Entre Garras y Colmillos - Klance

Capitulo XLI

Keith finalmente regresaba después de pasar tiempo con sus padres, felizmente llega a casa de Lance y abre con la llave que nunca imaginó volver a utilizar, el lugar estaba lleno de pintura y lienzos sin terminar.

–¿Lance? –Keith llamó a su novio dejando su equipaje a un lado.

Tenía la intención de sorprenderlo con su regreso, pero al parecer Lance no estaba, subió las escaleras y miró en todos lados, pero no estaba en ningún lado.

Sacó su nuevo teléfono, donde contacto a Acxa para ir a visitarla, ella contesta y planean ir a un café junto con Romelle y Verónica. Después llama a sus padres avisándoles de su llegada, Krolia no dejaba de insistir que quería ver a Lance.

Dudó si llamar a Lance, pero decidió continuar con su plan y darle una sorpresa, así que subió su equipaje a su viejo cuarto y desempacó para ir al lugar acordado con Acxa.

Keith fue el primero en llegar así que solo se entretuvo jugando en su celular, cuando la una chica llegó con nerviosismo en su voz y su cara estaba sonrojada, podía escuchar de fondo como reían en otra mesa, lo que más lo tomó por sorpresa fue cuando ella le pidió su número.

–Lo siento, este chico ya fue tomado –Romelle llegó y abrazó a Keith sacando la legua–, su novio no estaría feliz con esto.

La chica avergonzada se retiró, Romelle por su parte abrazó a Keith aún más fuerte y aprovechó para acariciar sus suaves orejas.

–Tienes que tener cuidado, eres bien parecido así que no debes de sorprenderte si van detrás de ti, así que ten cuidado, los únicos que podemos tocar estas orejas somos tu novio y yo –Romelle dijo con convicción.

–No digas esa palabra –Keith desvió la mirada.

–¿Cuál? –Romelle ladeó la cabeza y después sonrió–, ¿novio?

Keith seguía sin mirarla, escondiendo su rostro con una mano.

–¿Acaso no te gusta? recuerda que ahora tú y Lance son novios –Romelle empezó a codearlo.

–De hecho, me hace tan feliz que me siento como un estúpido –Keith comentó sin atreverse a verla.

–No empieces con tus cursilerías que me harás sentir mal por no tener novio aún –Romelle hizo un puchero.

–¿No que se te confesó alguien hace unos días? –Keith volteó a verla con una ceja arriba.

–Estoy soltera, pero no desesperada –Romelle comentó con simpleza.

Poco después llegaron Acxa y Verónica tomadas de la mano, pidieron algo y empezaron a hablar de temas variados. Por una de las ventanas vieron a Hunk pasar así que lo invitaron a venir.

Hunk inmediatamente vio a Keith, llegó de prisa y le dio un fuerte abrazo que lo dejo sin aire, tomó asiento junto a Romelle quien empezó a jugar con su bebida nerviosa por la proximidad.

–Hunk, ¿sabes dónde puede estar Lance? –Keith preguntó en medio de la conversación.

–Está trabajando, ¿no te contó? –Hunk respondió–, iré con Pidge más tarde a verlo, ¿quieren venir?

Todas aceptaron alegres mientras que Keith tenía curiosidad por saber, después de terminar de hablar y pagar la cuenta, fueron a encontrarse con Pidge.

Todos juntos fueron a un parque de diversiones que Keith ni sabía que existía, entraron a varias atracciones y Keith dio a relucir su talento con las grandiosas fotos que sacaba.

Pidge, Romelle y Hunk no podían parar de subirse a la montaña rusa, arrastrando a Keith consigo, mientras que Acxa y Verónica pasaban un tiempo tranquilo en la rueda de la fortuna.