Bébeme • [Kookgi]

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Jungkook sintió esas palabras como un incentivo a que su organismo se activara, y sonrió observando con deseo el delgado cuerpo del pálido.

- Entonces haré contigo lo que quiera. -- se inclinó encima del cuerpo de Yoongi, besando su cuello, para acariciar  con la punta de su lengua, subiendo por toda la extensión hasta llegar atrás de la zona de la oreja. Sintiendo el cuerpo del más bajo retorcerse debido a la tensión que el castaño estaba creando.

Jungkook chupó el lóbulo de la oreja del otro, y bajó hasta sus pezones para pellizcarlos, ganándose un gemido de los labios bonitos e hinchados de Yoongi. Su pene parecía querer formar un agujero en su ropa debido a lo duro que estaba, vio al más bajo respirar de manera agitada cuando fue bajando desde su pecho, pasando por su cintura hasta llegar a su vientre y bajó con sus dientes parte de la ropa interior, quien abrió sus piernas en total instinto al soltar un jadeo desesperado, cuando el castaño rozó sus suaves labios en la punta de su miembro, por encima de la ropa.

-Joder -- dejó salir todo el aire que mantenía en sus pulmones, pero volvió a tragar cuando su ropa interior fue totalmente despojada y su duro miembro dio un pequeño golpe en su vientre, con la punta rojiza, rogando por un leve contacto, y Jungkook se lo dio, cuando rozó parte de su boca, tomando la punta de su miembro  entre sus labios empezando que chupar, sin compasión.

Soltó un gemido cuando sintió lo caliente de la cavidad bucal del más alto atraparlo, pero eso no fue suficiente cuando lo vio descender por sus testículos, bajando por la parte que dividía sus genitales con su entrada, mordió su labio inferior y tembló cuando sintió la lengua de Jungkook rozar en esa sensible zona hasta chuparlo por completo.

Yoongi sintió ver estrellas cuando Jungkook jugueteó con su lengua, dejando suficiente restos de saliva, como para meter un dedo, y lo disfrutó demasiado cuando sintió el dígito rozarse dentro suyo, embistiendolo una y otra vez. Un segundo dedo fue lo que lo hizo apretar con los dedos de sus pies la sábana hasta que un tercer dedo lo atrapó entre sus entrañas dirigiéndose a tocar su punto dulce.

-¡Ah, sí, maldición, sigue a... -- se cortó cuando sintió venir su orgasmo, pero como si de hacerlo rogar se tratara, Jungkook sacó sus dedos haciéndolo frunciendo el ceño -- Sigue, por favor, estaba por venirme.

-Vengamonos juntos -- el castaño quitó su camiseta, dejando ver su tan entallado torso, para empezar a desabrochar sus pantalones, Yoongi lo observaba con demasiada desesperación,  vió aquellos gruesos muslos, su miembro grueso y totalmente erecto, haciendo relucir sus venas hinchadas, no aguantó más y se vino sin poder controlarlo.

Estaba total avergonzado cuando limpió parte de su vientre y pecho, pero el castaño se acercó a él sonriendo, sin recriminar le nada, le quitó sus manos hasta unirlas a la cama, se posó entre sus piernas empezando a lamer los restos de semen en su pecho, bajando por su vientre hasta llegar a su miembro y terminar de chupar, sacando hasta el último poquito, mientras veía aquel cuerpo retorcerse de placer

-Te vas a venir conmigo, porque así quiero que sea. -- Yoongi no supo que tanto escondían esas palabras hasta que sintió que Jungkook empujó dentro suyo sin compasión, haciéndolo morder su labio inferior mientras apretaba sus hombros con demasiada fuerza. Lo sentía arder, pero aún así empezó a moverse, yendo a besar los labios del más bajo, viendo como sus ojos estaban aguados y su respiración se le cortaba.

Sentía las uñas del más bajo apretarle, ardiendo en la zona, pero al momento que terminó de unirse a él, hasta golpear hasta el fondo, el gemido agudo que lanzó el pálido lo hizo olvidarse por completo y se sumergió en aquella vista placentera del cuerpo bajo él, abierto de piernas para él, siendo penetrado por él, sólo para él, joder, se sentía tan bien, que no podía pensar en nada más que satisfacerse a el y Yoongi mediante lo estaba reclamando una vez más como suyo.

Mientras seguía follando con más fuerza, mordió parte de la zona del hombro haciendo que Yoongi le diera una palmada en el hombro que estaba totalmente rojo, pero solo lanzó una risita entrecortada por lo bajo, cuando seguía golpeando con mas fuerza, como si el placer de Yoongi fuera suyo, como si de hacerlo gozar se tratara de poder respirar.

La armonía en la que los chasquidos de sus pieles, desbordando sudor por los poros, mediante los movimientos, se mezclaba con el chillar de la cama que se movía sin compasión.

A Jungkook el ruido era lo que menos le podía importar en esos momentos, pues la estrechez de Yoongi le hacía querer romper la cama de tan fuerte que estaba golpeando dentro de él, rozando su punto dulce con desesperación, en busca del orgasmo, las muecas que el más bajo le daba, el temblor hasta en lo más recóndito de su ser, solo le decía lo que en realidad le estaba haciendo sentir, el solo quería quedarse follandolo hasta que las energías se le acabaran.

-¡Ah...mierda! ¡Jungkook, joder! -- soltó Yoongi cuando sintió que la fuerza seguía aumentando, a pesar que ya lo había estado golpeando con suficiente fuerza y lo único que le quedaba era abrazarse aquella espalda sudada encima de el y los deditos de sus pies enrollarse en las sabanas de la cama que se movía como un trampolín.

-Quiero romperte, quiero que te deshagas bajo mío, quiero me sigas viendo de esa manera, amor. -- lanzó Jungkook con los mechones de su frente pegados a esta y las pestañas empapadas de sudor, su mandíbula marcada, mediante apretaba los dientes.

-Entonces rompeme. -- lanzó Yoongi y fue en cuestión de segundos cuando sintió el tirón del climax de Jungkook mezclándose con el suyo al momento que ambos se corrieron, desatando aquellas corrientes de calor en toda su espina dorsal y aquella corriente eléctrica recorrerles desde la coronilla hasta la punta sus pies, convertidos en unos sólo.

Ellos eran uno sólo.