d i e c i o c h o

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[🎢]

El viernes ninguno de los chicos había asistido a la escuela, ambos por la misma razón aún que Yoongi le dijo a sus amigos Namjoon y Jungkook que tenía verguenza de como todos lo miraban por sus moretones.

Por otro lado lo que siempre era un fin de semana lleno de fiestas y cosas divertidas para ese grupo de chicos (el círculo cercano de Hoseok y Yoongi) se había convertido en uno amargo y silencioso.

Hasta que el lunes llegó con un delicioso sol, pero eso no le alegraba a Hoseok.

Después de su mensaje hacia su “ex” la había visto hoy y estaba completamente normal incluso reía con otra chica que había junto a ella, a la entrada pero era tarde, por lo menos para ella así que cuando paso a un lado de el solo le sonrió y corrió al segundo piso de el edificio.

Hoseok estaba más tranquilo, al menos no estaba mal y llorando ó triste ó bueno por lo menos eso aparentaba.

Jung entro a su salón, con la mirada baja sin mirar a otro lado que no fuera el lugar justo enfrente de el profesor, el cual nadie tomaba, pero Hoseok no quería ver otra cosa en ese salón ó si quería pero no debía, tomo sus clases normal sentándose lo más alejado de Yoongi que pudo, e incluso estaba poniendo atención a sus clases pero eso no quitaba la precion en su pecho.

Hace unos días el pelinegro había llamado a Hoseok con la esperanza de que contestará y lograrán hablar sobre lo que pasó, aún que quería no se atrevió a ir a su casa, aun que eso desapareció cuando el menor no contesto y desvío la llamada, pero fue aún peor cuando bloqueo el número de Yoongi, eso había sido el final, el pálido chico había sido destrozado totalmente en solo unos días.

De el otro lado de el salón estaba el pelinegro sintiendo su corazoncito hecho aún más trizas que antes, lo vio, y el no se veía feliz tampoco pero por dentro Min sabía que no el no era la razón de la tristeza de su menor, tal vez la situación de hace casi una semana le había traído muchos problemas.

Yoongi noto que Hoseok y Jimin no se miraban y tampoco hablaban, pero el pequeño mejor amigo de Jung se había pasado sonriéndole amablemente a el pálido chico, era muy extraño, pero igual no iba a preguntar nada, no quería causar aún más problemas para su adorado pelinaranja .

Y sin más contacto entre los chicos llegó la hora de el almuerzo y Hoseok solo estaba sentado en el patio solo, mientas veía a todos caminar a su alrededor, se sentía frustrado.

Jimin al parecer estaba aún enojado con el por qué no se le acercaba, más sin embargo se la pasaba mirándolo y sonriendole .

Hoseok estaba sumido en su miseria, había perdido todo, después de leer la carta que Yoongi dejo en su habitación después de el “insidente” se había sentido una mierda, Yoongi lo queria y el jodió todo, al igual que con la chica morena, Hoseok estaba apunto de irse pero alguien lo detuvo.

Ese alguien se paró frente a él, y era ella, ¿Su chica?, Tal vez no todo estaba perdido.

—Hola Hobi— saludo ella, inclinado su cuerpo hacia el.

— Sara yo, — estaba listo para dar el discurso de disculpas que había estado preparando.

—Shhh, vayamos a la cafetería, hoy hay fideos con pollo, te gustan— cambio de tema lo cual era bueno, Hoseok no quería hablar de siendo penetrado por otro hombre frente a alguien con quien después probablemente tenga que dormir. — vamos, yo invito— Sara extendió su mano.

Y caminaron juntos hasta la cafetería con Sara de su mano, Hoseok estaba relajado por lo menos ahora todo estaba bien con su novia.

Se sentaron en la mesa de siempre, mientras comían Sara comenzó a parlotear y hablaba con Hoseok fácilmente.

Aún que estaba disfrutando de su estancia con la menor no logro evitar mirar hacia la mesa de su Hyung, y se topó con la mirada de Min, quien la quito rápidamente y paso su mirada por Namjoon que lo miraba con mala cara.

—Sara, puedes llamar a mi mamá?, Quiero saber cuando estará aquí— pregunto intentado escapar de lo que Yoon le había echo sentir y de la mirada de Namjoon.

—Oh, si Hobi, le diré a mi madre que le llame más tarde— respondió apenada.

—  Sara ahhh, yo quiero hablar sobre— respondió rápido, pero la menor fue aún más rápido al interrumpirlo 

— Hoseok, los fideos se enfrian— cambio de nuevo de tema, la menor.

Al parecer todo había por fin vuelto a la normalidad, lo que tranquilizaba a Jung, ahora no tenía por qué temer a algo, solo tenía que dejar pasar los días, como antes de que Yoongi apareciera siendo tan hermoso.

secreto ; yoonseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora