My Diamond Hates Me | Stevnel [Diamond Steven Au]

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—¡¿Eres un diamante?! —gritó la fusión separada mirando al muchacho que se encogió de hombros.

—Sí —contestó. No le importaba la situación, estaba pensativo sobre la discusión que tendría con aquellas tres diamantes.

—Esto es increíble —habló la amatista sonriendo emocionada y luego miró a Perla que desvió la mirada al instante.

—¡No! ¡No lo es! ¡Nos mintió! —gritó la ruby furiosa. La zafiro se cruzó de brazos y juntó sus manos.

—No es tiempo para discutir de esto —habló firme el diamante. La puerta fue abierta por dos perlas de colores primarios.

—Diamante Rosa, nuestras diamantes piden su presencia —él aclaró su garganta y salió de ahí. Al llegar a aquel salón, se dejó ver a una afligida azulada.

—Steven, te extrañamos tanto —habló quebrada la diamante azul.

—¡Esto es inaceptable! ¡¿Por qué fingiste tu destrucción?! —gritó la amarilla. —¡White está furiosa! —admitió.

—Lo sé —habló entre dientes, molesto y miró a Perla. —Tenemos que hablar.

—¡NO! Silencio —Steven apretó los puños. —Nosotras hablaremos, ¿sabes cuál es el problema con todo esto? ¡Es totalmente inaceptable! Fingiste tu muerte, dejaste de las responsabilidades, ¡Te fusionaste con cualquieras! ¡Y vienes aquí con la espinela, que te regaló Blue, corrompida! —volvió a gritar.

—Eso en lo de menos... Pudo haberse roto —habló esta vez la azulada. Steven soltó un grito, coloreándose de rosa:

—¡SÉ MUY BIEN QUÉ HICE! —gritó y golpeó el suelo, quebrándose.

—¡No te atrevas a alzarme a voz, Pink! —Steven retrocedió y sintió los ojos humedecerse. —Estás actuando como un niño —se corrigió.

—¡NO SOY PINK, NO SOY UN NIÑO! —volvió a gritar y le tiró a la amarilla un escudo.

—¡¿Cómo te—esto es inaceptable! —chilló y dio unos pasos al amarillo. —¡¿Sabes qué?! ¡Actúas como un niño! ¡Eres un inmaduro! ¡Te quitaré tus colonias, remplazaremos a tu perla y destruiremos a esas defectuosas!

—¡A-Amarill——

—¡Ya está hablado, Blue! —el humano comenzó a respirar con dificultad.

—¡NO ERES CAPAZ! —volvió a gritar —¡TÚ ERES LA QUE ACTÚAS COMO UNA NIÑA! ¡Deja de pretender ser perfecta! ¡ERES IGUAL DE DEFECTUOSA QUE YO! —volvió a gritar. La amarillo retrocedió y lo miró, frunciendo el ceño.

—¡Me cansé! ¡No puedo discutir contigo! ¡VE A TU HABITACIÓN!

—¡VOY A HABLAR CON WHITE Y SE VAN A ARREPENTIR! —amenazó.

—¡¿CREES QUE DESPUÉS DE LA DESHONRA QUE DISTE VA A HACERTE CASO?!

—¡¿TE HIZO CASO A TI QUE TANTO ERES HONRADA?! —Yellow abrió los ojos a más no poder y suspiró.

—Olvídalo, no tienes la edad para entenderlo —y salió de la habitación.

—¡OJALÁ TE MUERAS, ZORRA! —gritó con fuerza el piel rosada, causando que las paredes se quiebren. Él soltó un bufido y volvió a su color normal, soltando un quejido y un sollozo. —M-Mierda...

—Steven —llamó la azulada. —Hablemos —él asintió y flotó a ella. —Calma, ¿qué ocurrió? —él comenzó a contarle todo, causando que la manera de pensar de la azulada comience a cambiar.