Capítulo 14

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Después de aceptar la propuesta de Diaval me dormí, ahora estoy buscando ropa en mi closet, me decido por un pantalón roto de mezclilla, una blusa negra de tirantes y una chamarra del mismo tipo que el pantalón, en mis pies coloco unos tenis blancos, desenredo mi cabello y cojo las llaves de mi moto, el casco, mi teléfono y dinero.
Bajo las escaleras corriendo cuando estoy a un paso de salir a el garaje escucho a mi padre llamarme
- Dylan ¿A dónde vas? - ruedo los ojos y me giro para verlo
- Saldré ¿No es obvio? - hago un ademán con las manos
- No regreses muy tarde porque tenemos que hablar - me mira serio
- Lo que sea que me tengas que decir dímelo ahorita porque no creo regresar temprano - me recargo sobre una pierna esperando a que comience a hablar
- Esta bien - suelta un suspiro y se acerca
- ¿Te acuerdas que ayer te dije que me voy de viaje? - hago un sentimiento
- Bueno, hoy sale mi vuelo, así que quería que estuvieras aquí temprano para despedirme de ti pero me has dicho que no... Bueno hija - habla acercándose
- Cuídate, no te metas en problemas, no llegues muy tarde a casa, obedece a Bernarda y no olvides que te amo - acaricia mi mejilla y me abraza
- Tratare de no llegar muy tarde - no correspondo a su abrazo así que incómodamente me separo
- Buen viaje - me despido con la mano y salgo hacia el garaje para ir al Mundo Ilegal, necesito hablar con el gato de Diaval, necesito saber más sobre los planes que tiene en mente para apoderarse de San Francisco

Veremos al papacito de James

Si, veremos a ese idiota

Sexi idiota*

No es sexi, es un feo gato sarnoso, además de idiota

Ajá, ni tu te la crees

mejor calla

Bajo la velocidad de la moto para estacionarme, me bajo y me dirijo a la barra improvisada que hay y pido un Vodka
- Linda noche ¿No? - habla un hombre que esta sentado junto a mí que se encuentra de espalda, su voz es muy ronca por lo que creo que ha de ser un señor de avanzada edad
- A mi me parece igual a todas las demás - me encojo de hombros tomando un trago de mi bebida
- Está muy equivocada señorita - niega con la cabeza sin verme
- Cada quien es libre de expresarse y de opinar y para mi todas las noches son iguales excepto cuando llueve ya que se ven más melancólicas -
- ¿Las noches le traen malos recuerdos? -
- Para nada, solo... -

Rayos, me puse sentimental y eso es malo

Claro que es malo, te estas sincerando con este tipo

- Por lo visto no es fácil de sorprender - habla el hombre
- ¿A qué clase de persona no le gusta esta noche con una hermosa luna llena y un cielo repleto de estrellas? Claro que solo a usted -
- Si me gusta o no ese no es de su incumbencia - digo molesta
- Perdón si la ofendí, solo, olvídelo... .-

Si cree que pediré disculpa por mi mal comportamiento esta equivocado, yo nunca pido perdón
Solo se lo pedí a una persona pero esa persona ya no esta conmigo así que piensen lo que piensen no volveré a pedir perdón nunca

- ¿A qué se dedica usted? - vuelve a hablar aquel hombre
- A algo que a usted no le importa -
- Tiene razón no me interesa pero quiero hacerle compañía y conversar un rato - agacha la cabeza

Esta loco si piensa que haciéndose la víctima me comportare mejor con él

- Mejor deme la cara, ¿Qué sus padres no le enseñaron que hablar con las personas dándoles la espalda es de mala educación? - pregunto enojada porque no me da la puta jeta
- Si señorita pero no creo que usted siendo una hermosa muchacha quiera ver la cara de este viejo feo -
- Entonces pierdo mi tiempo al igual que usted si piensa que puede tener una simple conversación conmigo - me levando de la silla en la que estaba sentada y me dirijo a la moto para montarme en ella, pero antes de prenderla levantó mi mano y hago una seña dando a entender que los competidores se formen para comenzar la carrera.
Perdí mucho tiempo con el tipo ese y no he podido hablar con el gato, y ¿Qué mejor idea que invocarlo con una carrera?

En unos segundos todos están en posición y esperando a que yo me coloque para iniciar la carrera. Entre los competidores busco a el gato pero no lo veo, lo que hace que frunza el ceño

¿Dónde diablos estas gato?

- ¿Buscas a alguien? - habla una voz ronca a mis espaldas que reconozco inmediatamente
- No ¿Por? - volteo y me encuentro con esos hermosos orbes de color indefinido
- Pregunto porque miras detalladamente a cada competidor - aunque sea verdad que lo estaba buscando nunca lo iba ni voy a admitir
- No me digas que estudias a tus oponentes - me mira con una risa burlona
- No.- contesto tajante
- Que seca - hace una mueca
- ¿Algún problema? -
- En realidad no, no me sorprende si viene de ti - se encoje de hombros
- Es bueno saber eso - sin decir nada me alineo con los demás competidores
- ¿Sabias que es de mala educación dejar a las personas con la palabra en la boca? ¿Y también irte sin despedir? - habla fingiendo indignación
- Ah no sabia qué eres un gato con educación - lo miro con una gran sonrisa fingiendo estar sorprendida
- Así es, un gato educado. - sonríe y se lleva una mano al cuello para acomodarse la corbata invisible que según él carga, esa sonrisa se borra y frunce el ceño
- Espera, ¿Me dijiste gato? -
- ¿Algún problema? - río
- Muchos pero uno de ellos es que no me gusta el apodo gato -
- ¿Por qué? - pregunto aún riendo

Tres

Dos

Uno

FUERA...

Salgo a toda velocidad haciendo que el aire me golpee de frente, siento la adrenalina recorrer todo mi cuerpo, por un momento cierro los ojos dejándome llevar, sintiéndome libre, liberando todo lo que no puedo sacar, siento como mis hombros son liberados de todo el estrés, como mi corazón se ablanda momentáneamente; no corro porque si, sino porque se ha vuelto mi hobby, mi forma de sacar todo mal momento o recuerdo de mi vida, me permite pensar, son tantas emociones encontradas que no puedo describirlo con exactitud.
De repente unos ojos con orbes de color indefinido aparecen en mi mente

¡Pero que diablos!... Y a ese idiota quien lo invito a meterse en mi mente

Hasta a tu cerebro le gusta

¡¡Maldito cerebro traidor!!

Abro los ojos, justo a tiempo, estoy a unos metros de la meta. Volteo a los costados confirmando que sigo encabezando la carrera, y efectivamente, bajo la velocidad ya que pase la línea de meta
- Nunca te ganaré ¿Cierto? - habla el gato a lado mío a lo que suelto una carcajada
- Nunca me podrás superar - afirmo
- No te confíes Pimpernel, pero tampoco me subestimes - ríe de lado

Engaño De Amor (En proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora