas, para poder calmarme y contárselo a Joe. Tenía que decirle la verdad pero no quería sonar cruel, necesitaba ser suave. No quería que se alejara de mí, no lo soportaría. Antes de poder hablar, salí de la habitación en busca de Robert. Tras encontrarlo pedí explicaciones sobre la muerte de Shawn, ¿Cómo murió? ¿Por qué? ¿Quién fue?

Robert negó con la cabeza y alego que no era momento para entrar en detalles pero insistí, necesitaba saberlo. Una vez convencido me explico todos los detalles, mi corazón dolía al saberlo y no sabía cómo lo tomaría Joe.

-Al parecer fue una falla en su respirador artificial pero no están seguros porque esos aparatos son casi seguros es muy poco probable que suceda esas cosas.

-¿Qué quieres decir Robert? ¿Fue homicidio?

-Nada está descartado y tú lo sabes Camila. No sé si sea buen momento para comentarte lo que sucedió con Tyrone y Lauren...

-¿Qué tiene que ver Lauren en todo esto?

-Intento dispararle a Tyrone.

Volví a la habitación donde estaban mis hijos. Joe tenía 12 años podía asimilar de una mejor forma la perdida de Shawn pero Alejandro apenas tenía 7 y no quería causarle un trauma, aunque haya disfrutado muy poco a Shawn le había agarrado un cariño especial.

-Camila –Robert llamó desde la puerta- es mejor decírselo a los dos.

Asentí con una profunda tristeza, esto no terminaría bien.

-Mamá... ¿Qué sucede? ¿Por qué todos actúan raro?

La confusión de Joe hizo doler mi corazón, jamás perdonaré al culpable.

-Quiero que me escuchen, esto es muy difícil para mí... necesito que ambos sean fuertes, que no se dejen derrumbar. Llorar está bien y pueden hacerlo pero no rendirse.

Ambos asintieron.

-Joe, tu papá falleció... aún no sabemos cuál fue el motivo...

Mi hijo empezó a llorar, sus lágrimas eran gruesas y dejaban el surco en sus mejillas. Bajo la mirada y me sentí la peor madre por dar la noticia.

-¿Shawn se fue al cielo con el abuelo?

Alejandro habló y asentí con tristeza, sus lágrimas empezaron a salir. Abracé a Joe que no me devolvió el abrazo. Mi corazón se estrujo.

-Mamá dime que es mentira... dime que papá vendrá a vernos...

Mi mundo acabó ese día.

-Desearía hacerlo hijo.

Lauren POV:

Después de una desintoxicación nivel "César" que consiste en beber 7 botellas de agua, un café cargado y una ducha fría pude salir de la celda y encontrarme con el encargado de hacerme el interrogatorio. Era un policía alto, de tez canela, cabello negro y ojos marrones estaba bien uniformado y con su placa adherida al cinturón. Me senté mirándolo fijamente y César ocupo el asiento a mi lado. Empezamos con preguntas banales como "¿conocía al reo?" "¿de dónde?" "¿desde cuándo?" "¿eran amigos?" y esas preguntas para construir la base del informe. Cuando llegamos a las preguntas acusatorias empecé a cansarme, él era el culpable y me tenían a mi encerrada escuchando tonterías.

-Entonces usted intento matarlo por venganza, porque sabía que él era un trabajador que tuvo que ver con la muerte de su padre.

Reí por esa ocurrencia.

-Ya le dije oficial, Tyrone Griffin me mantuvo amenazada mucho tiempo y ahora lo está volviendo a hacer, puede buscar en el departamento las pruebas.

-¿Cómo sabemos que ese pruebas estaban ahí desde antes? Puede que usted haya sembrado la evidencia.

-¡Oh claro! –conteste irónica- tengo poderes telepáticos para mandar a desconocidos a mi departamento sin mis llaves a plantar evidencia porque no tengo otro medio de comunicación.

-Tiene a su abogado.

-Puede preguntarle a cualquier policía de la estación, mi abogado estuvo conmigo desintoxicándome por la alta cantidad de alcohol en mi cuerpo.

El oficial pareció dudar de mi pero no tenía nada que ocultar, estaba diciendo la verdad.

-Entonces... ¿Por qué dispararle? ¿Por qué no lo denuncio con las autoridades?

Sus brazos estaban rectos en la mesa como columnas y su mirada era acusadora. Respiré hondo y respondí de manera calmada.

-¿Cree que no lo hice? Ustedes no hacen bien su trabajo, mi padre falleció por su culpa. Griffin está amenazando con matar a mi prometida y sus hijos si no retiro los cargos y ¿ustedes que hacen? Me traen para interrogarme cuando debería estar en un vuelo a los Estados Unidos con mi prometida e hijos.

El oficial mantuvo silencio y pareció pensarlo. César intervino alegando que el interrogatorio ya termino y que no necesitaba nada más de mí. El oficial asintió y nos retiramos de la oficina.

-Menudos ineptos, harán que nos maten.

-Estuviste bien, sigue con el perfil bajo para que no te vuelvan a encerrar por desacato.

Voltee los ojos y suspire, debería estar al lado de Camila y no respondiendo preguntas innecesarias.

-¿Podre viajar a EE.UU?

-Todo depende de lo que decidan, no te adelantes a los hechos.

Asentí con tristeza, sabía que ella me necesitaba.

Guardaespaldas Cabello | CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora