No se "sale del closet" una sola vez [Vkook/Kookv] COMPLETA. En Edición

Capítulo 9. Si juegas con Fuego te quemarás

Un sabor agridulce corría por la boca de Taehyung, por un lado se sentía "en la gloria" si cabe decir, porque hasta el momento Kook no lo había alejado de su lado a medida de que sus interacciones se volvían cada vez más íntimas, por no decir que habían llegado al punto de besos descarados en el cuello de Kook, cada vez más, cada vez más intensos, llevando a Tae al borde de su propia lucidez.

Pero aquí viene el sabor amargo para el mayor de los dos, y era que pese a que Kook no lo alejaba, tampoco iniciaba ningún tipo de interacción del tono que quería Tae. El menor sólo se mostraba receptivo por decirlo de alguna forma. Por esto Tae cada vez pensaba con más frecuencia que se había vuelto codicioso porque quería que Kook fuera recíproco con las muestras de afecto que estaba teniendo con él, eso sin mencionar que se encontraba demasiado inseguro, temeroso, indeciso para hablarlo directamente, aún su corazón cobijaba la idea de un rechazo y llegados a este punto, consideraba que de darse no podía soportarlo.

Sin embargo día con día el chico con el registro más grave del grupo parecía contenerse menos, ansiaba el momento en el que Kook decidiera quedarse con él en la noche, totalmente ajeno a las miradas cómplices que hacían Jimin y Hoseok el uno al otro cada vez que percibían ese comportamiento en los menores del grupo. Pero ese espacio dejó de ser suficiente y un osado Taehyung se vio impulsado un día a ingresar a la habitación en donde estaba el chico que ocupaba la mayoría de sus pensamientos tratando de editar unos videos que había tomado de una caminata reciente. Consciente de lo que intentaría hacer Taehyung procuró dejar la puerta cerrada después de entrar,  abrazó al Maknae por los hombros desde atrás y este ni se inmutó, parecía muy concentrado en la actividad que realizaba, entonces comenzó a acariciar su cabeza en un intento por llamar su atención .

—Huyng, estoy ocupado— mencionó Jungkook despreocupadamente sin dejar de revisar la pantalla de su computador con la intención de que se le dejara tranquilo.

Tae, haciendo caso omiso a la solicitud del más joven dio un paso más, y le dio un beso en su cuello, quería saber si Jungkook accedía en las noches porque estaba medio dormido o porque le gustaba. Un segundo beso, más atrevido y lo siguió un tercero, la respiración de ambos se comenzó a acelerar y el menor terminó ladeando su cuello para que su hyung accediera más fácil, este subió descaradamente por la curva que dirigía hacía el rostro del Maknae pasando por su mandíbula hasta su oreja, en la que dejó chupetones y una que otra mordidita en el lóbulo de la misma, Kook suspiraba ante el contacto, sus manos se habían detenido en la superficie del teclado. Tae se aventuró un poco más y con una de sus manos tomo la mejilla opuesta en la que él estaba dejando besos y giró la cara del contrario, que en un primer momento hizo el amague de seguir la dirección que el mayor le daba, pero sin el menor aviso volvió el rostro con violencia hacía el otro lado.

Ante el acto Taehyung abrió los ojos y vio los de Kook apretados igual que los puños de sus manos sobre las rodillas mientras respiraba agitadamente.

El mayor había encontrado el límite y vaya que le dolió tal descubrimiento. Tal y como se había prometido se retiró de la habitación en donde se encontraban, dolido, avergonzado y con los ojos inundándose en lágrimas. Puede que con todas sus fuerzas y con toda la ingenuidad de su corazón adolescente haya estado tratando de convencerse a sí mismo que el rechazo no iba a dolerle tanto, o que había una posibilidad de que su compañero correspondiera lo que sentía, pero el dolor en su pecho, no lo dejaba "pensar con claridad".

Fue a su habitación, se metió en las cobijas y trato que su tristeza se destilara a través de las lágrimas, concentrándose en ahogar sus sollozos, no quería que nadie lo mirara, ni le preguntara, ni lo juzgara por haber emprendido una empresa que sabia iba a fracasar. 

Minutos después sintió a alguien recostarse sobre la cama, su corazón se aceleró y la suave voz de Jimin lo consoló un poco—¿ Qué te pasa Tae?

El sólo negó con la cabeza, demasiado avergonzado para responder, se giró y se acurrucó al lado de su amigo, este pasó su mano repetidamente por su espalda, rogando desde el fondo de su corazón que el dolor de Tae cesara, dejando el espacio para que su amigo se calmara, él sólo se quedó allí sin preguntar.

Esa misma noche Jimin confirmó lo que sospechó esa tarde, el llanto de Tae tenía que ver algo con Kook, pues esta noche, el maknae no se presentó en la habitación ni siquiera para jugar, lo que extrañó igualmente a Hoseok y entre otras cosas... terminó por destrozar a Taehyung, que amagó sentirse indispuesto, como una clara excusa para seguir llorando debajo de las sabanas, maldiciéndose así mismo, porque entre todo lo que le dolía, lo que más hacía recoger su corazón era el hecho de que posiblemente había perdido a su "amigo". Siendo sinceros, más allá de su gusto "romántico" por Kook, Taehyung realmente disfrutaba todo lo que hacían juntos, tenían gusto similares en cuanto a música, películas, juegos. La pasaban bien juntos y no quería perder eso, o bueno, ya lo había perdido ¿Qué se supone que iba a hacer?