–¿Qué sucede, Keith? –Romelle lo zarandeó.
Keith siguió recostado sobre el mostrador sin mostrar su rostro.
–Levantate amigo, ¿ayer no estabas todo sonrisas por el peluche que te regaló Lance? –Acxa lo codeó.
Keith levantó el rostro del mostrador mostrando un rostro de desilusión y desesperanza pura, sin mirar a ninguna de las dos, habló entre dientes.
–¿Qué? –Preguntaron las dos chicas al unisono.
–Lance la encontró.
–¿A quién? –volvieron a hablar al unisono.
–A una chica que desde hace años lleva buscando, está trabajando con él en la misma empresa
Ambas chicas abrieron los ojos sorprendidas.
–¿Qué pasó con lo de que no estaba interesado en esas cosas? –Acxa preguntó escéptica.
–Bueno, parece que ella es la excepción –Keith respondió con desánimo.
–No llores –Romelle lo abrazó por el cuello y lo presionó contra su pecho–, tranquilo que vamos a resolver esto.
Las manos de Keith llegaron a su espalda y empezó a darle suaves golpesitos.
–Sueltalo, lo estas ahogando –Acxa advirtió.
–Ups, lo siento –finalmente los soltó–, lo hice porque parecía que ibas a llorar y no me gusta ver a nadie llorar.
–Obviamente no iba a llorar, puede que me sienta triste, pero no tengo de otra más que aceptarlo.
–Oh, vamos hombre, no te pongas así, podremos arreglarlo –Acxa pasó su brazo sobre sus hombros y le sonrió confiada.
–Si tu lo dices –Keith sonrió de lado.
–Por cierto, siempre he tenido la curiosidad sobre como se conocieron, actúan casi como hermanos.
–Bueno es una graciosa historia –Acxa dijo recordando aquel encuentro.
Acxa empezó a narrar. En retrospectiva, Acxa se encontraba en la caja esperando al nuevo empleado, ya había tenido malas experiencias con sus anteriores compañeros, fueron dos chicos que uno tras otro la acosaron, así que se ganaron un despido y unas lesiones causadas por Acxa.
Sus jefes y padres de Hunk le pidieron a su hijo que le preguntara a sus amigos si conocían a alguien que necesitara trabajo y que sea una persona de confianza.
Acxa no quería volver a pasar una mala experiencia, así que al ver a Keith pasar por la puerta, decidió dejar la hipocresía de lado.–"Escuchame bien, seré clara, no quiero que andes segundas intenciones conmigo, no me interesan los hombres" dije a penas Keith se presentó –Acxa río de recordarlo.
–Y yo con boca suelta dije "que coincidencia, al parecer a mi si me interesan" –Keith siguió con la historia.
–Despues de que me dijera eso, me agradó por lo franco y su sarcasmo, entonces lo forcé a que fuera mi amigo, y obviamente soy lo mejor que le ha pasado –Acxa dijo con una sonrisa orgullosa.
–Ajá, lo que ella dijo –Keith puso los en blanco.
–Espera ¿¡Acxa!? –Romelle reaccionó poco después–, sé que soy muy linda, pero no estarás interesada en mí... ¿cierto?
–Tranquila, no me interezan las rubias tontas –Acxa dijo en broma, a lo que Romelle hizo un puchero–, en realidad no tengo a nadie que me ha gustado.
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Entre Garras y Colmillos - Klance
ParanormalUn vampiro viviendo en una sociedad sin ser descubierto durante siglos suena algo imposible, pero para Lance esto no fue tan difícil. A pesar de tener al rededor de docientos años, su aparecía no supera los 25 años. Un día después de salir de su tra...