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Canción en multimedia:  Shine - PENTAGON 🎵🎶




—¿Entonces no podrás ir? —Quiso corroborar su entrenador—. Te aseguro que quedarse aquí haciendo trabajos de educación física es bastante aburrido.

El entrenamiento había concluido y las luces estaban encendidas ahora que empezaba a oscurecer. Jungkook se había quedado, junto con Yug y Minghao, para cerrar la piscina, ordenar el material y hablar con el entrenador.

—Lo sé, pero es el cumpleaños de Daejin, y planeábamos celebrarlo en familia —murmuró Jungkook rascando su cuello. No es como si faltar a la salida lo hiciera feliz. Allí estaban sus amigos, mirándolo con caras de cachorros huérfanos y abandonados en la calle, a unos cuantos pasos de la conversación con su entrenador, y él solo podía mirarlos de regreso como un niño que quiere llevarlos a casa mientras su padre le dice que no y lo arrastra lejos, pensando que se perdería la última salida extracurricular con sus amigos. En serio, eso era triste.

—Está bien. Cuadraré con los demás profesores el trabajo que te asignaré y te lo entregaré mañana en la mañana —zanjó Seokjin, dándole un par de palmadas a modo de despido. Los chicos llegaron hasta él y entonces todos se encaminaron hacia la salida del recinto, listos para regresar a casa.

—Qué mierda —murmuró Minghao—. ¿Daejin no podía cumplir otro día?

—Sí, por supuesto, le preguntaré a mi mamá por qué no aguantó una semana más para dar a luz —replicó Jungkook con sarcasmo y Yugyeom le pasó un abrazo alrededor del cuello.

—Hagamos cuentas. Daejin nace finales de agosto y tú en septiembre. Creo que la mamá de alguien no perdió el tiempo en navidades.

—Vuelve a hablar de mi madre y te voy a arrancar una tetilla —declaró Jungkook en un gruñido. Los pasillos vacíos se le antojaron un poco tétricos, con la tenue luz de las bombillas tratando de brillar más que el último rayo de sol.

—Eso no importa —dijo Minghao—. Jungkook cumple en tres semanas. ¿Qué haremos para celebrar que le queda un año menos de vida al fastidioso este?

—¿Por qué eso sería un motivo de celebración? —Jungkook estalló en réplicas y excusas, cosas como "competencia", "exámenes", y otros asuntos que ninguno escuchó, pues su perorata fue interrumpida cuando se cruzaron con el equipo de baloncesto, que hacía su éxodo fuera del coliseo. Ellos lucían exhaustos; de hecho, parecía que la práctica se había alargado más de lo normal.

Al final de la larga fila india, se encontraba Taehyung. El capitán llevaba su cabello húmedo, lo cual hacía al tinte gris lucir oscuro como el negro, y una bandana lo sostenía lejos de sus ojos. Se le notaba distraído; masajeaba su cuello mientras caminaba cabizbajo y Jackson a su lado parecía estar contándole algo, pero en realidad, Taehyung no estaba prestándole atención ni a él, ni a su alrededor. Jungkook lo siguió con la mirada hasta que estuvo lejos de su vista y cuando volvió en sí, cuando su ensoñación acabó, regresó a la realidad, una donde sus amigos lo observaban como cínicos villanos planeando la destrucción del mundo mientras tamborileaban sus dedos.

—¿Qué? —murmuró el pelinegro cohibiéndose.

—Vamos a ignorar deliberadamente que tú estabas devorándolo con la mirada —declaró Minghao, pero Yugyeom no estuvo de acuerdo.

—Oh, no, mi vida, yo no voy a ignorar eso. Eso es material incriminatorio para futuras discusiones.

—Cállense —farfulló Jungkook rodando los ojos y dándoles un empujón para continuar con su camino—. Yo no estaba haciendo nada de eso. Solo lo estaba... mirando. ¿Puedo mirarlo o eso es un pecado? Él solo... bueno, él llama la atención. Él es lindo —terminó en un susurro y tan pronto como eso abandonó su boca, se arrepintió.

¡Capitanes! - KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora