Bad&Sick [Meanie]

Cincuenta y cuatro

Cuando Mingyu regresó a su habitación lo primero que vio fue el rostro incomprensible de Wonwoo. Mingyu tardó en notarlo pero cuando desvió la mirada hacía la mano que Wonwoo mantenía alzada justo al altura de su hombro pudo ver el pequeño sobre entre sus dedos, sin duda Wonwoo lo había buscado porque no había manera en el jodido universo en la que él lo encontrara por casualidad, quizás por eso no le sorprendió del todo como aquella mueca inentendible tomaba un significado de enojo contenido.

—No es lo que piensas...— Dijo sin saber como excusarse ¿Cómo iba a saber él que era lo que pensaba Wonwoo?

Wonwoo levantó las cejas fingiendo una emoción de asombro mientras le daba vueltas al sobre. El chico tenía la cara roja, en especial sus ojos y su nariz.

—¿Qué es lo que pienso, Kim?— Preguntó Wonwoo con la voz ronca y lenta, casi tranquila mientras respiraba profundo. —No puedo pensar en nada de hecho... Solo tengo la jodida duda de porque tú tenías esto.

Mingyu apretó los dientes y se cruzó de brazos. No tenía caso mentirle a Wonwoo, él no la había robado y aunque si ocultó el hecho de que la tenía –en realidad le mintió- nada era tan nefasto en realidad.

—Jaejoon me la dio— Fue honesto sin moverse un centímetro. —Me dijo que la abriera cuando creyera que eres honesto. — Quizás lo imaginó, pero Mingyu casi pudo escuchar el rechinar de los dientes apretándose en Wonwoo. —Por eso la tengo.

—¿y ya la abriste?— Mingyu negó. —Claro... porque yo soy el que miente aquí.— Wonwoo rió amargamente dejando caer su brazo. —¿Por qué estás conmigo de todos modos si no me crees? ¿soy alguna clase de película trágica para ti? ¿un bufón?

—No, de hecho, creo que yo soy el bufón para ti. Crees que puedes solo meterte en mi vida y deshacer de ella lo que quieras.

Wonwoo rodó los ojos.

—Esto es por el estúpido de Minghao.

—No, esto es por el estúpido de Mingyu.— Sentenció caminando hasta Wonwoo quedando a solo uno paso de él, su mirada clavada en los ojos confundidos del chico. Mingyu recordó de golpe que Wonwoo siempre había parecido tan inofensivo y delicado, pero no, Wonwoo estaba lejos de ser inofensivo. —Me esfuerzo por ti, quiero ayudarte y estar contigo, pero al final tu en lugar de avanzar solo me arrastras y quieres... quieres... Mierda, ni siquiera se que quieres, me niego a pensar que solo quieres que mi vida sea como la tuya...

—¿Miserable?

—Problemática... Tu no vas a aprender ¿verdad? Wonwoo, ya me canse de sentir lastima de mi mismo.— Mingyu tomó un profundo respiro antes de mirar a Wonwoo a los ojos. —No puedo excusarte más, ni a ti, ni a Minghao...ni siquiera puedo poner excusas para mi. Si tu no deseas cambiar entonces yo no puedo obligarte, y no me puedo obligar a mi mismo a quedarme.

Wonwoo exhaló una pequeña risa.

—¿Me estás tirando?

Mingyu abrió la boca para replicar, sin embargo lo pensó mejor, realmente no tenía caso hablar con Wonwoo, él no lo escucharía y Mingyu ya no quería intentarlo más. Si Minghao no se equivocaba respecto al amor entonces Mingyu ya no lo quería más... Mingyu se rendía.

—Ve a tu departamento, Wonwoo.

—Asi que... Te cansaste de mi— Wonwoo apenas y sonrió mirando al suelo. —yo... ¿Cómo mierda haces esto de girar las cosas? Se suponía que yo estaba reclamándote por mi sobre y ahora tu...

—Wonwoo, ve a casa, por favor.

—¡No!— De repente el chico estalló, su precioso rostro deformado en completo enojo. —¡Se supone que solo te cansas de mi y ya! ¡Esperas que yo me vaya porque no me soportas! ¡¿soy una especie de persona desechable?! Ah, claro, que los chicos perfectos tiran la basura, fui un idiota al creer que te quedarías conmigo... En realidad fui un idiota al creer que realmente le importaba a un chico perfecto ¡Dios! ¡Pero te felicito por soportarme tanto jodido tiempo, Kim!

—Wonwoo...— Mingyu acercó su mano a Wonwoo, sin embargo este lo empujó con tanta fuerza que lo hizo dar varios pasos hacía atrás.

—No pongas esa jodida cara de que te importo...— La voz de Wonwoo tan inestable le dio la sensación a Mingyu de que el chico rompería en llanto. —¿Por qué te quedaste conmigo tanto tiempo si al final solo ibas a dejarme? ¿fue divertido? ¿salir conmigo sabiendo que soy una mierda? Esp... Espero que cuando regreses con tu chico perfecto nunca vuelvas, no quiero verte.— Wonwoo llevó una mano hasta sus labios y se sentó sobre la cama dejándose caer, gruesas lagrimas corriendo por sus mejillas. —Te detesto...

Mingyu quería abrazarlo y decirle que todo estaría bien, sin embargo, si él hacía eso solo terminaría volviendo a lo mismo, solo sería un interminable ciclo otra vez. Se cruzó de brazos para asegurarse de no ir a abrazarlo, para quedarse en su lugar. Tuvo que repetirse una y mil veces que alejarse de Wonwoo era lo correcto.

—Quería estar contigo... Quiero estarlo— Dijo honestamente. —Pero no puedo hacer nada por ti... y no voy a caer contigo.

Wonwoo asintió mirando al suelo. El chico estaba temblando, sus manos sosteniendo el sobre tiritaban como si estuviera muriendo de frio. Mingyu solo pudo imaginar que su cama era un desierto y que Wonwoo estaba perdido en él.

—Cuándo creyeras que yo decía la verdad... ¿no es así?— Mingyu no tardó en comprender que Wonwoo se refería al sobre. Él asintió. Wonwoo alzó el brazo. —Te quiero, Mingyu, pero yo solo puedo caer, por eso no puedo estar contigo... Aunque yo ruegue porque te quedes conmigo se que es mejor que me dejes solo... Soy malo.

La mano de Wonwoo temblaba tanto al igual que su voz que sonaba triste y sincera, rota. Mingyu lo observó con el corazón igual de roto y extendió la mano para tomar el sobre... Él lo abrió.

Porque Wonwoo dijo la verdad.