La Copa De La Vida [Severus Snape]

Cap. 67

/Narradora/

Dimitrius subió a la segunda planta donde se comenzaban a escuchar voces detrás de la primera puerta al subir las escaleras, respiro hondo tratando de quitarse el sentirse un bastado por utilizar algo que había dicho que quedaba en el pasado, el recurso de "la media luna" tanto la canción que ya estaba completa, como el referirse así a la castaña; repitiendose varias veces en su cabeza un "hago esto para salvar de un loco sin nariz a los que amo" para después tocar la puerta. Esta no tardo en abrirse dejando ver a Ron, quien al ver al pelinegro sonrió y terminó de abrir la puerta para salir y darle un abrazo fraternal.

-bienvenido al cuartel general de La Orden Del Fénix- dijo el pelirrojo con una sonrisa- pasa, Harry y Elizabeth llegarán en un rato, pero luego te contamos por que- el pelinegro asintio sonriendo, al entrar miro a Fred, George, Ginny y Hermione, dejo su guitarra en la entrada del cuarto.
-Fred, George - los saludo de mano con una sonrisa.
-Dimitrius, no sabíamos que tu padre era parte de la orden- dijo Fred.
-no era algo de lo que te enteras todos los días- le siguió George.
-digamos que el prefiere tener toda su vida en privado y cuando llegue el momento deja que pase lo que tenga que pasar- hablo Dimitrius restandole importancia, volteo con Ginny- hola bella comadreja- musitó coqueto el pelinegro haciendo a la chica soltar un bufido, amaba molestarla.
- ¿tan pronto comenzarás a molestarme chico pez? - pregunto a la defensiva la chica Weasley, Dimitrius fingió ponerse serio.
- no era un pez, era un Tritón, superalo, pasó hace bastante- hablo con tono frío haciendo soltar una risa a una castaña a su espalda.
-eso fue hace unos meses- hablo por primera vez la castaña, Dimitrius alzó una ceja mientras sonreía y se dio media vuelta, camino erguido un par de pasos para quedar frente a ella, al estar ya en frente se inclino un poco y extendió su mano a ella.
-como sea- la castaña alzó una ceja al ver el gesto de Dimitrius- ¿planeas dejarme con la mano estirada? Me parece una falta de respeto de su parte señorita Granger--la chica sonrió y agarro su mano, pero no contaba con que el chico haría un movimiento con el cual la levantaría y pegara su cuerpo al suyo para después dar un abrazo- también te extrañe Mione- susurro en su oído sacando una sonrisa de esta, se escucho un bufido, Dimitrius la soltó y se sentó con ella en uno de los sillones de la habitación.
-¿sabes tocar esa cosa? - pregunto Ron para tener la atención de la castaña y la del pelinegro para que este dejara de ver como tonto a su amiga.
-ohh claro, desde pequeño me metieron en clases extra, una de ellas era música, tenía mucho tiempo libre de niño y mis padres querían tenerme un buen rato lejos- Hermione río, Ron Frunció el ceño, los gemelos al ver aquello comenzaron a darse de codazos divertidos por la actitud de su hermano, quien no lo conociera diría que le gustaba Hermione, Ginny solo los miraba divertida.
-¿podrías tocarnos algo? - pregunto George, tenía una idea de lo que haría el hijo de Snape, era más que obvio que el chico quería regresar de nuevo con la castaña y ella no se miraba nada renuente a aquello.
-anda, queremos ver que tan bien lo haces- le siguió Fred, Ron los fulmino con la mirada.
-claro- dijo sonriente el pelinegro, era su oportunidad para cantarle aquella ya terminada canción a Hermione "eres un maldito bastardo Severus Dimitrius Snape" se dijo a si mismo mientras se paraba, camino rápido a su estuche, lo abrió con cuidado y sacó con mimo su adorada guitarra acústica de color negro con detalles plateados y cuerdas de metal; al tenerla en las manos la colgó en su cuello y volteo- hace un tiempo no toco, pero escribí una canción y me gustaría si opinión.
-tu solo toca y canta y ya Snape- dijo una astiada Ginny en la orilla de la cama, Dimitrius suspiró y comenzó a tocar los primeros acordes acompañados de un pequeño silvido.
- aquí estoy muerto de miedo, voy a verte de nuevo y no se que decir- cantó mirando en dirección a Hermione quien lo miraba atenta- ya practique en el espejo y hasta pedí consejos para hacerte reír- la chica sonrió mientras Ron con cada estrofa parecía fruncir más el ceño- ya compre caramelos y me peine el pelo como te gusta a ti, y estoy pidiéndole al cielo que cuando me veas te pongas feliz- Ginny se mordía el labio para no soltar un leve gritito de emoción pues prácticamente le estaban dando una serenata a su amiga-- tu me haces ser inocente otra vez, más ingenuo, más frágil tal vez, me haces niño y no pienso crecer- la castaña se sonrojo y se paso un mechón de cabello por detrás de su oreja, Fred y George tenían sentimientos encontrados, no sabían si morir de ternura por la situación de Hermione o partirse de risa por la reacción de su hermano, quien comenzaba ahora a apretar los puños- llegaste, mi media luna tu llegaste, no estaba oscuro pero alumbraste, no estaba vacío pero me llenaste, no estaba herido pero me curaste, me miraste y me mataste, volví a la vida cuando me besaste- Dimitrius tocaba y cantaba al principio sintiéndose una basura, pero mientras más avanzaba la canción volvía a revivir momentos con dicha chica y comenzaba a cantar con más alegría sintiendo ahora un poco de nerviosismo- con tus ojos chiquititos sentí que mirabas muy dentro de mi, yo te imaginaba desnuda y toda mi armadura caía ante ti- después de esas palabras el penúltimo de los Weasley sintió ira y se dedico a salirse a paso firme de la habitación dando un portaso, Dimitrius dejo de tocar y volteo confundido, los gemelos divertidos le hicieron una seña de que todo estaba bien.
- nosotros vamos a ver que tiene, tal vez se sintió mal o algo así- hablo Fred parándose y caminando a la puerta seguido por George, Ginny sintiendo que sobraba en la habitación habló.
-yo tengo algo de hambre, esperare a que lleguen Harry y Elizabeth en la cocina- dijo la pelirroja y corrió para afuera cerrando la puerta detrás de sí, Dimitrius volteo a ver a Hermione que aun estaba sonrojada, se quito de enzima la guitarra y la dejo recargada en una pared con cuidado para después sentarse a un lado de la castaña.
- ¿y bien? - se animo a preguntar el pelinegro con media sonrisa.
- ¿es algún tipo de indirecta? - Pregunto nerviosa la castaña, Dimitrius sonrió y agarro con sus dos manos la de ella.
-no, creo que fuy demasiado directo de hecho Hermione- soltó mirándola a los ojos, ella evadió la mirada mordiendo su labio inferior- me gustas y se que las cosas hace un tiempo entre tu y yo no salieron bien, me comporte como un idiota y te ruego perdón por eso, pero creo que en ese momento no estaba preparado para una relación si me lo permites quisiera pedirte una segunda oportunidad- la castaña lo volteo a ver atónita y entonces recordó lo que había pasado en el baile de navidad y lo que habían hablado.
-¿no eres Gay? Me dijiste que tenías novio en el baile de navidad- dijo Hermione escaneandolo de arriba a abajo, el no se inmutó, si algo le había enseñado su padre desde que terminó su segundo año era a ocultar sus emociones cunado era necesario.
-no Hermione, no soy gay, soy bisexual y no, ya no tengo novio ¿recuerdas que te dije que las cosas no estaban bien? Pues fue la causa por la que terminamos- la castaña lo miro atenta, se escuchaba creíble lo que él le decía y parecía ser muy sincero- ¿me puedes dar una segunda oportunidad? ¿O tengo que irme por la puerta con mi guitarra, mi canción y sentimientos de vuelta a mi casa?- Hermione río ante aquellas palabras "más Slytherin no podía ser" se dijo a sí misma.
-creo que podemos intentarlo- accedió por fin la chica con media sonrisa, Dimitrius le sonrió y la tomo con suavidad del mentón, acercó su cara a la de ella mirándola a los ojos, la mirada de Hermione bajo de sus ojos a sus labios y él entendió la situación, terminando por fin la distancia entre ellos cerró los ojos y poso sus labios sobre los de ella dándose cuenta de algo, amaba a Draco, pero quería a Hermione, entonces recordó las palabras de su padre "la vida no es justa" cuanta razón tenía ese hombre, amaba a su rubio pero por su bien se tenía que alejar de él y comenzar algo con su ahora castaña por el bien de todos.

****

-¡Harry y Elizabeth no pueden exponerse de esa manera ante el misterio! Ellos harán todo lo posible para dejarlos ver como locos, quitarles sus varitas y sacarlos de Hogwarts, me niego rotundamente a que pasen por tal humillación profesor Dumbledore- dijo Black en desacuerdo con el plan del viejo director, Severus rodó los ojos cansado de tratar de explicarle al perro inútil que eso era necesario y todo saldría bien, mientras Kasandra, que estaba sentada a su lado soltó un gemido de frustración mientras metía a su boca un pedazo de tarta de frambuesa que le había dado Molly, Lucius estaba sentado del otro lado de Kasandra, molesto por creer que ese hombre que desgraciadamente era primo de su esposa y de alguna manera emparentaban, era más inteligente, pero claro, era Gryffindor ¿qué más podían esperar de él?
-qué paternal eres Black, sigue así y pronto podrás vivir tu estúpido cuento de hadas con tus ahijados- soltó con ironía Severus, resiviendo miradas de desaprobación de varios de la orden y una furiosa del nombrado.
-¿no te mordiste la lengua Quejicus? - pregunto también con ironía Sirius- es hipócrita que tu me hables así de la paternidad cuando tu hijo mayor se encuentra arriba con los demás muchachos y ahora tengas a dos más en camino, dime ¿no será que el que vive en un cuento de Hadas eres tú? - Severus no se inmutó.
- en efecto Black, no me mordí la lengua, yo no vivo en un cuento de hadas, yo vivo en la realidad, en el hoy, no me la paso imaginando y anhelando un día poder demostrar mi inocencia, yo si hago algo por la causa, yo si arriesgo, es estúpido que tu te niegues a que ellos dos vayan a una audiencia teniendo todo de su lado por ser simplemente los Potter- soltó relajado Severus mirando por el rabillo del ojo a su mujer quien le hacía señas por debajo de la mesa con su mano libre y su cara haciéndole saber que su respuesta había sido más que genial y Lucius hacia lo mismo. Sirius enfureció.
-no se ni siquiera como es que un tipo como tu, que no sabemos de qué lado está su lealtad, se sienta en mi mesa con la orden y todos hablan de lo que haremos de manera tan abierta- Severus alzó una ceja.
- si te molesta mi presencia puedo pararme de tu mesa, llevarme a mi esposa, ir por mi hijo y retirarme de aquí, pero en el momento que yo salga con mi familia por la puerta no me vuelven a ver más nunca - dijo Severus seguro, todos miraban la escena alarmados, el cabello de Kasandra se torno de un color naranja por la impresión de las palabras de Severus.
- yo no tengo problema en que te largues con toda tu familia, no hacen falta- Sirius lo miro con desprecio, Kasandra frunció el ceño, ella le había dado una paliza a ese hombre cuando tenía 12 años y ahora con 33 años, casada, con un hijo y nuevamente embarazada estaba tentada a regalarle un pase VIP para ser el protagonista de otra.
-si tu lo dices Black- Severus miro a Kasandra - nos vamos a casa amor, necesitas descansar, allá puedes comer lo que quieras, ya mismo voy a llamar a Dimitrius- Severus le tendió la mano a Kasandra y ella la tomó, no era momento de discutir y menos hacer corajes, su estado no estaba para aquello, con un poco de dificultad se paro de la silla agarrando con una mano su espalda baja, Lucius que estaba a un lado de ella se paro también y le ayudó a mantener un poco el equilibrio a quien el consideraba su hermana, si ellos se iban el no tenia nada que hacer ahí, si ellos huían el y su familia irían con ellos. Con las moradas asombrada sobre ellos tres caminaron a la salida de la habitación donde estaban hasta que una voz los detuvo.
-Severus, Kasandra y Lucius, vuelvan a sus lugares, ustedes tres son la parte más importante de la orden después de Harry y Elizabeth- habló Dumbledore, Severus sonrió con egocentrismo que contagio a su esposa y su amigo, los tres voltearon.
-si él no nos quiere aquí no se puede hacer nada Albus- dijo Lucius, era cierto, ellos tenían las de ganar, sin ellos no sabrían los movimientos del señor tenebroso.
-el que decide aquí soy yo, Kasandra querida, puedes seguir comiéndote esa deliciosa tarta- dijo Dumbledore dando por zanjado ese tema.
-pero... - quiso replicar Sirius.
-nada Sirius- dijo Albus, Kasandra volvió a su lugar para seguir comiendo y escuchando, Severus detrás de ella y Lucius detrás de Severus.