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Cepeda.
El doctor salió por la puerta, y yo me puse donde estaba anteriormente el ginecólogo.

-con que sobre-excitación.
-No seas tonto, Luis.

Meto mi mano por debajo de esa manta gigante que tapaba la vagina de aiti, y como si de un camino guiado tratase, voy directo a su clítoris.

Apretó un poco su botón mágico.

-Luis, por favor.-suspira.
-ssshhh.

Juego con sus labios inferiores y terminó metiendo dos dedos de golpe.

-Luis, no es sitio.

La beso testaduramente y sigo con un gran vaivén con mis dedos en su vagina.

-nos van a echar.-me susurra al oído.
-no te preocupes.
-no todo se arregla con dinero, Luis.

Meto otro dedo del tirón y Aitana aprieta los labios intentando no gemir.

Sigo con mi vaivén, besando a Aitana de vez en cuando.

-¿quieres que pare?
-No, ahora no.-suspirando.

Con mi dedo pulgar estímulo el clítoris llevandome una mirada asesina por parte de aiti.

Casi no llego a meter el cuarto cuando Aitana se empieza a correr y coge mi cara para besarme, y no gritar en la corrida.

Cuando Aitana ya me suelta, saco mis dedos de su vagina y manta y los chupo.

Luego cogí una servilleta que habían por ahí y limpie mis dedos y tiré a la basura de al lado de la máquina de radiografías.

-nos queda algo por hacer.
-En casa.

Asiento y la beso.

Estuvimos hablando de temas banales esperando a que volviera el ginecólogo.

Aitana
El doctor tardó más tiempo del que esperábamos, pero decidimos no meterle prisa, pues no sabíamos en qué situación estaba, y sobre todo Luis sabe lo difícil que puede ser.

A los 30 minutos de haberse ido, y unos 15 desde el traqueteo de Luis, llegó el ginecólogo.

-lo siento por la espera.
-no se preocupe.-responde Luis.

El doctor vuelve a ponerse los guantes y la mascarilla.

-vale, la vagina, como creo que ya le he dicho, todo bien, si quiere, en principio puede hacer parto natural perfectamente, y todo bien quitando la sobre-excitación, que espero que el próximo día este mejor. Ahora le tengo que hacer una revisión del pecho para confirmar que todo este correcto.

Ambos asentimos y quito la parte de la manta de mi pecho, dejando los dos al aire.

El ginecólogo empieza a masajear el derecho.

-Me tienes que decir si te duele.
-vale.

Pellizca ligeramente el pezón, cosa que antes no me dolía y ahora un poco.

-¿te duele?
-un poco.
-vale, no te tienes que preocupar, eso significa que está empezando a hacer leche y todas esas cosas que van a nutrir al bebé. Voy al otro.

El ginecólogo va al otro lado de la camilla, y hace lo mismo con mi otro pecho, y también me duele un poco.

-todo correcto, el pecho está como debe estar, y el dolor es normal, si en la acción sexual te duele, es mejor no forzarlo porque puede aumentar el dolor ya que lo tienes muy sensible al estar embaraza, ahora vamos a ir a ver el bebé, llamo a una enfermera que te vaya poniendo el líquido mientras preparo todo.

Asentí y enseguida vino.

¡íbamos a ver por primera vez a nuestro bebé!

¡ya van a ver al bebé! Una pregunta, ¿que queréis que sea? ¿niño o niña? Mmmmm. Ya veré, ya veré. Besos.
#quédate en casa.

Sólo Vuelo Contigo - Aiteda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora