Capítulo 43

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LAUREN POV:

Di mi declaración en contra de Tyrone que estaba detenido bajo los cargos de coacción, maltrato, acoso sexual y posesión de PBC. Al terminar todo el papeleo y garantizar que mi vida junto a la de Camila estuvieran a salvo salí de la estación con el único lugar al que podía ir, el departamento de Camz.

Después de la llamada con Camila dudé en presentarme, no quería encontrarme con la realidad. Encendí el celular y entre a la galería para ver todas nuestras fotos, sonreí en cada una y decidí que arreglaría todo por ellos, por mi familia. Llegué al edificio, compre una rosa en el lobby del hotel y subí hasta nuestro departamento.

-¿Te sientes mejor?

Me detuve al escuchar la voz de Shawn en el departamento, ¿Qué hacía él aquí?

-Mucho mejor, gracias por escucharme.

La voz de Camila parecía ahogada y temí que estuviera llorando. Suspiré al escucharla y me senté en el suelo con la espalda a la pared esperando que Shawn saliera.

-Nunca agradezcas que me quede a tu lado.

Era tan incómodo escucharlos, pareciera que están reconciliándose pero sé que Camila me es fiel, a pesar de haberle hecho daño ella aún me ama. Perdí la cuenta del tiempo a causa del cansancio, me había quedado dormida y Shawn ya estaba en la puerta mirándome con curiosidad pero también con recelo.

-Camila, tu ex está aquí –avisó Shawn-

Puse los ojos en blanco a causa del tono que empleo al decirlo, al parecer soy insignificante a su lado. Vi como mi castaña se asomaba por la puerta, me quedo mirando con sorpresa pero a la vez noté una tristeza en su mirada.

-Camila... por favor hablemos –pedí con la rosa en la mano-

-Dudo que tengan algo de qué hablar –espetó Shawn quitándole la respuesta a Camila-

-No te metas Mendes, no perteneces a nuestras vidas –solté con cólera-

Shawn se acercó imponente hacía mí y no me deje intimidar, quería darle un golpe tan fuerte que olvide a Camila y al parecer él tenía las mismas ganas.

-Es suficiente –dijo Camila molesta- mis hijos están dentro y no quiero una pelea en el pasillo de mi edificio.

Nos relajamos y esperamos que Camila siguiera hablando, solo quería que Shawn se largará ya.

-Shawn por favor ve a descansar, lo necesitas y yo también.

-No dudes en llamarme si pasa algo, cuídate y cuida a los niños –susurró cerca de Camz-

Shawn dejó un beso en la mejilla de Camila y se retiró del lugar lanzando una mirada mortal que fue respondida de la misma manera.

-Imbécil... -susurré-

-Deberías hacer lo mismo Lauren, ya es tarde.

-Por favor hablemos, necesito explicar todo lo que ha pasado...

Camila parecía muy triste y me detuve en sus preciosos ojos, había llorado, podía verlo. Me sentí la peor persona del mundo por hacerla llorar pero necesitaba que me escuchara.

-Camz, por favor, déjame explicarte todo... yo te amo.

CAMILA POV:

Mi mente quería enfocarse en la taza de café humeante que tenía entre las manos pero mis ojos solo podían enfocar a Lauren con ese rostro tan decaído y nervioso, no podía creer que la hubiera dejado entrar al departamento otra vez y compartir momentos como este.

Al parecer ella estaba buscando las palabras correctas pero yo no quería seguir en este silencio sepulcral, así que termine con todo el silencio con una duda que estaba divagando por mi mente.

-¿Por qué tus cosas siguen en la habitación?

Su rostro se desencajo al escucharme, parecía triste y enojada a la vez.

-Nada de lo que viste en el aeropuerto fue real, Tyrone me estaba amenazando.

La duda aterrizo en mi mente y corazón, eso explicaría porque sus cosas siguen como antes. Quería creerle pero aún tenía dudas por sus palabras en el aeropuerto.

-¿Por qué no me lo dijiste cuando estuvimos solas?

-él estaba ahí, no podía decírtelo.

Dejé el café en la mesa de centro y me fijé mi vista en ella, quería creerle.

-¿Cómo te amenazo?

-Me mando una memoria USB con el vídeo, si no aceptaba él tomaría represalias.

Mi mente trabaja a mil por segundo, si era cierto lo que me contaba, Tyrone pasaría mucho tiempo en la cárcel y yo me aseguraría de eso. Personalmente.

-¿Tienes pruebas?

Lauren negó con la cabeza y sorbió su café, suspiré. Estaba dispuesta a perdonar pero no a olvidar, su beso en el aeropuerto sigue grabado en mi mente. Cerré los ojos y deseché ese pensamiento pero fue inútil, volvía a mí.

-¿Me perdonas? –su voz sonaba triste y nerviosa- Te juro que no pasó nada, escapé en cuanto pude, mi corazón solo late por ti...

-Tus labios besaron los suyos y no puedo sacármelo de la cabeza, te perdono Lauren pero no puedo olvidar. Lo siento.

Salí del pequeño sofá y corrí hacia mi habitación. No quería seguir hablando, solo necesitaba pensar y dormir, tan solo eso. Lauren estaba en un segundo plano ahora.

Guardaespaldas Cabello | CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora