v e i n t i u n o - nj.

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— ¡Cerecitos! — llamé su atención cuando la visualicé sentada debajo de su árbol, a lo que ella me devolvió una mirada asesina, pocas veces lo hacía, pero cuando adoptaba esa expresión, aunque ella pensase que daba miedo, y a mí me parecía meramen...

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— ¡Cerecitos! — llamé su atención cuando la visualicé sentada debajo de su árbol, a lo que ella me devolvió una mirada asesina, pocas veces lo hacía, pero cuando adoptaba esa expresión, aunque ella pensase que daba miedo, y a mí me parecía meramente adorable.

— ¿De verdad vas a llamarme así, Kim NamJoon? — sonó realmente seria y madura en comparación conmigo, cosa que nunca me pasaba con otras personas, nunca. Song HyeRi no dejaba de sorprenderte nunca.

— ¿Leemos? — sugerí, sin responder a su pregunta, a lo que ella solo me dedicó una sonrisa cálida que esfumó su mirada seria en cuestión de segundos.

Me senté a su lado, y a continuación ambos sacamos un libro de nuestra mochila, ella apoyó su espalda en el tronco del árbol y no tardó en sumergirse en la lectura. En mi caso, tumbado sobre el césped, me costó algo más concentrarme. No había dormido mucho los últimos días, y al principio mi atención se centraba en HyeRi leyendo, o incluso miraba a las zonas llenas gente, y le prestaba más atención que al libro. Finalmente notaba los ojos cerrándose, y no me quejé, deseaba dormir un poco, porque la agencia y las clases no me lo habían permitido las ultimas semanas.

La tranquilidad duró poco, y mis ojos se abrieron de golpe, haciendo que cambiase de posición, y también me sentase bruscamente. Al mirar hacia mi izquierda, la chica ya no estaba, no había rastro de ella, pero sí de sus posesiones. Así que suponía que a lo mejor había ido a por algo de beber o a buscar baños.

Me llamó la atención el libro que estaba leyendo, y es que estaba cargado, se veía muy ancho aunque el libro, de por sí, no parecía tener muchas páginas. Lo agarré y, nada más estar en mis manos, un papel de deslizó hasta el suelo. Cuando lo recogí y lo abrí, me sorprendí gratamente:

"Lista de cosas que hacer en verano"

¿De verdad HyeRi también era el tipo de gente que escribía cosas como estas? No dejaba de sorprenderme, y hoy había sido completamente impredecible. Quise seguir leyendo, puesto a que mi curiosidad había aumentado terriblemente:

-Quiero montar en bicicleta cerca del río.
-Hacer un picnic un día soleado.
-Visitar muchos más museos.
-Leer los libros que me regalaron.
-Ir al parque de atracciones.
-Ver más películas en el cine.

Iba leyendo una por una y parándome: montar en bicicleta, picnics, museos, libros, parque de atracciones, cine.
Ese era su verano perfecto.
Era cierto que no había ningún nombre que el que haría estas cosas, pero yo quería suponer que ya tenía planes con alguna amiga, con HyeJin o incluso con JiHyun. La verdad es que me entristeció un poco, porque me gustaría ser más cercano para poder hacer todas estas cosas con ella.

Fue un impulso algo tonto, ni siquiera lo pensé, pero deslicé el móvil de mi bolsillo y tomé una foto de aquella lista de cosas. Sabía que no me iba a acordar, y quería hacerlo, de verdad que quería acordarme y también hacer esto. Me había sorprendido porque no era lo típico que alguien haría en verano; HyeRi solo quería más libros y más calma en esta cálida época, y podía entender porqué, a mí todas estas cosas también me harían mucha ilusión.

Una vez había guardado mi móvil, guardé la nota en el libro, pero me di cuenta de que había más, por no decir muchísimas más.

"No deberías estar haciendo esto, NamJoon, no deberías. ¿Qué te interesa tanto?" , hablaba solo, intentando convencerme, intentando mirar a otro sitio y no al cargado libro de la chica que tanto me llamaba la atención.

"A la mierda, ya se lo pagaré", me di por vencido, sabiendo que iba a mirar la siguiente pagina por mucho que me intentase convencer.

La siguiente nota que abrí realmente me sorprendió muchísimo, hizo que mi corazón se acelerase bastante, nunca pensé que lo leería de ella:

"Cosas que alguna vez me gustaría preguntarte, Chico Converse"

No podía entender como podía hacerme sentir nervioso y acelerar mi corazón con solo un trozo de papel, pero éste se dirigía a mí, y nunca había estado tan dispuesto a leer algo:

"¿por qué estás siempre ahí?"

Era cierto que ella no sabía el por qué ciertamente, yo conocía su motivo: y es que quería leer libros y encontraba esa paz en Yeouido, esa que carecían la mayoría de lugares. Pero yo iba a por inspiración, lo que no sabía era que acudí aún más cuando llegó aquel día de otoño, y que nos veíamos casi todos los días, que me parecía una completa inspiración. Song HyeRi era una de mis inspiraciones: la desconocida, intrigante inspiración.

"¿tienes mi edad?"

Esta ya la sabía, ya estaba resuelta. Empecé a sospechar que la carta había sido escrita después de verme un par de veces, hace un tiempo.

"¿cómo te llamarás?"

Exacto, fue escrito hace unos meses.

"¿en qué instituto estás?"

Esta también tenía respuesta.

"¿escribes sobre alguien?"

Me paré en aquella pregunta, HyeRi no sabía si escribía sobre alguien o sobre qué demonios escribía, la verdad era que los temas que protagonizan mis letras eran muy variados, pero ella había inspirado muchas.

"¿eres solo un estudiante agobiado al igual que yo?"

Esta me llamó todavía más la atención.
No lo sabía.
Era un muy buen estudiante, no estaba agobiado para nada, pero odiaba hacia dónde se dirigía mi vida sin música, y esa parte sí que me agobiaba.
¿Te podría decir que sí, que era igual que tú?

El hecho de que hubiese escrito sobre mí en aquel papel y también las cosas que le gustaría hacer en verano me parecía un gesto terriblemente adorable, y sin duda mi corazón daba vuelcos como respuesta a esto.

Era como una niña pequeña.
Song HyeRi, la chica que muestra ese lado fuerte y seguro, esa chica que pensaba como si tuviese diez años más, que tenía una inteligencia emocional increíble, al fin y al cabo tenía un lado tierno, uno que probablemente haría que se le encogiese el corazón a cualquier persona. Pero poca vez lo mostraba, tenías que sonsacarlo tú, tenía que tener confianza.

Volví a guardar la nota en su libro, al igual que la primera. No me sentía del todo mal por haberlo leído, solo sentía que había conocido a la chica cerezos un poquito más hoy, y que sus planes de verano eran mis ideales, tristemente.

-ˏˋ ⁿᵃᵐʲᵒᵒⁿ | 𝗯𝗹𝗼𝘀𝘀𝗼𝗺𝘀 𝗼𝗳 𝗳𝗮𝘁𝗲 ࿐ྂDonde viven las historias. Descúbrelo ahora