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-¿Pero qué mierda? -- lanzó Jungkook, alarmado y empezó a subir sus pantalones sin importarle llenarlo de lubricante. Corrió tratando de huir de lo que fuera hacer aquel individuo de ojos azules.

Yoongi lo siguió hasta la cocina, terminando de ingresar en la ventana. Jungkook tomó un cuchillo, levantandolo de forma amenazadora.

- ¡Fuera de mi casa, demonio!

- ¿Demonio? Yo no soy un demonio. Soy un vampiro, y vengo porque tú eres mi amo y humano proveedor de sangre. - ladeó la cabeza confundido.

- ¿Qué es eso? ¿Me vas a chupar la sangre... cómo en las películas?

- No sé de qué hablas, pero necesito meter mis colmillos en tu cuello, para sobrevivir los próximos diez años.

¡Mierda! Estoy perdido. Nunca pensé morir a manos de un vampiro. Nunca pensé que esas cosas fueran reales. Fue lo que el castaño pensó y se detuvo a observar de pies a cabeza al pequeño vampiro, notando que no era como en las leyendas los pintaban, de alguna manera el chico parecía verse muy inocente y lindo, pero eso no omitía que fuese a quitarle la vida.

¿Cómo una cosita así de linda se supone que va matarme?

Y lo peor de todo... moriré virgen.

Jungkook empezó a hiperventilar de frustración, llamando la atención del vampiro quien hizo una mueca de duda.

- ¿Por qué lloras?

- ¡Por nada! -- dijo Jungkook con un tono molesto, recuperando la compostura.

- ¿Lloras por nada? -- Yoongi trató de acercarse, pero el filo del cuchillo de Jungkook le miraba amenazante.

- Te he dicho que te alejes, o voy apuñalarte.

Yoongi no supo en qué momento hizo levitar el cuchillo de Jungkook fuera de su mano y lo observó en el aire.

-¿Que se supone que haces? ¿Estás tratando de matarme con mi propio cuchillo?

- No. No se cómo pasó, el señor Park dijo que iría desarrollando mis poderes poco a poco. Supongo que era de algo como esto que hablaba.

- ¡No es gracioso! Estos podrían ser mis últimos minutos de vida y tu solo te dedicas a  jugar.

- Lo siento. Solo déjame beberte, por favor. Hueles muy bien y el hambre está matándome, esto es nuevo para mí, así que te pido por favor que solo me dejes tomarte.

- ¡No! -- Jungkook empezó a correr en dirección a la sala, y Yoongi extendió sus pequeñas alas tratando de tomarlo.

"Si intenta huir, estás muerto"

Yoongi recordó la palabras de Park, así que de un momento a otro pensó deseando tomar a Jungkook y así fue, en cuestión de milisegundos ya estaba sosteniendo a Jungkook, trepado como una araña en su espalda.

-¡Wow!, esto es genial, quizá solo empiece a desear más cosas, y se me concedan.

Jungkook trató de abrir la puerta principal de su casa, pero le fue imposible cuando Yoongi hizo su cuerpo pesado y él sintió como si más de una tonelada estaba encima de él y cayó de rodillas.

Empezó a llorar pensando en su hermano, en Hoseok y hasta en su tonta novia. El perder la vida no es tan doloroso como saber que la vas a perder, y peor aún siendo un virgen.

- ¡Suéltame, suéltame, suéltame garrapata!. Yo no moriré siendo un virgen, ¿Me oíste? Jamás.

- Si quieres yo puedo ayudarte con eso. No sé de qué trata pero tengo poderes si quieres algo, solo pídelo.

- ¿Puedes hacer una chica se enamore de mí antes de morir?

- Mmh, no lo creo porque hace unos instantes deseé que llegaras a mí y accedieras a darme tu sangre, pero no funcionó, supongo que solo hace cosas conmigo.

En ese entonces Jungkook pareció pensar. Yoongi olía muy bien, y parecía ser muy flexible, aparte de que era muy tierno y tenía una carita llena de inocencia.

¿Como se sentiría ver su cara manchada de mi semen? Su cerebro mostrando una imagen erótica del vampiro, sintió su pene palpitar y no lo pensó dos veces.

- Claro que podrías ayudarme. -- sin duda, una persona racional estaría más preocupado por morir que por dejar de ser virgen, pero para Jungkook el hecho de dejar de ser virgen al menos moriría feliz.

- ¿Cómo?

- Ven. -- Jungkook lo jaló de la muñeca, en dirección de la habitación, recogió su laptop que aún reproducía el video porno que veía anteriormente.

- Quitáte la ropa.

Increíblemente Yoongi empezó a desnudarse, dejando a la vista sus rosaditos botoncitos, y su pequeña cintura a la vista del humano.

- Estoy un poco pálido, espero que no te moleste, pero es que no he comido.

- Está bien para mí, estás muy...muy precioso.
Date la vuelta y pon tus manos sobre la cama.

Quizá en su vida pasada Yoongi hubiera sabido lo que iba a pasar en ese instante, pero ahora, en su vida nueva era demasiado inocente. Y precisamente no estaba con alguien que lo fuese o al menos apreciara eso.

Hizo caso dejando su suave trasero expuesto al castaño, quien lo veía expectante, tomando el bote de lubricante y untando su pene con la sustancia se acercó a Yoongi rozando su entrada con la punta.

Su pene ya estaba goteando semen preseminal, y él siendo un virgen sabía que se correría rápido, pero sólo quería al menos dejar de ser virgen por fin.

Ingresó su pene de una sola estocada en el culo de Yoongi, logrando sacarle un estruendoso gemido que solo lo hizo excitar más y aumentó el ritmo logrando que el pequeño vampiro empezara a llorar, dándole una mejor imagen exquisita, para su primera vez siendo un precoz, se puede decir que dos minutos fueron más que suficiente  para sentir que iba a correrse, pero él quería cumplir todas sus fantasías así que no dudó ni un segundo más...

Volteó a Yoongi, ejerciendo un poco de fuerza hasta posicionarlo de rodillas.

-Abre tu boca y saca la lengua.

Para cuando Yoongi lo hizo inmediatamente dejó vaciar todo su semen en la boca del vampiro, entonces el iris en los ojos de Yoongi se empezó a formar de un color verde neón, mientras sus mejillas se ruborizaban y terminaba de tragar sonriendo un poco al sentir el elixir de sangre y recordaba cuando Park le dijo como sería el sabor de la sangre, y este era exactamente así.

- ¿Esto es... sangre, mi amo?







Bébeme • [Kookgi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora