Bébeme • [Kookgi]

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-¿Entonces qué dices? -- preguntó Nataly, desabotonando su camisa para dejar su sostén a la vista, mostrando parte de sus pechos, dándole una imagen realmente sensual.

Jungkook estaba sudando, sintiendo sus manos sudar por igual, mientras veía el espectáculo. Ella tomó su mano para ponerla en uno de sus pechos, sintiendo la suavidad de un seno que nunca había sentido antes.

Se estaba empezando a excitar cuando ella lanzó pequeños gemidos de su boca. Pero olvidó eso por completo cuando vió a Nataly quitar su camisa y quedar expuesta de todo su torso. Parecía que a ella no le importaba cuando empezó a deslizar sus pantis por sus piernas, bajandolas por completo hasta sus pies.

Jungkook estaba estático sintiendo como su miembro se aprisionada en su pantalón, la vió caminar hasta una de las banquetas posicionándose en cuatro, mientras la falda se le subía y pudo admirar su parte íntima frente a él.

Jungkook solo había visto algo así en el porno, cuando se masturbaba en su pc, pero ahora...era en realidad.

¿En serio estaba a punto de follarse a una chica?

¿Cómo era que había llegado hasta eso?

Por un instante pensó que quizá estaba soñando, pero supo que no cuando la voz de ella llegó a sus oídos.

-Jungkook  ¿Qué esperas? Estoy aquí para ti.

No supo en qué momento esas palabras le recordaron a Yoongi, y sintió su pecho oprimirsele como un sentimiento de culpa posicionarse dentro de él.

¿Qué era lo que sentía? ¿Cómo podía pensar en el vampiro en un momento como ese?

Se suponía que perder su virginidad con una chica hermosa era lo que había pasado soñando toda su estancia en el instituto, pero ¿Por qué tenía aquellos pensamientos de nuevo?

Yoongi no era nada de él ¿ erdad? Solo era un vampiro que... un día antes le había dicho sus sentimientos, tal vez indirectamente, pero no era lo suficientemente estúpido como para no interpretar tales palabras.

No. No, no puede ser posible, él y yo no podemos estar juntos. No podemos.

Trató de olvidarse de aquellos pensamientos, deslizando su cremallera para sacar su miembro, recordando que la chica aún estaba esperando, así que luchó contra sus sentimientos de salir corriendo lejos del lugar. Sin duda alguna, los pensamientos locos como decir 'que no deseaba eso' le acompañaban. Y no mentía cuando su cuerpo le decía que se quedara para por fin saber lo que sentía estar con una chica, pero en sus adentros solo le gritaba que parara, que no lo hiciera.

Aún así se acercó a ella tomándola de la caderas mientras ella torcía su nuca por segundos, esperando a que él iniciara.

El castaño respiró profundo sintiendo arder sus entrañas y la frustración se apoderó de el cuando ingresó en ella escuchandola lanzar un gemido.

Para su sorpresa no fue la gran cosa como siempre lo imaginó, se sentía caliente, claro que sí, pero ¿Dónde estaba la magia? ¿Dónde estaba aquello que siempre sentía cuando estaba con Yoongi? Empezó a moverse para poder negar los reproches de su ser, pero todo fue en vano cuando nada cambió. La sensación de ser tragado por la chica sí era satisfactorio pero no existía aquella estrechez que sentía con con el pálido.

Aquella vocecita ronquita y su piel pálida siendo rosa por marcas de sus dedos incrustados en su piel o aquellos movimientos torpes e inocentes no estaban. Todo se sentía tan monótono y básico, siendo tan lugrube, sin ninguna pizca de sentimiento o aquella corriente eléctrica que corría por su espina dorsal.