40-

893 29 2
                                    

Cepeda.
Meto un dedo mientras acarició su clítoris con mi lengua.

Aitana suspira y se agarra a las sábanas, arrugandolas.

Suspiros que tenían nombres, que suspiraban mi apellido.

Otro dedo se adentra dentro de ella, haciendo que ella arcara su espalda.

-no pares por favor, Luis.

Sonreí a su súplica y le hice caso como a la misma diosa del Olimpo.

Aitana paso sus manos de la sabana a mi nuca, pidiendo que no parará.

Pude notar como su líquido se iba soltando poco a poco y Aitana clavaba algunas uñas suyas en mi nuca.

Cuando ya vi que Aitana estaba mas relajada, me separé de su parte para subir y besarla.

-te quiero demasiado, Luis.
-no tanto como yo, sois mi vida.-digo tocando su vientre, donde se colocaba nuestro bebé.

Aitana vuelve a besarme y me gira.

-te toca.

Aitana me besa para, seguidamente, quitarme la camiseta y besar mi cuello mientras yo acarició su espalda.

Aitana fue bajando sus besos a mi pecho hasta llegar al filo de mi pantalón.

Beso mi miembro con el pantalón puesto haciéndome estremecer, y sufrir.

-yo no te he echo eso.
-tampoco te lo he impedido.

La fultigo con la mirada y desabrocha mi cinturón y seguido mi pantalón, para después bajarlo.

La ayude para quitarlo del todo, y beso mi miembro encima del calzoncillo.

-deja de torturarme.

Aitana me miro dando el último beso a mi calzoncillo y lo bajo.

Beso mi miembro recto y no tardó en empezar a chuparlo.

Sentía que me iba a otro mundo estado ella cerca mía, sea fe la forma que sea.

No mucho tiempo después, me corrí en su boca, y ella trago todo.

Subió a mi lado y volvimos a besarnos.

Metí mi miembro en su parte y ella abrió la boca reprimiendo un gemido.

Empecé con un vaivén encima suya mientras ella soltaba pequeños gemidos.

Ya dimos por entendido que embarazada no podía volver a quedar embarazada, y por eso no buscamos ningún tipo de protección.

No tardamos mucho en llegar al orgasmos ambos.

Descanse en su pecho sin aún salir de ella y dando besos a su cuello.

-vas a dormir de una.-Dice Aitana notando que me costaba volver a tener una respiración normal.

Levante la cabeza y le di un beso en los labios.

-es que eres increíble.

Aitana arrugo la nariz y beso la mía.

-¿dejamos entrar a tobby?

Asentí levantándome totalmente desnudo.

-ponte algo, anda Luis.
-ni que el perro no me haya visto en pelotas.

Aitana río.

Abrí la puerta y tobby entró directo, sin pensarlo mucho.

-tenías ganas de ver Aitana desnuda, sin vergüenza.-dije acariciandolo.
-el sin vergüenza eres tú.-dijo abrazando mi espalda, notaba que estaba totalmente desnuda.
-¡ya defiendes antes al perro que a mi!
-vamos a dormir, tonto.

Ambos nos tumbamos en su cama totalmente desnudo y no tardamos mucho en dormir.

En el siguiente capítulo se dirá el sexo!
Decirme nombres!
Besos!
#quédateencasa.

Sólo Vuelo Contigo - Aiteda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora