¡Capitanes! - KookV

Extra 01

Canción en multimedia: Drunk - Ed Sheeran 🎵 🎶

Si quieren orientarse en contexto, pueden releer el capítulo 28 - {II} y 29 - {III}

—Pásenme la jodida botella —ordenó Taehyung extendiendo la mano—. Mi vida está llena de una infinita lista de desgracias.

—¡Yo inicio! —exclamó Yugyeom felizmente. La música resonaba con fuerza, a pesar de que ellos estaban en una pequeña esquina, algo alejados del resto de personas—. ¡Mi mejor amigo me ignora y ya no pasa tiempo conmigo y tiene excusas tontas para no verme!

—¡Salud! —exclamó Minghao arrebatándole la botella para darle su respectivo sorbo. Este se lo pasó a Jaehyun, a Mingyu y luego a Dokyeom; cuando fue el turno de Jungkook, Yugyeom lloriqueó:

—¡Tú no puedes beber, Kook, tú eres el culpable de mi desgracia! De hecho, tú tampoco bebas, Taehyung, tú eres el otro culpable.

—Ew —De todas formas, Taehyung no veía nada particularmente atractivo acerca de beber de la misma botella que otros chicos. A Jungkook, sin embargo, parecía no importarle eso, o siquiera las palabras de Yugyeom. Se la empinó después de mostrarle la lengua a sus amigos; su manzana de Adán bajó dos veces y Taehyung casi se sintió atacado por la imagen. Después se la tendió a él, con una sonrisa tonta y una mirada brillante, agitando la botella frente a su cara.

—¡Solo un poco! ¡Vamos! —le codeó—. Puedes solo olvidarte de todas las reglas y divertirte un rato. ¡No pasará nada malo!

—Bien —Confiado, tomó un corto sorbo de la botella y arrugó su cara por el amargo sabor. Ellos vitorearon y revolvieron su cabello aparatosamente, riéndose, y luego el alcohol le fue arrebatado de las manos.

—Mi turno —canturreó Dokyeom—. Cuando estaba en primer año, el primer día de clases, en medio de la clase de biología, alguien se pedorreó y me echaron las culpas a mí. ¡Nadie quería estar conmigo en los recreos después de eso! ¡Y me sentía muy triste!

Alguien dejó salir un extraño sonido que se convirtió en una risa. Esta vez no hubo ronda de la botella porque Jaehyun exclamó:

—Maldición, ¿eras tú? Había comprado un pastel de pollo en la cafetería ese día, pero me cayó mal y no pude retener ese torpedo —confesó en medio de risas—. Así que solo culpé al tipo frente a mí. ¡Lamento arruinar tu primer año!

—Pobre Dokyeom —murmuró Taehyung bebiendo voluntariamente de la botella. Aquello sonaba de verdad muy triste y sus amigos se reían sin contenerse ni un poco, incluido Jungkook. Sus ojos se volvían pequeños cuando lo hacía y parecía que aquella enorme sonrisa no cabía en su cara. El sonido de su risa era fastidiosamente alegre, también.

—¡Voy yo! El año pasado recibí una carta de amor. Estaba en mi casillero, en la piscina —empezó Minghao—. No lo voy a negar. Pensé que era alguna clase de broma de alguien del equipo, pero seguían llegando. ¡Como por dos semanas, en serio! Así que una de esas veces respondí.

—Vaya, ¿tenías una admiradora secreta? No te lo creo —declaró Mingyu tratando de controlar sus risitas.

—¡Sí! Quedamos en vernos, ¿saben? En una cafetería. Incluso me bañé —alegó airado—. ¡Pero ella nunca llegó!