No Te Enamores De Un Choi

Capítulo: 33 "Su protectora"

Llevo tres días viviendo en casa de Choi. Todo va bien no hemos discutido.

Y es que parece estar muy inmerso en lo que sucede con la empresa y aún no me quiere decir nada. Supongo que primero quiere arreglar el asunto.

Hoy es lunes por lo que tengo que ir a la universidad y debo obviamente enfrentar a So Hae quien me ha llamado los últimos dos días. Obviamente no le contaré todo por teléfono. Aunque la verdad es incómodo contar que vivo con mi jefe.

Acomodo mi abrigo muy bien, el día de hoy está muy lluvioso, la casa de Choi es muy fría y temo enfermarme. Voy hacía las escaleras al terminar de arreglarme, Choi duerme en la planta de abajo y yo en la de arriba, así dice que no estaré incómoda, de hecho se ha preocupado mucho por ese aspecto.

Al bajar veo a mi jefe en la sala en su computadora, aún me sorprende que esté haciendo sus cosas como si su brazo no haya sido herido por una bala.

—Buen día presidente. —Hago una reverencia.

Él deja de ver su computadora y hace una reverencia.

—Bien día ¿Se va a la universidad? —Pregunta dejando su computadora en el sofá.

—Si, hoy reinicio clases.

— ¿No va a desayunar? —Pregunta alzando una ceja.

—Desayunaré algo en la universidad. Lo veo más tarde. —Hago una reverencia y camino hacia el recibidor.

El hecho de que se preocupe por los mínimos detalles es extraño.

Obviamente el chófer de Choi me está esperando y con ello dos camionetas blindadas para nada disimuladas. Al menos al llegar a la universidad pasarán desapercibidos, o al menos eso me hace pensar él.

Al llegar a la universidad siento una gran alegría al ver mi recinto, Ehwa es una de las universidades más importantes de Corea del Sur, además que apoyan el empoderamiento femenino y eso me encanta. El pensar que en cuatro meses dejaré mi universidad me hace sentir un poco de nostalgia.

Al llegar a mi primer clase me doy cuenta que he llegado muy temprano, por lo que la fastidiosa profesora de inglés no ha llegado y eso me pone feliz. Es obvio que no ha olvidado a Dae Hyun. Ese hombre es un rompe corazones.

Me doy cuenta que So Hae ha llegado, al verme corre hacía mi y me abraza con mucha fuerza casi sin dejarme respirar.

— ¡Min! ¡Te extrañé mucho! ¿Por que no contestas mis llamadas? ¿Todo está bien?

Trato de no llorar al contarle como me siento, esto ha sido bastante difícil para mí, tantos cambios... Y presiento que apenas es el comienzo.  También le cuento todo lo ha ha sucedido, claramente muy discretas.

—Bueno... es bastante raro vivir con tu jefe... Pero no dudo que será por tu bien ¿Y como se comporta? —Dice con una sonrisa.

Suspiro resignada sé que no me dejará tranquila hasta que le cuente todo.

—Bien, me da mi espacio. —Digo tratando de sonar lo más normal posible.

—Aigoo... No seas ingenua es obvio que ustedes están viviendo algo nuevo. Ambos se sienten extraños.

Tiene razón, al menos yo siento mi corazón latiendo muy rápido al saber que vivo con Choi.

—Estoy tratando de no meterme en problemas So Hae.

—Bueno, te aseguro que tu vida es un problema desde que te cruzaste con ese hombre. Pero no está nada mal, él es un oppa de dramas. Especialmente de aquellos románticos. —Dice riendo.