San Valentín: Langst [+16]

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—¡Sírvanos otra!—grito su acompañante de forma molestamente alta.

Lance simplemente se apoyó en él, demasiado mareado y perdido como para moverse, suponía que tendría que soportar un poco más de su hedor a alcohol. 

Mentalmente se encogió de hombros .

"Como si no hubiera lidiado con peor"

Casi de inmediato dos tarros aparecieron frente a ellos en la barra, Lance no estaba muy seguro que era pero alcohol gratis era alcohol gratis. Se empino la bebida, y justo al momento de terminar, su acompañante tomo sus labios a la fuerza arrastrándolo a un beso vulgar y húmedo.

El chico, para nada sorprendido, no opuso resistencia y simplemente se dejó llevar, cayendo como trapo en los brazos de...como sea que se llamara; abrió su boca y correspondió al contacto. No era un tipo realmente apuesto, pero tenía dinero, mostró interés y era el que mejor olía de la banda que había entrado al bar; aun con líneas tan malas, Lance comenzó a corresponder sus coqueteos e insinuaciones.

Como-se-llame susurro una línea sucia a su oído, mientras bajaba su tosca mano de su cintura a su trasero, dio un fuerte apretón sobre la tela y Lance comenzó a reír. Puede que fuera por lo terrible de la línea, o para no llorar por lo patético que se sentía en el fondo.

Rápidamente, le arrebato el tarro y tomo un sorbo de la bebida del sujeto, decidido a concentrarse en el sabor y no en su propio remolino de emociones.

—Oye precioso—susurro de nuevo junto a su mejilla, su aliento fétido y alcohólico chocando caliente contra su piel—. ¿Qué te parece si vamos a divertirnos a otro lado?

Lance sonrió de forma torpe, su puño aun aferrado al mango del tarro.

—Te estabas tardando grandote.

Lo último que recuerda con claridad es al tipo guiándole hasta una habitación sola, pudo haber sido el baño o el armario, a ninguno de los dos le importaba mucho.

El extraño tentaba su cuerpo con brusquedad, mientras le besaba con boca abierta; sus dientes chocaron más de una vez y el hombre parecía tener un tipo de fetiche pues no dejaba de dar mordiditas en sus labios.

Poco a poco, con la ayuda de la oscuridad y la música retumbando en el diminuto espacio, su imaginación comenzó a volar, las manos rasposas y gordas tomaron una nueva forma,una que le tocaba con maestría y deseo, el cabello grasiento del hombre se alargó hasta su espalda y el familiar aroma a Juniberry inundo su olfato cuando la figura giro su cabeza para tener un mejor acceso al cuello del moreno.

Su acompañante no podía pasar un minuto en una misma forma, su mente le daba imágenes aleatorias, de cabello negro a piel oscura, de ojos amatistas a azules con destellos rosáceos, todo en un flash tortuoso, a veces se combinaban o separaban entre ellos formando uno o dos seres a su alrededor, nada se mantenía igual pero Lance parecía ya estar acostumbrado a los crueles juegos de su mente.

La única similitud que tenían las figuras era como le miraban, con anhelo y adoración cruda en los ojos.

Lance prefería no verlos, temeroso de probar lo que nunca podrá tener.

Estaba maldito, condenado a que no importara con quien compartiera su cama esa vez, o que tantos amantes diferentes pudiera tener, la noche siempre terminaba de la misma manera, con sus  gemidos ahogados  y el nombre de sus amores imposibles en la punta de su lengua.

Pocos minutos después Como-se-llame termino con un suspiro agudo y satisfecho cerca de su oído, se tomó unos segundos para recuperar la respiración recargado en Lance y aplastándolo ligeramente contra la pared, cuando al fin se apartó de él subió sus pantalones y bragueta, dio una fuerte palmada en su trasero y susurro un "Llámame" coqueto.

Lance definitivamente no lo haría, no cuando ni siquiera lo había hecho terminar.

Entumecido arreglo sus pantalones y salió del diminuto espacio, decepcionado y con un dolor de cabeza creciente.

Al momento, la banda de patanes con los que venía Como-se-llame comenzaron a silbar y gritar idioteces, el chico los ignoro mientras avanzaba como podía al baño.

Una vez dentro se abalanzo hasta un lavabo, abrió la llave y dejo que el agua fría cayera por su nuca, se levantó y miro al espejo, su reflejo le regreso la mirada con ojos opacos.

Alguien salió de uno de los baños y mientras lavaba sus manos le dio un vistazo rápido para después soltar una carcajada.

—¡Alguien tuvo un buen San Valentín!—exclamó refiriéndose a las furiosas marcas en su cuello, Lance se encogió molesto, el volumen del sujeto no ayudaba en nada a su naciente jaqueca.

El extraño salió del baño, dejando a Lance y a su reflejo solos otra vez.

Su reflejo le miro con decepción y asco.

Lance se limitó a peinar su cabello.

Estaba hecho un desastre.

***

Es la primera vez que escribo algo de este estilo, fue bastante interesante y admito que me costo un poco.

Nada de lo que paso en el fic fue con falta de consentimiento, creo que es importante mencionarlo.

También por si no se entendió, los amores imposibles son Allura y Keith.

Y bueno, creo eso es todo y espero que lo hayan disfrutado(?)

Muchas gracias por leer!

SharpShots [Lance One Shots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora