In the silence of the night.

🍃C42🍃

Narra Charlotte:

El centro histórico era hermoso, por eso elegí ir a un restaurante que este en él, cuando terminamos de cenar miramos algunos lugares y nos sacamos algunas fotografías, el tema con el cambio de horario nos perjudicaba un poco pero aún así volvimos como a las 3a.m.

- Bueno, a dormir ya que mañana finalmente sabrán el motivo por el cual los traje al otro lado del mundo y espero les agrade realmente. - dije cuando estábamos en la sala juntando las manos para dar apoyo a mis palabras.

- Sé que nos gustará, Charlotte, este lugar es hermoso y con una cultura bastante interesante. - dijo la madre de Liam, acto seguido se acercó a darme un abrazo con un beso, esa señora realmente me trataba como a una hija y de verdad se lo agradecía.

Los demás también estuvieron de acuerdo con las palabras de Margaret, se despidieron y fueron a sus respectivas habitaciones, yo no tenía sueño y noté que Liam tampoco.

- Hey, ¿te apetece la tradición? - dije sonriendo como niña pequeña, él captó el mensaje y también sonrió.

- Esta vez elijo yo. - puse un puchero. - Ya soy inmune a eso, nena, además, tu elegiste las dos últimas, hay que ser justos.

- Bien. - dije tras bufar, voltee en dirección a Anthony, quién salía de la cocina con un vaso de agua. - ¿Te nos unes?

- No sé qué harán, pero paso, estoy muerto. - camino hasta mi y me dio un beso. - Buenas noches, princesa, que descanses. Tu también, hermano. - palmeó el hombro de Liam y se fue.

Me encogí de hombros y estire a Liam hasta el sofá donde nos sentamos y él encendió el televisor sincronizando Netflix.

Cuando llevábamos como seis meses de conocernos empecé a pasar tiempo en su casa y él en la mía, así que decidimos que cada lunes veríamos una serie que involucre desvendar algún misterio, así que se volvió la tradición del lunes CSI. Incluso cuando me mudé con Anthony y cuando todo pasó lo seguimos haciendo, es nuestro tiempo juntos y en verdad lo aprecio.

Faltaban tres capítulos para el final, el sol se asomaba por las cortinas, yo decía que fue Josh y él que fue Noah, mis ojos se cerraban pero no podía dejar de saber si me debería 10 dólares o si yo tendría que subir corriendo hacia el templo Wat Phra That Doi Suthep, Dios, tarde tres días en aprender ese nombre, lo que si dicho templo contaba con 309 escalones hasta la cima y no quería correr en todos ellos.

- ¿Y si nos saltamos dos capítulos y vemos el final? - saque mi cabeza de su pecho para mirarlo, sabía que yo odiaba que hiciera eso. - No me veas así, estamos casi durmiendo y yo ya quiero que subas esas escaleras. - le saque la lengua pero finalmente asentí.

- Sólo por esta vez, pero sigo pensando que 10 dólares es muy poco considerando tu contra propuesta.

- Eso te pasa por decir apuestas sin pensar. - le golpee la barriga y él río, acto seguido lo abracé. - Extrañaba hacer esto y sólo lo dejamos por cinco semanas, enana. - me retribuyo el abrazo y beso mi cabello.

- Hey, ¿qué pasó con aquella chica de la que me hablaste? No me dio tiempo de preguntar. - él se encogió de hombros.

- No soy para relaciones, de eso estoy seguro, ella era una chica estupenda pero de igual forma me aburrí, no sé qué está mal conmigo... - pausé la serie y me senté sobre mis piernas para mirarlo.

- No hay nada malo contigo, Liam, en realidad eres mejor que la mayoría de los mujeriegos, tú no ilusionas a nadie, cuando sientes que puede ser posible lo intentas pero cuando ves que no, lo dices y dejas el camino libre. No es que no sirvas para relaciones, es sólo que no has dado con la indicada, no tienes por qué apresurarte, tienes 23, eres básicamente un adolescente aún, cuando es para ser, se da y ya, mientras tu sigue divirtiéndote sin herir a nadie. - lo tome por las mejillas y clave mis ojos en los suyos. - Eres increíble, William Galhagher, nunca lo dudes. - bese su frente y él sonrió.