Alyn Bolton hija de Roose Bolton y Elia Martell.
Si todos conocemos lo sucedido con Elia y de que fue esposa de Rhaegar Targaryen, sus dos primeros hijos fueron asesinados brutalmente pero por suerte lograron salvarla ocultandola en Fuerte Terror o...
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Después de un largo viaje al fin se detuvieron. Las miradas rápidamente se pusieron en ellos mas en la joven quien no se dejo intimidar por eso. Robb camino hacia ella, tenso. No podía creer que no había tomado en cuenta lo que el le dijo. Pero por otro lado una parte de el ya se lo esperaba y se alegraba de volver a verla.
- ¿Que haces aqui, Alyn? - Hablo en voz baja tomando la cintura de su esposa para bajarla del caballo. Su rostro sin expresión alguna.
- ¿Pensabas que te dejaría hacer esto solo? - Pregunto en su mismo tono de voz.
No, no lo haria.
- No puedes estar aquí, es peligroso. Ya lo habíamos hablado. Volverás a Winterfell a penas descanses del viaje -
- No voy a pelear, puedo ayudar de otras maneras. Solo deja que me quede contigo - Sus ojos se conectaron.
Robb maldijo internamente. ¿Como decirle que no a esa cara, a esa mujer que tanto había extrañado en estos días?.
- Maldita sea, Alyn -
Ella lo tomo como un si.
- Nathaniel - Rosse Bolton hablo con ese característico tono frío. El mencionado dio un paso al frente - ¿Por que haz permitido que mi hija venga?.
Esa muchachitadebía obedecer lo que se le ordenaba. Penso frustrado.
- Lo intente. Pero usted sabe mi lord, como es su hija - Le dio una mirada de reproche a la mencionada.
Lo sabia, sabia como era Alyn y era algo que le molestaba, no poder controlarla.
- ¿Que acaso no puedes contra ella, Nathaniel? - Sus puños se cerraron a sus lados.
Robb sabia hacia donde iba la discusión y no lo permitiría.
- Escolten a mi esposa hacia mi carpa - Ordeno a sus guardias antes de mirarla - Te veré en un momento.
Ella asintió y dejo que los guardias la guiaran.
(***)
La noticia se había expandido con rapidez, Ned Stark estaba muerto. Un enorme nudo apareció en su garganta, Alyn no tuvo la oportunidad de hablar mucho con el, pero sabia que era un buen hombre, lo pudo comprobar. Robb salio de la carpa con rapidez, Alyn se puso de pie dispuesta a seguirlo pero Nathaniel lo impidió tomando su brazo.
- Déjalo -
- Es mi esposo, debo apoyarlo ahora mas que nunca - Su voz salio en un susurro. Robb estaba enfrentando dos perdidas ahora, debía estar con el.
- Solo deja que se calme un poco, dale tiempo - Recomendó. El cuerpo de Alyn tembló antes de asentir.
Minutos después supo que era suficiente espera, debía ir con el. Sin decir nada camino hasta alejarse de los caballeros, abriéndose paso entre ellos.
