El monstruo del que me enamoré ©

Capitulo 1

El 21 de agosto del 2021 a las 12:37 AM, el 911 de la ciudad de Morelia, recibió una llamada por parte de un niño.

-911, ¿cuál es su emergencia? -preguntó la operadora del teléfono.

-Mi papá le acaba de hacer daño a mi mamá con un cuchillo y ya no se mueve -mencionó el niño nervioso.

-¿Tu papá aún se encuentra en tu casa? -indagó tratando de dar una solución rápida.

-No señorita, en cuanto dejó a mi mamá en el suelo, se fue de la casa y no dijo a dónde iba -dijo igual de nervioso.

-¿Te sabes tú domicilio cariño? -preguntó lo más calmada posible.

-Si señorita -respondió el niño.

-Pásamela por favor -ordenó la operadora para actuar rápido.

El niño le pasó la dirección a la operadora del teléfono. Cuando terminó de decirle, la señorita dijo de manera calmada para no alterar al niño:

-Un par de patrullas y una ambulancia ya van en camino cariño; tu quédate tranquilo en dónde estás, todo estará bien.

La operadora telefónica colgó. 10 minutos después, llegaron las patrullas. Los policías se bajaron de su vehículo y se dirigieron a la casa que les indicaron. Al llegar a la puerta, uno de los policías tocó fuerte y segundos más tarde, un niño de aproximadamente 5 años, piel de tonalidad morena clara y cabello negro, abrió la puerta.

-Hola amiguito, nos dieron el reporte de que una mujer estaba herida en este domicilio -mencionó serio uno de los policías.

-Es mi mamá. Pasen señores policías -contestó con educación, aunque se le notaba nervioso.

Los policías pasaron, empezaron a revisar a la mujer y a los alrededores mientras dos de los policías le hacían preguntas al niño sobre lo sucedido. Uno de los policías sacó una grabadora para tomar la declaración del niño.

-¿Nos puedes contar que pasó?

-Claro que sí, señor policía. Yo estaba dormido, pero me desperté de repente porque mi papá entró a la casa gritando; así que yo solo me escondí abajo de las cobijas. Segundos después, mi mamá salió a callarlo porque yo estaba dormido, pero mi papá la empezó a insultar y luego mi mamá comenzó a gritar; entonces yo me asomé por la puerta y vi que mi papá le estaba jalando el cabello. Él fue a la cocina por un cuchillo y enseguida de eso, hirió a mi mamá. Cuando notó que lo estaba viendo, soltó el cuchillo y se fue de la casa -relató el niño con un notorio nerviosismo.

El policía de complexión mediana dejó de grabar y le siguió haciendo preguntas al niño.

-¿Cómo se llama tu papá? -el policía seguía indagando muy serio.

-Se llama Felipe Gaona García -respondió mirando al suelo.

El policía escribió en una libreta pequeña el nombre del papá y siguió con las preguntas.

-¿Cuántos años tiene tu papá?

-Creo que tiene 40 años -respondió mientras recordaba.

El policía apuntó eso y siguió con las preguntas.

-¿Me podrías enseñar una foto de tu papá?

-Si, en aquella mesita hay una foto de él junto con mi mamá -señaló el pequeño.

El policía se paró, fue a dónde le dijo el niño y tomó la foto.

-¿Me la podría quedar hijo? -preguntó calmadamente.