Sólo Vuelo Contigo - Aiteda.

20-

Cepeda.
El tener a Aitana el dia en el que hacemos un mes era algo que creí imposible, pero aquí la tengo, entre mis piernas mientras tocó la guitarra para ella.

Era un día especial, y no podía estar más feliz.

Me había dicho que está noche íbamos a cenar por ahí, ya que mañana a las 5:30, cuando sale el primer ave, se iba para llegar al menos a la segunda hora de la Universidad ya que hoy se a perdido prácticamente la mitad de ellas.

Me sentí un poco mal ya que sabía que le gustaba y hacía mucha ilusión la carrera de diseño, pero ella ya a estado ocupándose de que no pasará por mi cabeza esa penilla mala.

Eran las 14:30 y ambos ya estábamos comidos, ella en el tren y yo poco antes de que llegara.

Estaba lleno tan sólo de tenerla cerca.

Y no podía petar más.

Estaba enseñándole mis últimas composiciones totalmente inspiradas en ella, en su mirada y sonrisa.

El brillo de sus ojos mirando como raspaba cada una de las cuerdas de la guitarra me hacía sentir vivo.

No me había echo gracia que viniera hasta aquí por mi, perdiéndose clases de la Universidad, cuando le hace muy feliz estudiar diseño, pero ella ya se había ocupado de que no tuviera ni el mas mínimo sentimiento o pensamiento negativo en mi mente o corazón.

Y es otra de las cosas de ella, sabe que hacer y como hacer las cosas para que este bien en todo momento.

Ella tenía mi corazón entre sus manos y mi alma ante sus pies.

Ella me tenía a mi para ella.

Y era algo que no quiero cambiar nunca.

Quiero que me tenga para el siempre.
Aitana
Me he ido a mi habitación a vestirme para esta noche, Ana me va a ayudar, y no puedo estar más feliz.

Con Luis todo es mas fácil y bonito.

Definitivamente lo tiene todo.

-¿por que no te pones el vestido rojo?-comenta Ana cuando ve que no se que ponerme.

Cojo el vestido ceñido rojo que compramos hace relativamente poco y no me lo he puesto.

Me cambio y me miro al espejo.

Me a crecido la barriga de un día para otro y no entiendo muy bien que es lo que está pasando.

No he comido comida basura en estas últimas semanas, es más, me da bastante angustia.

-Ana, ¿tú entiendes por qué tengo ahora este bulto?-digo señalandolo.
-no se aiti, será de algo que has comido.
-pero es que no he comido nada que no fuera sano.
-¿qué quieres insinuar?

Miro a Ana directa a lo ojos.

Tengo claro que por su cabeza está pasando lo mismo que por la mia.

Pero no quiere decirlo hasta que yo lo diga, es mi hermana, la conozco mucho.

Se levanta y pone su mano en mi hombro, en señal de apoyo a mi y de la sorpresa que no tenía en mis planes.

-creo que estoy embarazada Ana.

Este capítulo es muy corto y raro, porque nadie se lo espera. Pero bueno! Yo ya dije que venía y se vino. Después de esta novela terminaré males que vida, si no la he terminado ya, y ya empezaré una de cero que no tenga nada que ver con estas tres.
Besos!