Cap. 16

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2 años después.

/Kasandra/

Me encontraba sonriendo de oreja a oreja, hoy era un gran día, hoy deje Hogwarts y después de un año volvería a ver a Severus, lo extrañaba demaciado, como ustedes ya suponen el se graduó el año pasado y siguió estudiando, gracias a esto no lo pude ver en vacaciones y nos mandamos muy pocas cartas en éste lapso de tiempo.

Sonreí al sentir como el tren se detenía indicando así que había llegado a la estación, até mis agujetas ya qué una se desato y no me había dado cuenta, agarré mi mochila y mi baúl, las puertas del vagon se abrieron, fui la primera en salir, lo primero que vieron mis ojos fue a el, vertido con un pantalón negro, una sudadera gris y un par de tenis color negro, su cabello había crecido un poco y lo llevaba amarrado en una coleta, no lo pensé dos veces, deje car mi baúl y fui corriendo a el, al estar casi frente suyo salte a sus brazos con lágrimas en los ojos, el me abrazo fuerte.

-te extrañe mucho amor- me dijo al oído.
- yo también te extrañe mucho- me separe un poco de el para limpiar mis lágrimas con la manga de mi sudadera- prometeme qué no se volverá a repetir lo de no vernos en mucho tiempo - dije mirándolo a los ojos, el sonrió ¡demonios como amo su sonrisa!
- lo prometo - aseguro y luego beso mis labios- ahora vamos por tu baúl para ir a casa de tu padre, nos están esperando y prometí qué no tardaría mucho.
- está bien - dije caminando agarrada de su mano a mi baúl.

El agarro el baúl con una mano, soltó mi mano para agarrarme de la cintura y después desaparecer para aparecer afuera de la casa de mi papá, al abrir la puerta corrió a mi un pequeño niño de 4 años, Hetan, mi hermano, lo cargue en mis brazos y le di un beso en la mejilla.

- Kasy ¡volviste! - dijo mirandome a los ojos.
- claro que si y ya no me iré- le sonreí.
- por ahora - dijo Severus en un susurro qué solo yo escuche.
- ¿Hay algo que me quieras decir? - mire a Severus.
- por ahora solo que te amo- sonrió.
- Sev ¿me cargas? - pregunto Hetan.
- ¿por qué tendría que hacer eso? - dijo alzando la ceja.
- por que yo te quiero y tu a mi- le sonrió.
- Hetan, Sev es mio de hoy en adelante y no te lo pienso prestar- Severus alzó una ceja.
- ¿ahora soy un objeto? - dijo fingiendo estar indignado.
-no, pero si eres mi persona - le sonreí y baje a Hetan.

Entramos a la sala, ahí estaban mi papá y Amelia, ellos al verme se pararon y me abrazaron.

- ¡felicidades por graduarte mi reina! - me dijo entusiasmado mi papá.
- estamos muy orgullosos de ti- me dijo Amelia, ambos se separaron de mi.
- ve a descansar un rato hija, en la noche tenemos una cena y tienes que estar como nueva- hablo mi papá mirando a Severus.
- ¿será formal? - pregunte extrañada.
- tanto que Severus se pondrá traje- el mencionado los fulmino con la mirada.
- te acompaño a arriba - me dijo Severus volviendo a agarrar mi baúl.
-nos vemos al rato- les dije a mi papá y Amelia para luego comenzar a subir las escaleras.

Al llegar a mi cuarto me quite los tenis y me deje caer en la cama, tras de mi llego Severus con mi baúl, lo dejo en un rincón del cuarto, se sentó a mi lado, lo mire a los ojos, sonreí y palmee la cama para que se acostara a mi lado, el sonrió y negó.

-por más que quisiera cielo, no es apropiado - dijo serio.
- ohh vamos- me queje- no te veo hace un año, además, lo que no quieren que pase ya paso más de una vez, y lo disfrute tanto- mordí mi labio y el se sonrojo.
- Kasandra baja la voz- dijo nervioso.
- no seas mal pensado, solo quiero que duermas conmigo- dije divertida al ver su reacción.
- hoy no será, tengo que ayudar a Ashton con algo - se miraba nervioso, frunci el ceño y me voltee.
- vete entonces - dije abrazando mi almohada - no te veo hace un año y pareciera que no quieres pasar tiempo conmigo.
- todo tiene un porque, así que por favor no te pongas así - dijo poniéndose frente a mi, me sonrió y yo no pude evitar hacer lo mismo- me tendrás todos los días, y en un rato, pero necesitas descansar - me besó - descansa--asentí, el salio del cuarto cerrando la puerta detrás de él,por mi parte cerré los ojos y caí en un profundo sueño.

****

Desperte, eran las 6 de la tarde, me senté en la cama y en mi tocador había un vestido de satén colos azul, me levante y me acerque a el, había una nota, que en resumen decía que me lo pusiera y los tacones también, así como que también me arreglara ¿es que acaso un gnomo de jardín mordió a todos? Deje la carta de lado y me puse el vestido, era hermoso, largo, sin hombros, con escote en forma de corazón y jna abertura qué dejaba ver mi pierna, muy sensual, me puse los tacones qué eran de terciopelo negro algo altos, amarre mi cabello en un moño bien recogido con un lazo negro, me maquille, cejas, sombras de color azul con negro para hacer resaltar mi mirada y labios color durazno, me puse una gargantilla con una piedra color azul qué me regalo Lucius hace tres años, me mire al espejo y sonreí, me encantaba lo que miraba en mi reflejo, guarde mi varita en mi pierna dolde tenia puesta una discreta liga qué usaba para eso exactamente.

- vamos a averiguar qué tienen todos entre manos- dije abriendo la puerta de mi cuarto para salir de esto, luego recordé que había olvidado mi abrigo- por poco te quedas amiguin- dije agarrando el abrigo y ahora si saliendo de éste, al bajar solo mire a Severus, que al verme quedo con la boca abierta.
- pero que suerte tengo de que seas mi novia- dijo tomando mi mano, el llevaba traje totalmente negro, pegado a su figura, se miraba bastante sexy.
- sí no fuera por que creo que ya nos dejaron te quitaría ese traje ahora mismo- le respondí y el se puso rojo.
- no me tientes satanás--dijo agarrandome de la cintura y pegandome a su cuerpo,reí.
-¿y los demás? - pregunte al ver que efectivamente no había nadie en la casa.
- se adelantaron ¿lista? - asentí con un movimiento de cabeza.

En un abrir y cerrar de ojos aparecimos frente a un restaurante bastante ostentoso, no me impresione en lo absoluto ya qué me dijeron que sería formal, agarrados de la mano entramos a el restaurante en donde me llevé la verdadera sorpresa, estaban mis amigos más cercanos y familia, hasta la abuela Mariane qué no veía desde hace mucho tiempo, solté la mano de Severus para saludar a todos los presentes.

-hace mucho no te veía abuela ¿cómo es que estás aquí?- dije dándole un abrazo.
- ohh hija, es que tu el alcornoque de tu padre y tu novio... - pensó tratando de recordar el nombre - el chico éste... Tiverius - dijo sonriendo.
-Severus - corrigió mi novio con una sonrisa falsa yo solo reí de manera discreta.
- eso, me invitaron.

Salude al resto y me senté a un lado de mi Mamá, Severus se sentó de mi otro lado.

La cena transcurrió tranquila, con felicitaciones por haberme graduado, severus estuvo por alguna extraña razón muy nervioso, estaba platicando con Cissy y Lucius cuando Severus se paro.

-se preguntaran por que los reuní a todos aquí y yo pague todo- dijo mirando a la mesa- hoy es un día muy especial para mi y estoy muy nervioso, como no tienen idea, pero aquí voy, con el permiso de mis suegros- me miro- Kasandra, te conozco desde que tengo 13 años y la verdad al principio te deteste, eras una niña muy obstinada, altanera, te gustaba mucho hacerme enojar y aun te gusta, pero ya no te odio, con el tiempo me di cuenta de la hermosa persona que eras y poco a poco me enamore de aquella sabandija azulada qué tanto detestaba, vi tu cambio de niña a mujer como tu viste el mío y me enamore aun con más intensidad, tenemos 4 años de noviazgo y creo que es el momento de dar otro paso ya qué yo si lo quiero dar mientras sea contigo - dijo sonriendome, yo tenía lagrimas en mis ojos y un nudo en mi garganta, era el hombre perfecto, mire como se arrodillo y de su saco sacaba una caja de terciopelo colo verde esmeralda, me pare y puse mis manos en mi boca - ¿Kasandra Homile Robinson Shine, me harías es honor y la gran dicha de ser mi esposa? - estaba en shock, todo la mesa esperaba mi respuesta y yo no lo pude evitar, las lágrimas salieron de mis ojos y asentí de manera  frenética con mi cabeza, Severus hacia los mismos movimientos qué yo esperando una respuesta.
- sí quiero - dije en un hilo de voz, el se paro, me agarro por la cintura me besó, sonreímos durante el beso, al separarnos la mesa estalló en aplausos- ¿en que dedo debo ponerlo?- pregunte nerviosa, el dio una pequeña risa.
- en el de matrimonio tonta- dijo sonriendo y poniéndome el anillo, yo reí de nervios- eres un desastre y por eso quiero casarme contigo - me volvió a besar.


Era el mejor día de mi vida y pensar que de pequeña miraba éste día muy lejano y cuando me comencé a fijar en mi prometido lo mire imposible, el un chico serio, que parecía no tener emociones, neutro, recto, con cara de pocos amigos, algo uraño y solitario, se fijo en mi, un desastre, su desastre.

La Copa De La Vida  [Severus Snape]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora