Capítulo 67

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6 meses.

Camila POV:

En todo este tiempo lo único bueno era saber que iba a tener una hermosa niña, después de eso todo estaba mal. Marie me demando, otra vez ir a juicio. No dejo de insinuarse pero siempre la rechazaba, no quería más problemas. El caso del apellido Mendes seguía en el aire, mis medicinas me ayudaban pero a la vez me debilitaban y mis terapias solo me mantenían ocupada.

Lauren y yo tratamos de mantener nuestra relación a flote pero ya no se sentía igual. Estábamos arrastrando algo que parecía muerto, el volver a los juzgados, la oficina y mis medicinas me alejaban de ella cada vez más. Sin contar que Sara me buscaba para volver pero ya le había dicho mil veces no.

-Allyson no quiero perder a mi esposa, ¿Qué puedo hacer? Los recuerdos no me dejan en paz, las medicinas solo me calman por unas horas pero luego vuelvo a lo mismo.

-¿Aún no puedes tener intimidad con Lauren?

-Lo he intentado pero siempre es lo mismo, me detengo a la mitad y aunque ella lo niegue sé que se frustra. Hace mucho que no lo hacemos y la verdad tengo miedo de que me engañe.

-¿Crees que lo haría?

-No lo sé pero no me sorprendería y tampoco la culparía. Estoy rota.

-Camila, has pasado por algo muy fuerte. Tratar el EPT lleva tiempo, apenas vamos 6 meses de terapia, no seas tan dura contigo misma.

-No quiero perderla...

Mis lágrimas amenazaban con salir, de solo pensar que podría perder a mi esposa. Tape mi rostro con mis manos e intente calmarme, siempre salía con los ojos irritados de tanto llanto.

-¿Has pensando en ver a una psicóloga de pareja? Puede ayudar en tu relación.

Limpié las pequeñas lágrimas que salían de mi rostro y miré a Allyson, en todo este tiempo se había ganado mi confianza. Después de Lauren, ella me conocía al 100%.

-¿Crees que sería bueno?

-No pierdes nada con intentarlo, conozco a alguien. Es una de las mejores, tiene un consultorio a unos 30 minutos de aquí.

Me dio su tarjeta, en ella decía "Verónica Iglesias" junto con su especialidad, número y dirección. Aquel nombre me pareció conocido pero no logre recordar de dónde. Fije mi vista en mi psiquiatra, me dio una mirada de esperanza.

-Lo hablaré con Lauren.

*

-Hola...

-Hola Camila.

Lauren ya no me miraba como antes. Aquella mirada de amor parecía apagada, me dolía ver como mi matrimonio se iba a la basura después de todo lo que nos costó estar juntas.

-Mamá, tendremos presentaciones de padres en la primaria, ¿irás?

Vi como Alejandro se esperanzaba, la verdad que tenía muchos asuntos en que trabajar y odiaría decirle que no a mi menor hijo.

-¿Por qué no va mamá Lauren? Ella es una abogada muy buena, ha ganado muchos casos.

Mi esposa me vio con asombro, sus ojitos verdes se conectaron con los míos y le regale una sonrisa. Asombro el mío cuando ella no me la devolvió simplemente bajo la mirada.

-No he ganado casos, he ayudado a redactarlos.

-Bueno, escribiste los casos pero gracias a eso ganaron. Eres muy inteligente cariño y eso se debe presumir.

Guardaespaldas Cabello | CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora