Asher
Miro mi reloj como por décima vez cuando al fin el guardia me abre el portón. Le doy una sonrisa de agradecimiento y acelero mi carro.
Holden me va a matar y con toda razón.
Le dije que estaría antes de la carrera para probar el auto y no le he cumplido. Claro que no fue mi culpa, los periodistas me interceptaron cuando salí del restaurante y como era de esperarse no dejaron de preguntar sobre la carrera de hoy. No fue fácil librarme de ellos y menos sacar a mi padre de ahí. Querían acaparar cada centímetro de él. Lo que termino con mi padre bastante molesto y refunfuñando sobre los periodistas imbéciles que se meten en las vidas de los demás porque no tienen nada interesante en sus estúpidas y aburridas vidas.
Estaciono el auto y bajo dejando a papá adentro de él. Corro hacia Holden que me mira bastante serio.
—Lo siento, lo siento. Sé que llegue tarde y que estás molesto, pero en mi defensa los periodistas me atraparon. Ya sabes cómo son cuando logran tener algo de mí. Además, mi padre estaba conmigo y eso solo hizo que todo empeorara.
—Eso es una buena excusa adolescente puberto—. Holden me sonríe divertido mientras me pasa la chaqueta y el casco. —Pero... ya tu padre me contó algo bastante interesante—. Abro mis ojos en sorpresa para después girarme y ver a mi padre, que viene caminando, comiendo una barra de cereal.
—¡Papá! — Exclamó y mi padre se asusta tirando su barra al suelo.
—¡Asher! Mira lo que hiciste.
—¿Lo que yo hice? Fuiste tú él que se fue de chismoso y le contaste todo a Holden —. El mencionado comienza a reírse mientras papá se encoge de hombros.
—Ya deja el drama Asher. Además, quiero creer que me lo ibas a contar porque yo soy tu mejor amigo y tú nunca me ocultas tus cosas—. Iba responder cuando el mismo me pone el casco y amarra el abrigo. —Hablamos luego de eso Hiddleston. Por ahora ve a correr y esperemos que el auto no tenga ninguna falla.
Asiento y me coloco lo guantes mientras camino a la pista. Hay muchos fanáticos gritando los diferentes nombres de los corredores a todo pulmón.
—Asher Hiddleston se acerca a la pista. Ahora así está carrera se está poniendo buena. ¿Qué dice el público? ¿Ganará de nuevo Hiddleston o está vez será Richarson? Al parecer es algo que tendremos que esperar—. El locutor termina de hablar y las voces de las personas gritando mi apellido se hace más fuerte.
—Esperan mucho de ti Hiddleston—. Shlieman, un excelente corredor y ser humano. Puede decirse que es de las mejore personas que he conocido en NASCAR.
Quito mi casco para verlo mejor y él me sonríe en modo de saludo.
—Es bueno verte Shlieman. ¿Nervioso por la carrera?
—Para nada. De hecho, siento que hoy es un buen día. Tal vez me lleve el segundo lugar—. El comienza a ponerse los guantes mientras a mí me colocan el micrófono para oír a Holden directo de los "pits".
—¿Por qué no el primero? — Holden me habla para ver si lo escucho y lo confirmo.
—Está claro que contra ti nunca voy a ganar.
—¡Todo los corredores a sus autos! — Nos grita una persona que no se en que trabaja. Tal vez de producción.
—Nunca debes perder la fe. Tal vez hoy sea tu día de ganar y yo de perder.
—Sea como sea siempre es honor competir contra ti.
—Lo mismo digo Shlieman—. Me coloco el casco asegurando que no se salga de su sitio y de que esté bien amarrado.
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Life in reverse✅
Teen FictionAsher Hiddleston es un fanatico de las carreras de Nascar. Desde pequeño supo que correr estaba en su sangre. Que la adrenalina era su vida. Ahora, él nunca pensó que con una carrera clandestina iba a cambiar su vida. Con apenas 16 ganó su primera c...