Capítulo 38

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Jughead

-¡Nada!- negue inmediatamente -No pasa nada...- Toni dejo salir un suspiro y cruzo sus piernas una encima de la otra.
-Estas diciendome... que la chica de la que has estado enamorado desde siempre, esta trabajando como tu asistente, en la misma oficina, con los mismos horarios y que encima, esta mas hermosa que la niña de la fotografía... ¡¿Y no pasa nada?!- Toni alzó la voz y la fulmine con la mirada ante su grito.
-Si quieres, puedo abrirte una ventana y que toda Manhattan se enteré- fruncí el seño molesto.
-Lo siento, esque este jueguito donde te haces el niño inocente que no sabe que sus actos tienen consecuencias, no me gusta- Toni se cruzo de brazos tan digna como siempre.
-¿Y qué quieres que te diga?- me encogí de hombros.
-La verdad Jug, ¿esque acaso no somos amigos?- Toni bajo los hombros desanimada.
-Sabes que eres mi mejor amiga Toni...- ladié la cabeza observando como fingia tristeza.
-Entonces dime la verdad... ¿Cómo conseguiste que la chica que no has visto en años llegase hasta aqui?-Toni sonrió burlona. Rodé los ojos al ver sus intenciones.
-No es gracioso... y no he hecho nada. Todo fue como una especie de casualidad- me encogí de hombros.
-Si claro...- ella enredo un mechon de cabello en su dedo.
-De acuerdo... te lo contaré lo mas rapido que pueda. Betty entrara por ahi en cualquier momento...- Toni se acomodó aun mas y puso su total atención en mi. -Bien... ¿recuerdad a Archie?- pregunté cruzandome de brazos.
-Si claro, el bombon pelirrojo. ¿Qué tiene que ver él aqui?- Toni mordio su labio mientras hacia memoria.
-Mas de lo que te puedes imaginar...- tomé uno de los cafés que Betty habia traido hace un momentony sorbi antes de comenzar a contarle la historia a Toni.
Conforme le explicaba la historia a Toni ella pasaba de tener una enorme sonrisa a poner un gesto de desagrado.
-¿Por qué no me habias dicho que Archie era el novio de Betty? ¡Y que ademas tu lo sabias!- Toni se colocó de pie. Me puse a su lado y pusé mis manos en sus hombros.
-No creí que fuese posible que ella y yo volviesemos a coincidir- me encogí de hombros.
-¡Mientes Jones! Por qué mas querrias mantener relación con Archie. Tú y él ni siquiera pertenecen al mismo círculo laboral...- Toni frunció el seño.
Me mordí el labio y negue ligeramente con la cabeza. -Ademas... has dicho que la chica es su novia. No arruines esto Jughead... ni para ella, ni para ti- en ese momento Betty volvio a entrar a la oficina. Llevaba varias carpetas sobre sus brazos. Alejo fugazmente la mirada cuando noto mi cercania con Toni.
-Perdón... ya esta aqui todo...- ella caminó hasta su escritorio y dejo todo sobre el.
-De acuerdo, sera mejor que me vaya. Cenemos esta noche si- Toni tomo su bolso que hasta ese momento note que existia. Alzé una ceja y me cruze de brazos.
-Lo siento, pero tengo mucho trabajo, quiza luego- me encogí de hombros. Toni resoplo y pusó los ojos en blanco.
-Nos vemos Betty...- le sonrió a la rubia y salió haciendo demasiado ruido con sus zapatos. Fruncí el seño ante su comportamiento.
-¿Quieres decirme cuáles son los pendientes? - le sonreí a Betty y ella me miro con una ceja alzada.
-Seguro...- ella asintió y traslado todas las carpetas hasta mi escritorio.
Durante las siguientes horas Betty estuvo leyendome algunos de los eventos y lugares a los que me habian invitado para asistir, ya sea para que los reseñará o conviviese con algunos otros colegas. Mientras mas leia mas sentía que debia cancelarlos todos, los eventos socialea no eran de mis favoritos, es mas, me atreveria a decir que eran demasiado aburridos y algunos demasiado odiosos.
-Sin ofender, pero entonces ¿pretendes cancelar todos ellos?- Betty alzó una ceja y me miro molesta.
-Betty... creemé no hay nada que me pierda- le sonreí y ella resopló.
-Bien, entonces solo ahorremonos seguir perdiendo el tiempo y cancela todo- ella solto la pequeña libreta sobre la mesa. Negué y segui leyendo la carpeta que tenia entre las manos.
-¿Tienes algo importante que hacer esta noche?- Pregunté sonriendo después de leer algo que si me interesará.
-Archie tiene turno hasta tarde... - ella se cayó de inmediato y me miro incomoda. -No lo creo... ¿por qué?-  dijo masageando su cuello.
-Mira esto... ese es un nuevo Bar que hace poco abrió, sin embargo, se ha vuelto muy popular entre las jovenes parejas- ella abrió los ojos enorme. No sabia si habia sido por lo que habia leido o por lo que le estaba diciendo.
-¿Qué quieres decir?- frunció el seño confundida.
-Vamos esta noche. Me han invitado a reseñarlo y me parece algo interesante...- ella negó ligeramenteby observe como un leve rubor se extendió por sus mejillas.
-Yo no...- fruncí el seño al ver que se estaba negando.
-Perdón Betty. Pero no te estoy invitando a salir, es algo meramente laboral. Además recuerda que ese tambien es tu trabajo.- Me recosté sobre mi silla. Ella agacho la mirada y asintió como si fuese un cachorrito regañado. Que tierna.
-De acuerdo... pero no nos demoremos tanto. No me gustan esos lugares- ella negó y una mueca se instaló en sus labios.
-Ni siquiera lo conoces. Pero esta bien, no tardaremos- me encogí de hombros y ella asintió complacida.
Después de seguir revisando y tomando alguno que otro evento, la hora de la comida llego.
Me coloqué mi chaqueta mientras ella tomaba igual sus cosas.
-Esta vez no tienes excusas. Comé con nosotros Betts-  ella me miró de pies a cabeza y parecio debatirse sobre que era lo que debia hacer.
-Hace mucho frio para que salgas por algo, quedate con nosotros- volví a pedir mientras me acercaba a ella.
-No se si sea buena idea, no me sentiria comoda- ella negó apenada.
-¿Por? Anda vamos, te prometo que sera de todo menos incomodo- colque mis manos sobre sus hombros. Ella reaccionó ante mi tacto y me observo directo a los ojos.
Quiza solo habian sido cosas mias, pero habia visto un ligero destello en sus ojos verdes y por un segundo creí haber visto esa calidez que enmendaba como cuando eramos mas chicos.
Pero fue solo un segundo, ya que ella alejo la mirada y se separó de mi.
-De acuerdo... pero no hables de cosas del pasado- ella comenzo a andar hasta fuera a toda prisa. Después de unos segundos la seguí y ella estaba junto a Ethel charlando animadamente.
Todos bajamos a la cafetería de la Editoríal. Después de haber recibido nuestras ordenes nos sentamos en una mesa. Me senté justo al lado de Betty. Y no mentiré diciendo que fue casualidad, lo hice con todas las intenciones del mundo. Al menos, si no volvia a comer con nosotros, habria disfrutado esta unica comida.
-Bien, hermosa... estamos demasiado contento de que te nos unas- Chuck le sonrió.
-Ignoraló Betty, él cree que se ve atractivo o algo asi...- Fangs rodó los ojos.
-Ethel cariño, ¿me veo atractivo?- preguntó Chuck a Ethel.
-Claro que si...- respondió Ethel con la boca llena de comida y sin mirar a nadie mas que a su hamburguesa.
Betty soltó una risita. Una risita tan agradable para mis oidos.
Fangs comenzó a preguntarle a Betty sobre sus estudios y la universidad.
Oberve como a cada minuto que pasaba, se relajaba mucho mas y comenzaba a desprender esa hermosa aura a su arlededor. Observe de reojo su mano sobre la mesa. Tuve que contenerme con todo mi ser para No tomarla de la mano y acariciarla mientras sentía su suave piel. ¿Eso seria raro, no?
Betty soltó esta vez una carcajada mientras se abrazaba la panza con ambas manos. Quien sabe que habria dicho Chuck que fue tan gracioso, ya que todos en la mesa habian estalladó en risa... excepto yo, que no tenia la menor idea de que demonios hablaban.
Terminé mi almuerzo y después de seguir conversando, nuevamente subimos a nuestro piso a continuar trabajando.
-No ha estado tan mal ¿cierto?- pregunté a Betty mientras le abria la puerta y le daba paso para entrar a la oficina.
-De hecho... ha sido demasiado divertido. Creo, que tenias razón...- ella mordió su labio mientras se sonrojaba.
-Claro que sí.- le sonreí de vuelta.
-Espero que sigas queriendo almorzar con nosotros. No somos malos ni comemos... a menos que lo quieras así- alzé una ceja y Betty comenzo a reirse nuevamente.
Justo ahora, este era el tipo de relación que me imaginaba teniendo con Betty en la oficina, no una tensa o callada convivencia. Nosotros habiamos sido los mejores amigos de pequeños, y no fue hasta ese momento que me di cuenta, que lo que habia perdido, habia sido lo mas valioso que pude haber tenido.
-Terminaré y me apresuraré para que podamos salir un poco temprano e ir al Bar...- Betty asintió y tomando su lugar siguió leyendo un manuscrito.

Durante las siguientes horas me dedique explicitamente a que con todas mis fuerzas pudiese concentrarme en lo que tenia que terminar... pero no me resultaba tan facil.
Betty parecia haber encontrado un manuscrito bastante interesante y gracioso, ya que de vez en cuando la escuchaba reirse, y aun cuando lo hacia por lo bajo, era el unico sonido en la oficina aparte de mi teclado, el cual de vez en cuando se detenia para poder deleitarme mejor con su hermosa risa.
Terminé una hora antes de la hora de salida, deje salir un suspiro de satisfacción.
-Creo que ya podemos irnos...- dije. Betty alzó la vista y asintió. Colocó algo entre las paginas que leía y comenzo a colocarse su abrigo.

Ambos salimos y nos despedimos de Ethel. Ella parecio algo sorprendida pero solo asintió y nos deseo buena noche.
En el ascensor Betty tenia la vista baja y veia sus zapatillas. Sonreí ante su gesto de niña chica.
-Son bonitos...- le dijé. Ella elevó la vista y delizo una suave sonrisa por sus labios.
-Gracias, Archie me los obsequio- dijo casi como un susurro. Contuve las ganas de rodar los ojos. Por qué tuvo que decir eso, ahora me sentia opacado por Archie. Incluso cuando no estaba cerca, ¡Estaba cerca!
Ambos nos despedimos de Penny.
Saqué las llaves de mi auto y caminé hasta él. Abrí la puerta del copiloto y observe como Betty se mordía el labio. Claramente estaba debatiendose entre si debia subir conmigo.
-¿Hay algun problema?- pregunté cruzandome de brazos y recargandome en el auto.
-Y si tomamos un taxi. O lo tomo yo y nos vemos haya...- ella se abrazó a si misma. El aire estaba helado.
-¿Estas bromeando? Betty, cuál es tu problema. No voy a hacerte nada si esa es tu preocupacion- ella abrió enorme los ojos y se sonrojo mucho mas de lo que deberia. Podia pensar que podia ser acausa del frio, pero no estaba tan seguro.
-No... no es eso... es solo que...- ella alejo la mirada y evitaba contacto conmigo.
-Solo dilo...- le corte. Estaba claro que ambos nos estabamos congelando y justo ahora podriamos estar en camino ya.
-Seria incomodo. No quiero estar contigo en el mismo espacio tanto tiempo...- ella nego y agacho la mirada. Quiza si ella me hubiese tirado una piedra hubiese sido menos doloroso que aceptar que no me queria cerca. Pero justo ahora, no hiba a complacerla al alejarse de mi, eso no iba a pasar.
-¿Qué quieres que haga para que te subas al auto?- pregunté acercandome a ella.
-No estoy segura, es una mala idea de todas formas- Betty frunció el seño.
-De acuerdo, no hablaremos nada. Absolutamente nada. De todas formas sera como estar en la oficina- dije encogiendome de hombros. Betty volvio a morderse el labio indecisa. Resople con fastidio.
-Betty estoy helandome, porfavor sube al auto- me queje cual niño chico. Betty me observo y una risita abandono sus labios, asintió y comenzo a caminar hasta subirse a él.
-Gracias...- le agradecí cuando estuvimos ambos dentro. Encendi la calefacción y encendí el auto. Mientras nos deplazabamos por Manhattan, podia ver de reojo como Betty observaba asombrada los edificios. ¿Hace cuanto vivia aqui y por qué no conocia casi nada?

Unos minutos después ambos estabamos en el Bar. Al entrar el lugar era mucho mas elegante de lo que imagine pero seguia teniendo un aire  juvenil. Nos dirigimos a una de las mesas alrededor de la pista de baile.
-No entiendo por qué me trajiste a mi- Betty dejo caer su bolso en el asientó de al lado.
-Es porque eres mi asistente... de area en general. Quieres que vuelva a citarte las normas...- acomodé mis brazos sobre la mesa. Ambos quedamos frente del otro por lo que pude ver sus perfectos ojos verdes.

-No... pero quiero decir, pudiste haber traido a tu novia...- Betty imitó mi misma postura acercando su rostro al mio. Sus ojos estaban entrecerrados y parecia desafiarme.

-¿Mi qué?- fruncí el seño confundido al mismo tiempo que hacia una mueca con mis labios.

Holii... espero que les este gustando. Comenten y Voten porfi❤

Casi Nunca Es Suficiente-BugheadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora