Losing my Virginity

Cap. 34: ¡Matador!

El lunes en su habitual reunión de mejores amigos, Dong Pyo estaba inalcanzable, como si fuera la última coca cola en el desierto, se sentía fabuloso, único, tan desvirgado... aunque le estuviera doliendo las nalgas, no lo iba a decir, eran situaciones inevitables, pero finalmente, se había quitado el maldito defecto, ahora... era todo un hombre... ¡Oh, sí! Miraba a todos como si fueran cucarachas (así como nos ven las coreanas) sobre todo a Minhee

-¿Así que por fin lo hiciste con Seungwoo? – Preguntó Eunsang emocionado

-Si – respondió cruzándose de piernas y teniendo una actitud de diva empoderada mirándolos de arriba abajo – Seungwoo, ya es mi hombre

-¿Hicieron de todo? – Preguntó Hyeong Jun sonriente

-De todo – señaló sin dudar – Así que ya no hay nada que no puedan presumirme...

-Nadie te estaba presumiendo nada – Espetó Minhee

-¿Ya se la chupaste a Seungyeon?

-No – negó rápidamente frunciendo el entrecejo

-Entonces tu opinión no vale nada, porque no le has dado servicio completo a tu novio

-¡No se la voy a chupar! – Chilló molesto - ¿Desde cuándo es prioridad meterse eso a la boca?

-A ellos les gusta... a ti te gusta ¿O acaso él no te lo ha hecho? – Gruñó Dong Pyo muy dueño de la situación

-Pues... si...

-¿Ya lo ves? ¡Tú eres el apretado! Te gusta que te lo haga y tu andas de que no, me da asco, no, porque no quiero... no todo es mete y saca, también hay que darle gozo con tu boquita ahí abajo – Seguía diciendo Pyo, el experto

Minhee se cruzó de brazos y ya no dijo nada, chingadamadre, consideraba que eso no era relevante, además, Seungyeon nunca se lo había pedido y él siempre le decía que no pensaba metérselo a su boca...

-Pues allá tú, si el que termina chupándose es Wonjin, todavía he visto que lo anda rondando

El chico les hizo un gesto de mantis hembra asesina y no dijo más nada, consideraba que Seungyeon nunca le iba a presionar para tal cosa ¡Además no había ninguna regla escrita en la que dijera que tenía que hacerle sexo oral! Pero si le remordió la conciencia de que Seungyeon si se bajara por los chescos.

Para después del entrenamiento, su guapo novio se prendió de su cuello y lo llevo a las duchas, pero como era harto celoso, espero a que todos terminaran para bañarse juntos, ya no le decían nada, porque de todos modos no es que cocharan en las regaderas, el entrenador esperaba a que salieran, así que no les daba tiempo de nada

Los dos estaban sentaditos esperando que salieran los chicos, cuando Minhee sin querer desvió su mirada a la entrepierna de Seungyeon y se mordió los labios en un gesto casi inocente, finalmente se marcaba bien el bultito por el tipo de tela de los pants, obvio que Seungyeon lo descubrió y sonrió abiertamente

-¿Qué pasa amorcito? ¿Se te antoja? – le preguntó y Minhee alzo la vista topándose con los ojitos coquetos y de alcancía de Seungyeon , sus mejillas se ruborizaron con violencia

-¿Eh?

-Ya vi que andas mirándome el paquete como si quisieras comerte mis huevitos

-¡No seas vulgar! – Jadeó mirando a los lados que nadie los escuchara

-¿Mi amorcito no tiene antojo de webito con salchicha?

Minhee estaba más rojo que una granada, tenía caliente sus orejitas, mientras que Seungyeon se le arrimaba y le decía cosas sucias al oído... Pero la verdad, es que... Minhee ya sentía cosquillas, por todo su cuerpo, pero era orgulloso para decirle que si a lo que él quisiera.