Capítulo 24

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No sabía exactamente porque me encontraba caminando a la habitación 201 del Center Hospital con una determinación implacable. Tenía ganas de saber cómo estaba Shawn pero a la vez de ignorarlo por todo el daño que me causó.

Antes de poder decidir qué hacer la puerta frente a mí se abrió dejándome ver a mi ex prometido en una cama con suero y el holter a su lado. Por un momento me sentí mal de verlo así pero luego recordé que yo había en su misma situación y él nunca apareció.

-Camila...

Shawn estaba semi sentado mirándome atentamente, no creía que hacía ahí y yo tampoco. Él me había dañado, no tenía por qué estar aquí.

-Me alegro tanto de que hayas venido, es una gran felicidad verte...

Me quede en el umbral de la habitación, no quería pasar. Aquel hombre había dañado mi corazón de la peor manera, no merecía mi preocupación.

-No puedo decir lo mismo.

Mi voz salió dolida y la cara de Shawn demostraba vergüenza, quizás porque Maddie estaba presente o por la culpa que sentía.

-Camila, perdóname... yo no quería dejarte y lo sabes, yo te amo...

Levante mi mano para que no continuara, no quería escuchar el mismo monologo de siempre. Estaba harta de que siempre dijera lo mismo cuando ya el daño estaba hecho. Se fue y perdí a mi hijo.

-Solo quería saber cómo estabas, ahora que sé que estas bien puedo retirarme.

Antes de poder irme sentí la presencia de un médico con el cual choque miradas y me dirigió a un lugar más privado con la excusa del expediente médico.

-Disculpe la interrupción pero me gustaría preguntarle algo sobre el paciente Mendes.

Aquella habitación era moderna, me gustaba el estilo que tenía pero no me gustaba el tema por el cual estaba sentada en ese sillón de cuero importado.

-No entiendo porque estoy aquí...

-El informe médico tiene una breve descripción de una mujer, el paciente estuvo sedado y empezó a describir a una fémina de cabello chocolate, ojos dulces como miel y piel de oro...

El medico empezó a leer su informe con una sonrisa en los labios mientras que yo trataba de no sonrojarme por la descripción que inconscientemente era la que me decía Shawn siempre que nos veíamos.

-Usted encaja con la descripción entonces supongo que debe saber algo sobre su inflamación de riñón....

¿Inflamación? Shawn era una de las personas más saludables que conocía y le gustaba cuidarse por la promesa de "ver crecer a nuestros hijos".

-No sé de lo que está hablando doctor, él era una persona muy sana.

-Sus análisis de sangre dicen lo mismo así que no entiendo porque tuvo que someterse a operación, él solo vive con un riñón.

Mi cara reflejaba sorpresa. Siempre se cuidó, no podía entender porque solo vivía con un solo riñón. Quizás Shawn me deba explicaciones y yo quiera oírlas.

Salí de aquella oficina y me dirigí a la habitación de Shawn donde estaba con Maddie y Sara, Lauren estaba sentada afuera del cuarto cuando me vio llegar.

-¿Está todo bien?

Me sentí mal por arrastrarla hasta el hospital, ella ya tenía problemas en su casa y yo le agregaba más. Estaba siendo egoísta.

-Sí, descuide. Por favor solo unos minutos y podremos irnos de aquí. Disculpe la interrupción.

-Tranquila Cabello, necesito distraerme.

Asentí aliviada y me entré en la habitación. El ambiente era cargado pues Shawn parecía vulnerable, al parecer estaban hablando de temas importantes. Sara me miro con cara de pocos amigos, Maddie estaba avergonzada y Shawn parecía molesto y triste a la vez.

-Me gustaría hablar con Shawn a solas por unos minutos.

Tan solo esas palabras fueron suficientes para hacer que las dos chicas salieran y nos dejaran a solas. El ambiente se volvió aún más tenso.

-¿Por qué tienes solo 1 riñón?

LAUREN POV:

Vi salir a las hermanas Smith con cara de pocos amigos pero sin duda Sara quería colgar mi cabeza en su pared como trofeo de guerra.

-¿Qué se siente ser la tercera persona Jauregui?

Sara había utilizado tanto odio en esa pregunta que me dio nauseas, dejo ir a una gran chica tan solo por su honestidad. No estaba dispuesta a aguantar sus estupideces.

-Nada porque soy la primera persona en la vida de Camila.

Ver su cara de enojo fue una satisfacción para mi, si creía que me iba a bajonear estaba muy equivocada. Yo no me dejaría humillar.

-Sara por favor, contrólate.

Su hermana intervino tomándola del brazo y sacándola del pasillo con rapidez. Sonreí aliviada y volví a sentarme esperando a Camila. Estaba con la cabeza recostada en la pared cuando sentí mi celular sonar, ni siquiera me había percatado que lo llevaba en el bolsillo de la chaqueta.

Al revisar la llamada era Keana, dude en responder porque quizás mi padre le pidió que me llamara pero necesitaba hablar con alguien sobre mi situación.

-Estoy sola, acabo de salir de tu casa.

Alivio. Me sentí libre al poder contarle todo lo que paso con lujo de detalles hasta el lugar donde me encontraba.

-¿Quieres que vaya por ti?

-Regresaré con Camila, quizás sea hora de que le diga la verdad...

-Pero las cosas se complicaran con tu padre, aún no lo hagas.

Me extrañé al oírla, parecía apresurada y asustada por mi confesión de amor pero lo deje pasar quizás tenga razón. Mi padre es capaz de separarnos así que debía ser cuidadosa.

-Esperaré a terminar la universidad y le diré la verdad, no quiero ocultarme más.

-Vale... entonces, ¿volverás con Camila?

-Sí, trajo su moto...

Mordí mi labio inferior inconscientemente pues amaba abrazarla y sentir el viento en mi rostro. Con ella me sentía segura.

Colgué la llamada con Keana al ver como Camila salía de la habitación con el semblante melancólico. Al parecer la conversación con Shawn había sido muy febril.

-¿Todo bien?

-Sí, vamos a su casa señorita Jauregui.

Bufé, no quería volver a ese infierno. Al estar sobre la moto de Camila me deje llevar por el viento en mi rostro y la seguridad de su cuerpo. Me permití imaginar un futuro a su lado, una familia y quizás un negocio juntas. Todo parecía maravilloso, quería formar algo así con ella y solo con ella.

"Si me permite hablarle como una persona, no como su seguridad, le aconsejaría que se alejará de esa casa y sus padres"

Ella quería que me fuera de la casa y yo solo quería irme con ella a mi lado pero... ¿estaría dispuesta a fugarse conmigo?

Guardaespaldas Cabello | CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora