La Copa De La Vida [Severus Snape]

Cap. 43

/Dimitrius/

-entonces ¿ustedes se quedan? - pregunte antes de salir del castillo a Harry y Elizabeth.
- claro, no podemos salir- dijo resignado Harry.
- dadas las circunstancias - dije y mire mi reloj, después sonreí- nos vemos al rato.
- Dimitrius, ayúdame, Pansy me sigue a todos lados - dijo Draco poniendose detrás de mi- Potter - dijo mirándolos de manera despectiva y sin darme tiempo a decir nada me jalo a la fila donde estaba mi papá al frente.
- Draqui, que bueno que ya llegaste, te quería preguntar si me podrías acompañar a comprar un par de cosas en el pueblo - le pregunto Pansy a Draco, este me miro con suplica y yo rod los ojos.
- voy a ver si mi padre necesita algo - dije a ambos y di un par de pasos.
- Dimitrius ¡corazón espérame! - dijo Draco y yo voltee a verlo descolocado ¿que mierda?
- ¿ah? - pregunte y Pansy miraba a los dos con confusión, Draco se puso a mi lado y me susurro entre dientes.
- no digas nada y Sígueme la corriente Snape- luego volteo a ver a Pansy y sonrió- lo siento Pansy, pero tengo que acompañar a mi Dimitrius todo el tiempo, a veces se le olvida lo nuestro y va detrás de las faldas de otras- Pansy abrió los ojos sorprendida y yo lo miraba igual- ¿no sabías? Lo siento, no lo decimos mucho, nos hicimos pareja después de una semana aquí, pero tratamos de ser discretos ¿verdad amor? - pregunto Draco y me abrazo de la cintura, me miraba con suplica.
- cala-claro Pansy, lo siento pero quiero pasar tiempo de calidad con mi novio - dije nervioso con una sonrisa mientras ella estaba viéndonos sin creer una palabra.
- no les creo - dijo ya segura- nunca los e visto besándose- se cruzo de brazos
-somos reservados Pansy - dije y mire a Draco.
- no les creo - dijo y nos miró de arriba a abajo, pase uno de mis brazos por los hombro de Draco.
- Pansy, es verdad, tiempo de calidad, chao- dijo Draco haciendo una seña con su mano.
- no los dejaré solos hasta que se besen- mierda, Draco me miró pidiendo perdón con  la mirada y antes de que pudiera hacer nada me agarro de la cara y me planto un beso en los labios, al separarnos Pansy se fue con cara rara y yo miro a Draco con enojo.
- ¿que mierda hiciste Draco? - dije pasando el dorso de mi mano por mis labios para limpiar sus babas- acabas de arruinar mi reputación - dije molesto- me salaste.
- no seas exagerado, solo salve mi pellejo y mi paz - dijo y se quiso ir, lo agarre del brazo y lo puse frente a mi.
- tu me metiste en esto, ahora no estarás de aquí para allá solo "novio" - dije enojado y lo lleve conmigo de nuevo a la fila, pero esta vez a lado de de mi papá.
- ¿alguna novedad con quien ya sabes? - pregunto papá.
- negativo, nada nuevo papá - dije y mire volteo a ver ya que aun tenía a Draco agarrado del brazo, alzó una ceja- te explico después.

****

-¿Qué hace el aquí? - me pregunto Ron mirando con desprecio a Draco.
- a mi tampoco me gusta tu compañía Weasley, no me es ameno estar aquí- dijo Draco con desprecio, le di un codazo.
- Draco se hace responsable de su propia estupidez - mire a Draco aún enojado- y no andará diciendo nada despectivo por estas horas ¿Verdad Draco? - lo mire enojado.
- no me queda de otra- dijo cruzándose de brazos.
- ¿vamos por una cerveza de mantequilla? - pregunto Hermione y yo le sonreí.
- vamos- dije y le extendí mi brazo para que ella lo tomase, comenzamos a caminar a las tres escobas con Draco y Ron lanzándose miradas de odio detrás.

****

/Severus/

Meses, llevo meses, sin nada de nada, y hablo literal cuando digo sin nada de nada, lo esposa aún está enojada, muy pegada a su amigo Jazba y a Lupin, sentía que en cualquier momento me aventaria el anillo y me pediría el divorcio, sinceramente sigo teniendo miedo de que eso pase, lo menos que quiero es perderla por que la amo desde que tengo 14 años y ella tenia razón, lo tenía todo, una esposa que me amaba, ahora parece que ya no existo para ella, un hijo que me adoraba, que poco a poco se aleja por que va creciendo, estoy completo aunque ahora mismo me siento desfallecer por que veo que todo por lo que había luchado se iba al carajo por una estupidez, tenía que recuperar todo a como diera lugar, aunque ahorita por el momento tengo que cuidar niños estúpidos que se que los más grandes terminaran briagos. Estaba caminando por las calles de Hogsmade cuando en una banca vi a Jazba, con una guitarra y mi esposa a su lado, me acerque un poco para escuchar y lo que escuche me dejó intranquilo.

-sabes, no resisto mi paciencia acabará, tengo que estar contigo, tienes que dejarme entrar, solo debo soñar, solo puedo pensar en tus labios que son algo divino, ya no puedo callar estas gana de amar, tu corazón tiene que ser mío, no lo pienses más, quiero el único que viva entre tus besos, quiero ser el huracán que viaje por tu cuerpo....

/narradora/

Mientras Severus escuchaba al trigueño cantarle algo tan atrevido a su mujer, su mujer estaba ejecutando su plan, lo que Jazab cantaba era una canción que había escrito para una de sus novias de la adolescencia, la cual había mostrado a Kasandra y a ella le pareció muy buena idea que hiciera eso que no ataban haciendo, sabía que la estaba vigilando su esposo, además, tanto Jazba como Kasandra al parecer eran buenos actores. Severus con la sangre hirviendo camino a ellos y al esta delante de la guitarra no dudo en soltarle un golpe en la cara dejando a Kasandra con la boca abierta y a Jazba con un labio roto, lo que ni Severus ni Kasandra sabían era que nuestro amigo Mexicano el realidad si comenzaba a sentir algo más que amistad por nuestra casada protagonista, bueno, Severus lo sospechaba, era hombre, y eso entre ellos lo notan, Kasandra miró a Jazba pidiéndole perdón con la mirada, enojada agarro a su esposo del brazo y lo llevó a un lugar donde no pudieran verlos.

-¿se puede saber que demonios acaba de pasar? - pregunto a nuestro pelinegro enojada, pero no se esperaba lo que pasó a continuación.
- no te quiero perder - hablo con la voz quebrada, mirándola con sus ojos cristalinos y tomado su cara con sus dos manos- te amo y se que en cualquier momento me vas a lanzar el anillo a la cara - una lágrima se escapo de Severus y un sentimiento de culpa inundó a Kasandra- tenías razón, lo tenía todo y me dejé cegar por un rencor de niños, ahora me doy cuenta que estoy perdiendo todo y poco a poco me voy quedando solo- las lágrimas no paraba de salir, pero entonces paso algo que dejo sin habla a la chica cuyo cabello ahora era color castaño claro. Severus se arrodillo ante ella y abrazado de sus piernas comenzó a pedir perdón- Kasandra perdóname, por favor perdóname - el pantalón de la joven poco a poco se iba mojando y las lágrimas de ella no demoraron en salir, nunca había visto a Severus humillarse por voluntad propia de esa manera, pronto ella se agacho para estar a la altura de su esposo y se abrazo a él con tanta fuerza y desesperación que no se dieron cuenta que al final de ese callejón un hombre con el labio abierto y una guitarra que n la mano, observaba la escena con el corazón roto y sus falsas ilusiones en el piso.
-¿podrías levantar tu pie para levantar mi corazón? Es que lo estas pisando- dijo el chico de la guitarra para si mismo antes de dar media vuelta y comenzar a supervisar a los chicos más de cerca.
- te perdono - dijo Kasandra aún abrazada a Severus - pero ahora yo te pido perdón a ti por como te trate en estos meses- Severus se levantó del piso y ayudó a su mujer para que también lo hiciera, con su pulgar rozo su mejilla y la miró con comprensión.
- no hay nada que perdonar, fui un estúpido y lo merecía- hablo este comprendiendo la postura de su mujer, ella le sonrió y el acercó su cara a la de ella hasta que sus labios, después de tantos meses sin siquiera ser tocado volvieron a unirse en un beso reconfortante, ansioso y lleno de amor, al separar se no necesitaron decir nada, si mirada decía más que mil palabras, tomados de la mano salieron de aquel callejón que había sido testigo de que esas dos almas estaba destinadas a permanecer juntas, una vez fura de este y caminando por la calle Severus habló.
- ¿es normal que haya visto a Draco besar a Dimitrius? - pregunto a Kasandra quién lo miró con asombro.
- ¿cuando? - están intrigada.
- hoy antes de salir del castillo- hablo el hombre queriendo explotar de la risa al recordar lo que miró.