Capítulo 19

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(Camila Johnson)

Nadie podría entender todo lo que estaba pasando en mi cabeza, el dolor y el sufrimiento que estaba sintiendo en esos momentos, era realmente insoportable y jamás nadie me entendería… yo era mi propio problema, a pesar de haberlo visto con mis propios ojos aún no lo podía creer.

No, la persona a quien más quise tanto, no, no, definitivamente no lo podía creer…

Las lágrimas volvieron a caer en medio de la oscuridad, me senté en la cama de nuevo frustrada por esos pensamientos, limpie mis lágrimas y me propuse que no lloraría de nuevo por él, no derramaría una lagrima más por alguien que no valiera la pena…

Vi por la ventana que el sol ya estaba saliendo, me levante para ir al baño y lavarme la cara, me asome por las escaleras y no vi a Hyun. Baje, me detuve en el último escalón cuando lo vi que salió de la cocina con los platos y me acerque a él…

- Buenos días –dijo normalmente al terminar de poner la mesa, no quite la vista de la mesa cuando él me miro-

- Buenos días –solo pude responder cuando levante la vista y lo mire, aún no me sentía tan optimista, pero intentaba serlo un poco por él…-

- Prepare el desayuno, ya lo traigo… -estuvo a punto de retirarse, cuando lo detuve del brazo-

- No, déjalo… -lo solté y fui a la cocina-

Volví con los platos de comida y los puse en la mesa haciendo que él se sentara ya más tranquilo, supuse que creería que escaparía y volvería a la habitación, hasta yo me lo esperaría… Durante el desayuno solo estuve dentro de mis pensamientos, no quería seguir de esta manera pero era inevitable sentirme así.

Mis pensamientos me atormentaban, Jackson quizás era solo una estúpida excusa para justificar mis lágrimas y tristeza en estos momentos, pero esto era algo que tenía que seguir ocultando…

Terminamos de desayunar, pensé seriamente en lo que haría, no quería seguir así por lo que buscaría algo para distraerme en el día. Levante los platos y mientras los lavaba, Hyun me había estado sacando platica así que tuve que hacer una movida en ese momento…

Para no sentirme tan deprimida y evitar a ciertas personas tuve que pedirle que me llevara a la escuela y me trajera de vuelta, me alegraba que no hubiera preguntado nada, no quería darle explicaciones o una estúpida excusa más…

Cuando acepta me sentí feliz, a pesar de todo le pude sonreír y subí a la habitación para alistarme para la escuela.

Me di una ducha y me puse lo primero que encontré, no me sentía de ánimos como para enfocarme demasiado en lo que usaría, solo me puse unos jeans y la primera blusa de tome del armario.

Baje con él, note que me miro, al principio me dio pena, pues no llevaba maquillaje, pero sentí que no debí tomarle importancia y me acerque a él.

- Estoy lista –dijo en una voz apenas audible y sonreí levemente-

- Entonces, vamos –me sonrió y lo tome del brazo para salir-

Como siempre lo hacía, me abrió la puerta del coche para que subiera, eso era algo muy lindo de su parte, siempre me trataba tan bien, Hyun Joong era todo un caballero, no lo creía antes cuando decía que yo era como su hermana, pero al ver la forma en la que me trataba me daba cuenta que de algún modo él se había convertido en mi hermano mayor…

Increíble pensar de esa manera de mi esposo, es extraño pero así lo veo yo…

Durante el camino no quise decir nada, no quería que hiciera una pregunta incomoda, no quería decirle la verdad, quizás… no ahora.

Contrato Prohibido (reescribiendo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora