Votos:Langst

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El desagradable cantar de la chicharra estallo en su oído, mientras que Bob, con su molesta y burlona voz ponía aún más sal en la herida.

—Y eso es un voto para Hunk, uno para Pidge, uno para Keith, DOS para Allura y—el presentador le miro con fingida compasión—, ni uno para el tonto.

El resto del equipo le miro con lastima y pena en sus ojos, Lance no les miro, no podía, sentía que si por solo un momento dejaba de mirar el frio suelo del estudio, se quebraría en llanto.

No importa. Es solo la verdad, una que ya sabías.

No importa.

De reojo pudo ver como Hunk se movió, levantando su brazo y buscando las palabras adecuadas para animarlo; antes de que Bob le interrumpiera.

—¡Y como prometí! ¡Todos los que recibieron un voto se irán libres!

Aplausos y felicitaciones se escucharon del público imaginario, pero los paladines se miraban entre ellos con puro terror reflejado en sus rostros.

Lance no recibió ni un voto.

—¡Debe ser una broma!—reclamó Allura asustada —¡Tenemos que irnos todos! ¡No podremos formar a-

—Allura, no sigas—habló Lance con la voz quebrada y tan desesperanzada, tomo todo el control de la princesa para no sollozar—. Está bien, ustedes no me necesitan para salvar el universo.

Keith negó con la cabeza—No Lance eso no es-

—Solo, díganle a mi familia que los quiero, por favor.

—¡No! ¡No te dejaremos!—grito Pidge, ansiosamente buscando por todo el set algo que pudiera ayudarles, alguna solución.

Pero en ese momento lo que parecían ser unas burbujas hechas de cristal los rodearon, trataron de escapar golpeando desde adentro pero no sirvió de nada, se sentía como golpear acero.

Bob se acercó a un cabizbajo Lance y para el horror de todos levanto delicadamente su mentón con una mano—No te sientas tan triste Lancey, podrás quedarte aquí y volverte mi adorable asistente, no suena tan mal ¿cierto?

El ahora ex paladín no respondió, desde su posición Keith pudo observar la mirada completamente muerta de su segundo al mando.

—¡Lance!—gritó mientras trataba inútilmente de romper la burbuja, el mencionado se giró a ellos, tortuosamente lento y con una forzada sonrisa pronuncio un simple "Adiós".

Lo siguiente que supieron fue que despertaron en los leones.

El paladín de amarillo fue el primero en romper el silencio, su voz temblorosa resonando en las cabinas—Chicos, acabo de tener la peor pesadilla de mi vida.

—Fue, ¿algo llamado Garfle Warfle Snick? —Pidge también se escuchaba agitada por el comunicador.

—¡También lo soñé!—exclamó Allura.

—Todos lo soñamos—finalizó Keith, porqué eso fue, solo un horrible sueño.

Pudo escuchar por el comunicador el suspiro colectivo que dio el equipo.

Hunk rio de forma nerviosa y miro a la ventana de su costado, donde el León Rojo flotaba—Ese Bob sí que fue un idiota ¿Cierto Lance?

Nadie contesto.

-.-.-.-.-.-

Me dolió escribir esto pero como ya dije, le falta Langst a este libro.

¡Muchas gracias por leer!

SharpShots [Lance One Shots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora