Bébeme • [Kookgi]

34

Jungkook despertó al momento que escuchó el estruendoso ruido de la ventana de su apartamento rompiéndose. Los pequeños pedazos de vidrios estaban en toda la zona del sofá de la sala y bufó cuando vió a su gata ingresar con las patas llenas de lodo.

-Michi ¿Qué mierda pasa contigo? ¡Joder! Te he dicho que no vengas a ensuciarme el cobertor. -- Jungkook vio como el felino a animal lo ignoraba para caminar en dirección a la cocina y entonces vió una piedra quizá del tamaño de su mano, deduciendo que había sido el objeto con el cual habían roto su ventana.

Caminó hacia la ventana con cuidado de no pisar los vidrios, deteniéndose a observar quien había sido el causante, pero al no ver a nadie solo se dió la vuelta, caminando en dirección a la cocina. Tomó papel periódico de los cajones grandes y con la escoba recogió y limpió hasta dejar todo limpio.
Estaba por levantarse cuando sintió el peso de su gata saltando en su pecho. Tosió en medio de un estornudo cuando sintió la peluda cola pasarse por su nariz, pero rápidamente desiso el ceño de su frente cuando notó que el animal estaba frotándose en su pecho.

Jungkook sabía que ese gesto lo hacía cuando se sentía triste así que empezó a acariciar la cabeza del felino quien soltó maullidos de placer al sentir las caricias de su amo. La gata se levantó permitiendo a Jungkook al fin levantarse e ir a dejar los vidrios rotos.

Regresó a la habitación, pero nunca pensó encontrarse a Yoongi ya despierto, sentado en el respaldar de la cama y un poco perdido. Se acercó lentamente, siendo cuidadoso de la reacción del más bajo hasta llegar a la orilla de la cama.

-¿Yoongi...?-- el pálido lo vio fijamente, entonces Jungkook pudo apreciar sus ojos siendo de un color negro profundo. Muy bonito, y agradecía saber que las pequeñas pequitas bajo sus ojos hacían un lindo contraste con la papeleta de colores.

-Yo...no sé qué me pasa, me están temblando las piernas-- el pálido quitó la sábana de cuerpo y suspiró al notar que gracias al cielo todo estaba normal.-- Jungkook...

-¿¡Tú!...me recuerdas?-- interrumpió el castaño, con el rostro iluminado y sus ojos brillando de gozo.

- Sí ¿Por qué no habría de hacerlo? Tú eres mi novio ¿No es así?-- Jungkook abrió sus ojos, definitivamente no esperando eso, pero tampoco podía decirle que no, siendo que la idea no estaba tan mal.

- Claro, nosotros somos...novios-- Jungkook se movió de su lugar directamente abrazar al más palido quien le devolvió el abrazo inmediatamente. En ese mismo instante que lo soltó, meneó un poco el cuerpo de Yoongi notando que aquellas heridas de sus alas solo era una cicatriz y supuso que durante las veinticuatro horas que el vampiro había dicho, se había regenerado.

-Disculpa, pero...¿Podrías decirme que pasó?-- Jungkook se detuvo a pensar, ¿qué era lo que iba a decirle ahora? Definitivamente para él, Yoongi iba hacer un total desconocido, pero resultaba que por alguna razón el más bajo lo recordaba.

-¿Qué es lo último que recuerdas?

- Yo...sólo...recuerdo que salimos a un bar y nos fuimos a un motel, me ofreciste un trago, pero de un momento a otro todo se oscureció-- el castaño frunció el ceño un poco consternado, porque para el esa información era totalmente nada coherente.

Lo que no sabía, era que Yoongi inconscientemente estaba recordando sus últimos momentos antes de la transformación de humano a vampiro, y que posiblemente estaba confundiendo a Jungkook con su ex novio- el cual lo transformó- quizá se parecían.

-Eh...-- ¿qué se suponía que debía hacer?, ¿Mentirle, al hacerse pasar por alguien que desconocía su identidad? ¿O decirle la verdad a costa de todo? Jungkook estaba sufriendo un debate mental, pero no quería que el rubio sufriera, así que prefirió tomar la primera opción-- Sí, te desmayaste, pero ya estás aquí, bien ¿No es genial?-- el menor sonrió.

Yoongi suspiró agradeciendo al fin sacar todas sus dudas de la mente y volvió abrazar a Jungkook, quién tenía algunas preguntas en mente. ¿Pero a quién se suponía que debía preguntarle? El era ajeno a cualquier cosa respecto a los vampiros.

El sonido de las tripas de Yoongi llegó a los oídos de ambos, haciéndolo sonrojarse. Jungkook se separó de él notando que solo estaba en ropas menores, entonces se puso de pie en dirección al armario y le dio un poco de ropa.

-Vistete, iré a prepararte algo para comer, te veo en la cocina ¿Vale?-- Jungkook le guiñó un ojo para darse la vuelta y salir de la habitación. Yoongi estaba embobado, empezando a cambiarse, notó que la luna estaba muy grande al asomarse por la ventana y vio las estrellas como si nunca las hubiera visto.

Todo se debía a que cuando el eran un vampiro siempre tenía distorsión de colores debidos al cambio de iris y por eso ahora le parecía muy hermosa la imagen frente a él, pero no tan hermosa como cuando se asomó por la cocina, viendo a Jungkook quien veía a su gata comer mientras le limpiaba las patas con una toalla mojada. El animal forcejeaba un poco, pero el hambre le podía más y Jungkook no desaprovecharía tal oportunidad.

-El ramen, estará en dos minutos, iré al baño, espera por mí ¿Sí?-- el castaño se fué al baño dejando a Yoongi en la cocina. Estaba por sentarse cuando escuchó el timbre sonar, dudaba si ir o no ¿Pero qué se suponía que podía pasarle? Solo eran cosas tontas pensar algo malo, así que se puso de pié abriendo la puerta. Se encontró con una pareja que estaban sostenidos de las manos mostrando una rostro de incertidumbre.

- ¿Yoongi?

***

Aclaración: el ex novio de Yoongi efectivamente si era Jungkook, pero el vampiro, osea el de la otra dimensión. Lo que significa que ellos ya estaban destinados a estar juntos. ^^

Estaba pensando en hacer una secuela de eso, osea en aquel tiempo donde Jungkook es un vampiro y Yoongi el humano. Nose, talvez en algún futuro ya que a "Bebeme" le quedan pocos capítulos. Pero aún no se, de igual manera cuídense *v*