Cap. 146: No le busques tres pies al gato 😂

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Cansada de estar en su habitación y con una silla de ruedas eléctrica, Lucy recorría los pasillos de la mansión, hasta llegar a la habitación de Seungyoun, toco antes de abrir, puesto que Suset ya le había dicho que podía encontrarlos coshando, porque ese hombre podría estarse muriendo, pero lo caliente no se le quitaba… y el otro remilgoso que también le gustaba la pendejada y bien que andaba trepándose sobre ese hombre

Entró alegremente cuando Seungyoun le dijo que pasara, sonrió al verla y ella se acercó rápidamente moviéndose ágilmente con esa silla de ruedas que dominaba ya, Minhee estaba en el baño cepillando sus dientes

-¿Cómo estás? – Le preguntó

-Mejor… sobreviví – sonrió ese hombre coqueto y sensual – Este cuerpo sensual y cachondo no podía pudrirse en una tumba sin que antes fuese degustado y usado de pies a cabeza por el amor de mi vida

-Los pendejos estaban asustados – soltó una risita Lucy – Se suponía que nadie tenía porque salir herido, así que casi se infartan cuando la otra chica se estaba desangrando y tu medio muerto, la verdad si te viste muy mal

-Sí, que chistositos son los ricos…

-No sabía que esto era así – suspiró – yo de verdad pensaba que era un juego de sobrevivencia y muerte y que si podrían morir, no se lo deseo a nadie

-¡Todo sea por la fortuna de Minhee! – Exclamó Seungyoun – Ya me vi gastando todo ese dinero, así que valió la pena

-¡Jó! – Chilló Lucy - ¿Interesado o qué?

-¿Qué más puedo pedir? Un novio hermoso… acompañado de una fortuna inmensa, no pues yo bien a gusto, no se aún que haré con tanto dinero… o sea, imagínate, podría tener un harém y obvio que Minhee sería el principal, pero con otros doce…

Minhee bufó tras ellos

-Demasiado tarde Minhee – dijo Lucy – Ya te jodiste, ahora te quedas con él y con los otros doce novios que conseguirá

-Ni crea que le voy a soltar una black card – Protestó Minhee, odiaba cuando Seungyoun hablaba de su dinero, porque se sentía desplazado

-Ya te convenceré – masculló Seungyoun – de un modo u otro, siempre me salgo con la mía

-Eso sí es cierto – Susurró Minhee vencido -¡Pero nada que te conseguirás doce hombres más o te mato!

-¡Ay, qué fuerte! – sonrió Lucy al verlo celoso

-¿Y tú como estás Lucy?

-Muy bien, en cuanto regrese, inicio rehabilitación y listo, ya podré correr

-Me alegro mucho

-Yo vine a dejarles esto – sacó Lucy de entre sus ropas un bultito y lo dejo en las manos de Seungyoun

-¿Qué es?

-Las chambritas que Minhee tejió en el encierro

-¡Oh!

-¡No son chambritas! – Protestó Minhee – es solo un hobby que tengo

-¡Cielos! – Levantó las carpetitas - ¡Ya sabía que mi amorcito quería ser mamá!

-¿Mamá? ¡Vete a la chingada Seungyoun!

-Mi amorcito no quiere reconocerlo – le dijo en “secreto” a Lucy – Pero ya le afloró el instinto maternal, creo que ya quiere ser madre

-¿A poco? – todavía le sigue el juego la otra

-La otra vez, lo vi tejiendo chambritas, la verdad, considero que soy demasiado joven y guapo, cachondo como para ser papá, pero como ahora el del dinero es él, creo que si él me dice que le haga un hijo, se lo hago….

Losing my VirginityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora