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Domingo
1:38 p.m.

En la casa Jung había un completo desastre, pero eso no era motivo de el dolor de cabeza de Hoseok ¿El alcohol?, Bueno tal vez un poco pero no era eso tampoco el moreno sentía como si lo hubieran golpeado todas las personas de la fiesta. Su cara estaba hinchada y con un poco de sangre molida por sus pómulos ¿Había sido golpeado por alguien?.

Jung estaba en la maravillosa situación de no recordar nada, no quería llamar a su pequeña acompañante de ayer por miedo a haber hecho algo, ni tampoco a Jimin por la misma razón, la única persona que podía decirle que pasaba era  Min-Tronco-Yoongi quién estaba en la habitación de el menor dormido.

El menor levantaba basura que había en toda la casa, el sillón incluso estaba mojado, habían cosas súper random en todas partes de la casa, incluso había ropa ¿Había sido una fiesta ó un tsunami? El escenario ante los ojos de Hoseok se veía más como la segunda, solo que con alcohol.

En la "limpieza" el pelinaranja encontró aun mas botellas de alcohol de las que había comprado, algunas nuevas otras con muy poco, pero ¿Que haría con tanto alcohol?, Tal vez su idea de emborrachar a Yoongi y tenerlo para el solo no era una mala idea.

Hoseok tomo la más llena y corrió escaleras arriba rápidamente, camino hasta llegar a donde estaba su atractivo compañero de clase tomo un trago de la botella con letras verdes y paso rápido sintiendo el ardor bajar por su garganta.

Subió a la cama y se acomodo sobre el, se agachó un poco y lo besó, primero logro tener el control de su unión por qué Yoongi nisiquiera había despertado pero después pudo sentir las manos de Min sobre sus caderas y también sintió su cálida lengua sobre la de el.

Yoongi se separó enseguida y lo miro desconcertado.

—¿Qué hora es lindo?— observó la ventana — No se ve de noche y tú ¿Ya estás bebiendo? — pregunto serio y con voz ronca.

— ¿No te gusta?, Honestamente no importa la hora, tengamos una fiesta privada — El menor tomo otro gran trago de la bebida y unió sus bocas para pasar el vodka de su boca  a la de su Hyung.

Min lo tomo, este era el momento de mandar todo a la mierda y pensar en lo mucho que amaba la combinación de Hoseok con alcohol.

—Eres tan hermoso Hoseok, ni los morados en tú cara te arruinan— Susurro el mayor en los labios de su lindo pelinaranja.

El menor decidió que era mejor no contestar a eso, sus manos solo lograron alcanzar con amor las mejillas de su mayor y besarlo, besarlo de una manera que nunca había besado a alguien antes, sentía que era su corazón quién besaba a su Hyung y no sus labios.

Siguieron bebiendo de la botella hasta que la última gota salió de ella, bajaron por otra más y tomaron de la misma manera de ella, magníficamente aún no estaban tan ebrios .

—Yoongi, yo, honestamente no recuerdo que pasó ayer, uh, ah, am, ¿Me pegaste?— pregunto al ver la mirada culpable de su Hyung sobre su hinchado rostro.

—Lindo yo jamás haría algo así— rasco su nuca— Verás, te caíste y yo no alcance a sostenerte y tú bonita cara pegó directo en el piso de el baño.

—Hyung ¿Mi bonita cara?— río avergonzado mientras sonreía como si nunca le hubieran dicho algo así.

—Si, tú hermosa cara— afirmó para tomarlo de la mano y jugar con ella.

¿Es necesario decir lo enamorado que estaba Jung Hoseok?, ese hombre si que sabía cómo mantenerlo enamorado y feliz, y también idiota, jamás sabría lo que le pasó ¿O si?.

secreto ; yoonseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora