Losing my Virginity

Cap. 57: Baile Caliente (grax por la sugerencia)

***Ya averigüé porque priki resulto muy cachondo, info en la imagen
......

Dong Pyo no fue tan condescendiente con Minhee cuando lo vio en casa de Eunsang, lo barrió con la mirada, se sentó y se cruzó de piernas en completo silencio, no sin antes hacerle cariñitos a Lía, quien luego le dio sueño y Eunsang se la llevo a dormir, Minhee se sintió un poco nervioso, aun recordaba la lengua filosa de Dong Pyo

-Te ves bien Minhee, la vida en Europa te sentó de maravilla

-Gracias

-No dudo que debes tener a muchos en tus filas… tus noches de sexo, pasión y lujuria deben ser interminables

-Yo no tengo nada de eso – Respondió secamente

-¿Cómo? ¿No seguirás igual de apretado?

Minhee no supo explicar el porqué, pero por más que intento tener una relación con algún otro hombre, no podía, era una especie de aversión, no soportaba que lo tocara por mucho tiempo, los besos, los abrazos, no eran lo mismo… eso de hacer el amor con otro, no, no, no, no es la misma cosa, no hay estrellas de color rosa (lleganda en Ale Guzman) y pues fracaso notablemente

Añoraba a Seungyeon

No había nadie como él, que lo hacía ponerse en jaque, que le daba vueltas a su mundo mil vueltas en un segundo, que hacia latir su corazón a mil por hora, que era simplemente estresante y anhelante, delirante como amante, luego, su sonrisa, sus ojitos, su manera de besarlo… eran tantas cosas y comparaciones que no podía evitarlo y contenerlo, era bochornoso romper la intimidad a medias y dejar a tu pareja insatisfecha y pensando si era porque no era suficiente… si, el problema era que no era Seungyeon

Le dolía pensar que Seungyeon le hubiese entregado su cuerpo a Wonjin o cualquier otro, aunque Eunsang decía que no, pero… cinco años ¿Cómo podría guardarse Seungyeon cinco años de sexo, pasión desmedida y besos descontrolados? Imposible, todos menos él…

-Me dedique a mis estudios y el deporte

-¡Ah! Claro – suspiró

-Supe que te vas a casar

-Pues sí, Seungwoo y yo finalmente daremos el gran paso

-¿Pero qué no ya viven juntos?

-Sí, pero, queremos un papel que diga que somos esposos… y quiero una gran fiesta, quiero sellar mi amor y pasión por Seungwoo, y él está aceptando todos mis deseos

-Lía está dormida – regreso Eunsang

-Y también quiero hijos, si Eunsang puede criar a uno ¿Por qué yo no? Que estoy más cuerdo… es increíble, como éste pendejo perdió primero, consiguió novio primero, se casó primero y tuvo un hijo primero…

-¿También estas casado?

-Sí, pero lo nuestro fue sin fiesta… nos fuimos un mes de luna de miel a Dubai, Yohan pago la habitación más lujosa en ese hotel de 6 estrellas por 15 días y otros 15 días en una habitación bajo el mar, estuvo increíble poder hacer el amor, rodeados de peces

Dong Pyo puso los ojos en blanco y Minhee miro a otro lado evitando los ojitos ensoñadores de Eunsang que de solo recordarlo, ampliaba su sonrisa y se ruborizaba, si esas habitaciones hablaran, dirían escandalosamente todas las porquerías que habían hecho en ellas… nombre, si Yohan se colgó hasta de los candelabros para hacer el salto del tigre UwU

-Mj… bueno, yo nunca pensé encontrar a Minhee aquí, menos mal que siempre vengo preparado – saco dos sobres y le entrego uno a cada uno

-¿Y esto?

-Para mí despedida de soltero – sonrió

-¿Por qué? Si ya vives con él… Ya no eres soltero - Dijo Eunsang confuso

-¡Porque se me pega mi puta gana! – Chilló – Así que ahí está la hora, la dirección, pueden llevar a alguien, le acabo de pasar a dejar la suya a Seungyeon y la otra a Hyeong Jun, pero no estaba y se la deje a su secretaria…

-Dicen que estas fiestas son indecentes ¿Habrá chicos en tanga? – Pregunto de nuevo Eunsang

-No me dejaron – hizo un gesto – Pero habrá mucha bebida, comida  y un animador para hacer la fiesta más amena

-¿Se puso celoso Seungwoo?

-Pues sí, me dijo que no iba a dejar que le estuviera tocando el cuerpo a otro hombre ni porque fuera de juego

-Hubieras contratado una chica – Dijo Eunsang – Así no se ponía celoso si le tocabas las shishis

Pyo le miro con ojos asesinos

-Bueno, me tengo que ir – dijo Dong Pyo – Minhee ¿te vas a quedar en corea o te vas de regreso a Europa?

-No lo sé…

-Tú dijiste que regresabas – Le interrumpió Eunsang

-Yo…

-Bueno, espero poder charlar contigo más descansadamente, mi boda está a la vuelta de la esquina, tengo muchas cosas que hacer, dile a Eunsang que te deje mi número para que me hables cuando pase la fiesta. Nosotros no tendremos luna de miel porque todo lo invertimos en la boda, le dije a Hyeong Jun que no escatimara en gastos… y me tomo la palabra el hijo de la chingada

-Está bien, suerte…

Para esas alturas, Hyeong Jun  y sus instintos de dejar viudo a Hangyul llegaron a su oficina, cuando la secretaria le entrego la invitación de la fiesta de despedida de solteros, él la leyó y se llenó de amargura… joder… ni siquiera tenía con quien ir, bueno si, pero no los buscaba porque luego pensaban que era un fácil y querían meterle mano desde el principio y pues nomás no se les antojaba… no eran Hangyul y su cuerpo y sus besos ardientes…

Boto la invitación en su amplio escritorio y se golpeó su cabecita en él mientras maldecía, al momento que alguien llamaba suavemente en la puerta, alzo de inmediato el rostro y era Suset que le miraba extrañado

-Em… disculpa… tu secretaria me dijo que podía pasar, es solo un detallito de la boda, pero si no tiene tiempo

-¡Claro que sí! –Sonrió ampliamente y de modo forzado, ahí estaba ella, la mujer que pronto le quitaría a su amor si no podía impedirlo - ¿Qué pasa?

-Sobre el bordado de las iniciales de los manteles

-Voy por el catalogo – apunto – Están componiendo el sistema y no puedo mostrárselo por la computadora

-Está bien

Hangyul apareció en el umbral, caminando a paso lento, obligado a ir con ella, se sento a su lado y la vio que tomo una invitación que casi estaba a la orilla de donde la habia tirado Hyeong Jun y por curiosidad la abrió y leyó

-Una despedida de soltero – sonrió – Es una pena que yo no pueda tener ese tipo de fiestas

Hangyul se inclinó curioso

-¡Oh, de Dong Pyo! – Exclamó sorprendido

-Así es – dijo Hyeong Jun regresando con el catálogo mirándolo con intensidad – Dong Pyo preparo su fiesta de despedida, se pondrá buena, todos sus amigos irán

-¿Era tu amigo?

-Como Hangyul hyung era nuestro instructor de natación, tenía amistad con muchos de nosotros…  - Respondió alegremente, sobre todo al recordar muchos momentos ardientes en esa alberca

-¡Oh, quisiera ir! – Sonrió Suset

-La boda de Dong Pyo es gay, así que en la despedida de soltero, seguro habrá muchas parejas del ambiente, no creo que usted quiera estar ahí – apunto Hyeong Jun.

-A mí eso no me importa, tengo ganas de ir de fiesta ¿Podrias preguntarle a tu amigo si puedo ir?

-Yo no – Dijo Hangyul

-No te preocupes amor – se volvió Suset a él – Yo soy la que quiere ir

-Solo iría por ti a una hora determinada

-¡Ok!

-Llévate la invitación – Dijo Hyeong Jun - Yo le pido otra a Pyo

-¡Oh, muchas gracias! – sonrió la chica amablemente… maldita sea, quería odiarla, pero no podía

Hangyul suspiro, evitando la mirada ardiente de Hyeong Jun… que ganas de aventar todo lo que estaba en su escritorio y hacerle el delicioso ahí mismo, pero controlo sus locos deseos y para su suerte, Suset se puso de pie para despedirse luego de indicar el bordado adecuado y se marcharon rápidamente… y Hyeong Jun volvió a sentirse miserable… pinches hombres, son todos unos putos.

El día de la fiesta de la despedida de soltero fue el fin de semana

Cerca de las once de la noche, ya estaba todo ambientado, el animador estaba haciendo juegos picantes y el alcohol circulaba por todos lados, así que la fiesta estaba bastante buena, Minhee llego cuando ya comenzaban a bailar en la pista, quedándose en un lugar alejado y oscuro pero con vista a la pista de baile buscando a Seungyeon, en tanto, Suset llegaba a la fiesta arrastrando a Hangyul, primero dijo que se quedaría esperando en el auto, pero ella le suplico que entraran y pues ahí estaban, ella bailando y gozando de las bebidas en una mesa que encontró en el piso de arriba y él buscando con la mirada a Hyeong Jun.

Tanto Hyeong Jun, como Seungyeon, Yohan y Eunsang, estaban juntos en una mesa, disfrutando del baile, Eunsang bien sentado en las piernas de su hombre, mientras bebía cocteles y comía la botanita, la niña se había quedado con su madre, así que irían por la mañana por ella, por el otro lado como buen anfitrión, Dong Pyo se paseaba por las mesas, verificando que todos sus invitados estuvieran bien

-¡Me encanta esa canción! – de repente sonó una rolita sexy y atrevida y Hyeong Jun brincó

-A mí también – apuntó Seungyeon

-¡Vamos a bailar! – le tomo de la mano y lo jalo a la pista de baile, como ya tenía sus copitas encima, estaban muy mareados y alegres

Los dos se fueron al centro de la pista de baile y comenzaron a bailar, justo cuando muchos despejaron la pista y fue que tanto Hangyul como Minhee fijaron la vista en ellos… Ambos comenzaron a bailar de modo atrevido, muy, muy pegados, moviendo sus caderas de modo sinuoso, subiendo y bajando, abrazándose, de repente, Seungyeon rodeaba a Hyeong Jun y lo abrazaba por detrás, pasando sus manos por su cintura y su pecho, de repente bajaba las manos por sus piernas y volvía a subir

Hyeong Jun ladeaba el rostro y se miraban muy, muy cerquita como si fueran a besarse, de pronto, se cambiaban de lugar y ahora era Hyeong Jun quien se ponía detrás de Seungyeon, pegándole sus caderas y abrazándolo de modo erótico y sexual, éste se dejaba muy divertido y le sostenía sus manos para que no lo soltaran mientras cadereaban al ritmo de la música

Hangyul apretó el vaso entre sus manos, que de ser de vidrio, se hubiera roto (Pero era de plástico fino) apretando los dientes y crispando los ojos, sintiendo rabia al ver como Hyeong Jun se pegaba al cuerpo de Seugyeon y permitía que le tocara por todos lados… odio en ese momento que otro hombre le pusiera las manos sobre su precioso cuerpecito ardiente, aparte, esos movimientos, los recordaba perfectamente… Hyeong Jun era bueno en todo, e inigualable en la cama.

Incluso Eunsang y Yohan estaban absortos mirando aquello, ya hasta Eunsang se había puesto en pie, porque no le agradaba que los dos estuvieran haciendo un baile sucio, sobre todo porque no eran ni pareja

Minhee estaba rechinando los dientes desde la oscuridad, con los ojos crispados de celos, apretando los puños, temblando de ira, de dolor, de desconsuelo, no podía creer que esos dos estuvieran haciendo tal espectáculo, que estuvieran manoseándose en pleno público y el resto de los imbéciles aplaudiéndoles su acto impúdico ¿? Deseo correr ahí y separarlos, darle un puñetazo a Hyeong Jun  y decirle que se apartara de su hombre…

Pero aquel baile sensual en extremo seguía, en verdad parecían estar hechos el uno para el otro, porque se complementaban perfectamente, porque los dos parecían ser uno solo, sus rostros rozaban tanto, que el beso parecía inminente, sus bocas pasaban una a la otra por milímetros sin llegar a fundirse… solo eso faltaba, un beso, para desatar el infierno  y sus años de abstinencia, ninguno parecía acordarse de que tenían dueño de sus afectos… quizás porque era unos putos traicioneros que los habían dejado tirados por ahí

Luego los ojos de Minhee se llenaron de lágrimas… pero si ya no era su hombre, Seungyeon… ¿con que derecho podía decirle que no bailaran así? Los dos eran libres, nada los ataba, podían revolcarse juntos, él no tenía derecho a odiar a uno, celar al otro… pero era demasiado, su corazón se caía a pedazos con cada movimiento sensual de ellos dos, el acabose fue cuando se abrazaron de frente, cuando pegaron tanto sus cuerpos, en ese baile sexual, hasta Dong Pyo sintió que se estaban pasando de la raya…

Llego un momento en que Hangyul se puso de pie porque iba a separar a esos hijos de su chingada madre, también Minhee aunque con los ojos llenos de lágrimas, no aguantaba más esa situación, iba a interrumpir su baile, aun con las consecuencias… afortunadamente, Dong Pyo entro a la pista y se puso en medio

-¡Dejen de cogerse en la pista de baile! – les dijo entre los dientes

-¿Qué? ¡Nos estamos divirtiendo! – le dijo Hyeong Jun sonriendo

-¡No te importa si nos quedamos con el pito parado! – Le apoyo Seungyeon

-No me importaría si estuvieran sobrios, pero borrachos hacen tonterías y mañana, si amanecen juntos, será algo que los hará sentir absolutamente culpables y mal el resto de sus vidas – Gruñía sacándolos de la pista al tiempo que hacia señas al animador para que siguiera con los juegos

-¿Qué diablos les pasa? – Chilló Eunsang
-Estos pendejos se van a faltar al respeto y luego estarán arrepentidos – Bufaba Pyo – No es que sea una persona moral, pero hasta yo sé, que lo que están haciendo no está bien, sobre todo porque los hemos visto llorar recientemente

Eunsang jaló a Seungyeon por un lado y Hyeong Jun por el otro donde lo sentó Pyo, le dijo a Yohan que no lo dejara hacer pendejas y los dos quedaron de acuerdo… Nadie se dio cuenta cuando Minhee se fue de la fiesta, ni cuando llego de hecho… Hangyul tuvo que aguantarse un rato más, hasta que Suset se hartó de bailar… sola… y de beber cocteles, fue que los dos se marcharon, él con el mal sabor de boca.

Mientras en aquella mesa del rincón… como niños regañados, estaban Seungyeon y Hyeong Jun, quienes terminaron llorando por sus amores perdidos, así que entre Yohan y Eunsang, tuvieron que llevarse a los borrachos a sus respectivos hogares, por lo menos vivían solos, así que no había nadie que les regañara, luego los dos se fueron a su casa… y aprovechando que la nena estaba con su abuelita… le dieron rienda suelta a su pasión… en la sala sobre el sillón, en la cocina, en las escaleras, en el piso alfombrado del cuarto de juegos de Lía, para terminar exhaustos en su recámara…

¡Pues es que si no era en ese momento, quizás no podrían hacerlo en varios días!