Treinta Y Nueve

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|CAPITULO TREINTA Y NUEVE|
¿Y tu creiste que ella se enamoraría de ti?

|CAPITULO TREINTA Y NUEVE|¿Y tu creiste que ella se enamoraría de ti?

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- Alyn... - Su nombre salio de sus labios sin poder creerlo. Ella estaba ahi justo frente a el y en sus manos sostenia un pequeño bulto cubierto por mantas.

- Robb... - Exclamó sin aliento.
Ambos pares de ojos se cristalizaron temiendo que solo fuera un sueño, un doloroso sueño.
A pasos temerosos pero rapidos se acerco a ella tomando su rostro entre sus manos y con los pulgares se deshizo de las lágrimas que bajaban por sus mejillas.

- ¿Eres real? - Pregunto en un bajo susurro y cuidadosamente libero una de sus manos sujetando muy bien a su bebé con la otra para llevarla a la mejilla del Stark.

- ¿Tu eres real? - Pregunto con una sonrisa apoyándo su frente en la de ella.

- No sabes cuanto soñe con esto: Con que todo fuera una mentira, un mal sueño del que anhelaba despertar -

- Estoy aqui, cariño. Estoy justo aqui - Sus brazos la rodearon apoyando su rostro en el hueco de su cuello, mientras la mano de su esposa iba a su despeinado cabello rizado y sus ojos se cerraban con fuerza.
Sintió la necesidad de pellizcarse para ver si no estaba soñando.
Robb dejo un corto beso en su cuello antes de separarse al percibir un suave movimiento.
Alyn sonrie entre lagrimas destapando un poco el rostro de su bebé para que su padre pudiera verla.

- Tenias razón, fueron dos -  Los ojos azules se humedecieron dandole una rapida mirada antes de ver de nuevo el pequeño y fragil rostro de su hija quien abrio los ojos con lentitud - Tienen tus ojos.

***

El camino había sido largo y lleno de tensión, el ambiente se sentia pesado con todo lo ocurrido con Nathaniel. Robb no podia creer hasta donde habia llegado la obsesión que el tenia hacia su esposa.
A pesar de su urgencia por llegar al castillo negro todos necesitaban descanso asi que se detuvieron y formaron un pequeño campamento.

- Hay que dormir por hoy, a sido un dia de muchas sorpresas -

- Garet - El hombre se giro ante el llamado del Stark - Muchas gracias.

- ¿Porque? - Pregunto aun con sorpresa.

- Por mantener a mi familia a salvo -

- No tienes que agradecer nada, haria lo que fuera por ella y esos bebés - Sonrie con cariño y no habia duda de cuanto queria a la muchacha. Conversaron un poco mas mientras observaban a la mencionada hablar con la mujer que lo había ayudado.

- Ella te necesita mucho. Supongo que no estás enterado...

- ¿De que? - Pregunto con el ceño fruncido.

El invierno se acerca // Robb Stark//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora