Extra 1: Limando asperezas

16.1K 1.4K 522
                                    

Antes de dejarlos con el cap, dejenme darles una noticia      🚨importante🚨...¡ya pueden leer la sinopsis de la historia de Jasper y Sebastian!

La encuentran en mi perfil como " y yo".

Ahora si, disfruten del cap.

====================

Oscar apagó la computadora y se levantó de su silla para estirarse. Era domingo y se suponía que era su día libre, pero había tenido que asistir una círugía de emergencia para una perrita preñada, por lo que no dudó en ir hacia el hospital. De cualquier manera Adrién también tenía trabajo en la Firma por lo que Oscar prefería estar ocupado para no extrañarlo tanto.

Soltó una suave risa. Siempre había sido muy expresivo y hasta cierto punto, meloso, con las personas. Pero con Adrién... joder con el se le iba de las manos. Necesita tenerlo cerca tanto como fuera posible, sin mencionar que no podía sacarle las manos de encima. Lo llenaba de mimos y arrumacos todo el tiempo. Una buena cosa que a su novio le gustara ser el receptor de todas esas muestras de cariño.

De hecho, Adrién era bastante consentidor y tampoco podía mantener las manos lejos de él.

Salió de su consultorio y se dirigió hacia la recepción en busca de Velk quien lo había acompañado, pero se había quedado con Preston. Ese chico le agradaba a su bola de pelos, se habían vuelto buenos amigos.

Y como lo supuso, Velk estaba ahí, echado a los pies de Preston quien estaba hablándole como si fuera un bebé.

—Me estas malcriando al niño— bromeó al tiempo que se recostaba contra el mostrador. El chico sonrio acómodandose las gafas amarillas sobre el puente de la nariz— anoche no se durmió hasta que le cantamos una canción de cuna ¿tienes algo que ver con eso?

—No es mi culpa que sea tan adorable — Preston acarició la cabeza del perro. —Es como un enorme bebé peludo.

—Es el perro más consentido de la historia —se quejó el pelinegro con dramatizmo y Preston se rió.

Sin embargo se vieron interrumpidos cuando a puerta principal del hospital se abrió y por ella entró un hermosa chica de cabello oscuro. Oscar la reconoció al instante a pesar de las gafas de sol que cubrían sus ojos. Realmente no esperaba que fuera a burcarlo, es más, ni siquiera sabía que estaba en la ciudad. Así que sonrio ampliamente y abrió los brazos.

Ella soltó una risita y no demoró en estrellarse contra su pecho.

Bonsoir, tío Oscar— saludó ella.

—Eso sigue siendo raro como el infierno— le revolvió el cabello haciéndola gruñir molesta— pero veamos el lado gracioso de esto, tengo una sobrina y nunca tuve que cambiarle los pañales.

Amour Inattendu (Suerte #6)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora