Entre Garras y Colmillos - Klance

Capitulo XXXVI

El viaje fue más rápido de lo que Lance esperaba, salió corriendo de la estación, pidió ayuda para poder llegar a la dirección que Acxa le dio y terminó por tomar un taxi, en cuestión de diez minutos finalmente llegó, pagó sin siquiera recibir el cambio y corrió a la puerta, tocando con fuerza.

–¿Qué? –Zethrid abrió la puerta con mala gana mientras se tallaba un ojo.

–¿Aquí está Keith? –Lance preguntó algo asustado por al ver a Zethrid.

–Él ya se fue –Ezor llegó al lado de Zethrid y bostezó.

–¿Se fue? ¿A dónde? ¿va a regresar? –Lance empezó a preguntar con preocupación.

–¿Eres Lance cierto? Creo que Acxa llamó para decir que venias –Ezor apoyó su cabeza en Zethrid–, estaba medio dormida cuando lo hizo.

–Sí, soy Lance, gusto en conocerlas.

–Sigue –Zethrid dio paso para que siguiera dentro.

–Nos gusta escuchar los dramas de los demás, así que después de que nos lo cuentes quizás te ayudemos –Ezor sonrió.

Lance en ese momento no podía esperar y encontrar a Keith, pero su única pista es lo que ellas saben así que accedió, así podría darse un respiro.

–Ella es Narti, nuestra otra compañera, vivíamos todas aquí junto con Acxa –Ezor señaló a la chica con una capucha puesta sentada en un sillón.

Narti saludó con la mano y Lance la imitó.

–¿Acxa por qué se fue? –Lance preguntó curioso.

–Bueno, ella dice que por oportunidades de trabajo –Zethrid respondió.

–Pero estoy segura de que se fue por que estaba cansada de vernos tan melosas –Ezor respondió mientras abrazaba a Zethrid por detrás.

Lance sonrió al verlas, ellas lo invitaron a tomar asiento, Lance se sentó poniendo su pequeño equipaje sobre las piernas, contó un poco de su historia junto a Keith mientras que las chicas miraban atentas recibiendo un gesto de decepción de todas al terminar con la historia.

–No puedo creerlo... –Ezor comentó.

–Un tonto no se dio cuenta de sus sentimientos hasta que era tarde, y el otro aun más tonto se fue sin escuchar una respuesta adecuada –Zethrid comentó.

–Esa es una buena forma de resumirlo –Lance rio mientras que se rascaba la mejilla avergonzado.

–Me encantaría ayudarte, pero hay un problema, Keith no tiene un celular así que no podemos contactarnos con él –Ezor comentó.

–La única opción es que él nos contacte de regreso, pero se ve que no puedes esperar hasta que eso pase –Zethrid se quedó pensativa.

–¿A dónde fue? –Lance finalmente pudo preguntar.

–A casa, con su familia –Zethrid comentó.

Lance no pudo evitar sonreír suavemente de solo pensarlo, le aliviaba saber que está bien. Narti se acercó a Lance y puso la pantalla de su celular frente a él.

–¿Krolia? –Lance preguntó al leer el nombre del contacto.

–¿Tienes su número? –Zethrid abrió los ojos con sorpresa.

–¿Quién es ella? –Lance preguntó confundido.

–Tu suegra si las cosas salen bien –Ezor guiñó un ojo.

Lance no pudo evitar sus mejillas arder, las chicas rieron por su reacción y le dieron ánimos para hablar con Krolia, fue un poco difícil explicar la situación por teléfono, pero Krolia lo invitó a venir siendo que conocía a las muchachas que ayudaron a su hijo antes.

–Un invitado viene para acá –Krolia comentó apenas finalizó la llamada.

Keith quien ya se encontraba en la puerta colocándose una chaqueta se detuvo antes de salir.

–Iré a buscar trabajo regreso después –Keith comentó.

–No tienes qué, sabes que podemos mantener de nuestro pequeño sin problema –Krolia se acercó a su hijo y apretó sus cachetes.

–Mamá... –Keith rio–, solo necesito algo para poder despejar mi mente.

–Está bien –Krolia se resignó y sonrió suave–, prométeme que tendrás mucho cuidado y volverás pronto.

Keith asintió, Krolia le dio un fuerte abrazo para después soltarlo y dejarlo ir. Krolia fue al sofá a sentarse mientras que esperaba la llegada de aquel chico llamado Lance, para su sorpresa llegó 10 en diez minutos.

Al abrir la puerta un chico de tez morena alrededor de la misma altura que su hijo, con una capucha puesta a pesar de hacer calor, saludó muy cortésmente y se presentó, Krolia lo invitó a pasar y tomar asiento.

Lance tomó asiento y se negó cuando Krolia le ofreció agua, cuando Krolia se sentó a su lado, Lance intentó contarle cómo fue que conoció a Keith y como fue que llegaron a estar así, explicando la razón por la que había venido.

Krolia se sentía muy agradecida por toda la ayuda y e insistió pagar por todas las molestias, Lance se negó mientras que reía levemente, aquel gesto le recordaba mucho a Keith, Krolia lo invitó a quedarse con ellos en el cuarto de invitados el tiempo que necesitara.

Siguieron charlando por un largo tiempo mientras que esperaban al regreso de Keith, Krolia estaba feliz de que su hijo conociera a tan buen chico que incluso ya se estaba encariñando con él y no perdonaría a su hijo si intenta alejarlo.

El sonido de la cerradura llamó la atención de ambos, Lance estaba nervioso, no sabía qué hacer, pero esperaba poder resolver las cosas pronto, cuando finalmente se abrió la puerta Keith parpadeó varias veces y volvió a cerrar la puerta.

Lance no lo dejaría irse otra vez, así que se levantó de su asiento y corrió a la puerta, Keith creía que su mente le jugaba una mala broma, así que sacudió su cabeza y volvió a abrir la puerta con prisa esperando no verlo otra vez.

En efecto, no estaba más en el sofá donde solo podía ver a su madre con un rostro de decepción mientras que escuchaba un quejido de dolor al tiempo que la puerta chocaba con algo.

Keith entró y vio a Lance cubriéndose el rostro, Keith intentó ayudarlo mientras que empezaba a entrar en una crisis preguntándose porqué estaba ahí, Krolia no perdió tiempo y sacó se celular para tomar una foto a tal desastrosa escena y después fue a buscar el botiquín.

¡Perdonen la demora! :(

Pasé por el peor bloqueo que he tenido y casi no tuve tiempo para escribir, pero ahora me siento listo para seguir y pronto daré fin a esta historia que le tengo tanto cariño, así que les puedo asegurar que no tendrán que esperar mucho ;)