Nueva York.
Todo empieza en un aeropuerto, con un malentendido.
Continúa con unas amistades peligrosas...
Y termina con algo que ninguno de los protagonistas esperaba.
Tres hermanas comienzan una nueva vida en Nueva York, lejos de su hogar y lejos...
Este capítulo va dedicado a conocer mejor el carácter de las protagonistas y como son ellas en un ambiente sin los Goldman.
Espero que os guste. Para mi ha sido muy divertido escribir este extra.
A leer, mis amores.
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Narrador omnisciente
La Butler Library, es la biblioteca más grande del campus de Columbia y la preferida para muchos estudiantes, por sus amplias salas de estudio. Entre esos estudiantes, tenemos a las famosas Olimpo.
En la sala más grande, se encuentra la mayor de ellas, América.
América está estudiando para los exámenes de política. Está aprendiéndose leyes y historia del país donde vive ahora, Estados Unidos.
Todos en la sala están en silencio y estudiando sin hacer ruido. El único sonido que se oye son las tripas de América. Su estómago ruge del hambre que tiene. La joven lleva ocho horas sentada en una silla, con las piernas engarrotadas y con dolor en el culo.
Por la puerta principal entra un chico vestido de rojo con una gorra blanca. Anda por los pasillos y todos los alumnos se le quedan mirando y algunos de ellos murmuran. El chico es repartidor y lleva en su mano una caja de pizza.
- ¿Quién ha pedido una pizza? – levanta la voz.
- ¡Shhhh! – le silencian muchos.
El repartidor se da cuenta de que está en una biblioteca y que no puede gritar.
Pasea por el enorme pasillo que separa las mesas cuando por fin ve una mano levantarse entre la multitud de cabezas. Se acerca a paso rápido a la mesa.
- Yo he pedido la pizza – contesta América avergonzada.
- Aquí tiene – le deja la caja encima de la mesa ante las miradas de los de alrededor – Son seis con ochenta.
América saca la cartera y le paga al chico.
- También había pedido una Coca-Cola – advierte.
El chico saca de la bolsa el refresco y se lo da. Después se despide de la joven estudiante.
América abre la caja y huele la exquisita pizza. Después levanta la vista y ve como todos se están lamiendo los labios por la comida que tiene delante.
Por miedo a que se echen encima de ella, se acerca la pizza y empieza a comérsela mientras mira a los lados, con miedo de que se la roben.
Cuando va a comerse el último trozo de pizza, aparece una chica corriendo por el pasillo.
África está arrastrando una mochila mientras corre por la biblioteca del campus. Llega tarde a la exposición de una asignatura y tiene que darse prisa si quiere que le pongan buena nota.
La joven lleva desde que se ha levantado haciendo tareas. Ha ido a ensayar al musical, después ha hecho ejercicio en el GYM, ha estudiado, ha ido a clases de inglés y ahora tiene que dar sus últimas energías en llegar a la sala de exposiciones.
- Hola Meri – pasa corriendo por el lado de su hermana y huele la deliciosa pizza – Dame un poco.
Le roba el último trozo de pizza que le quedaba a su hermana y se lo mete en la boca.
- ¡Era mía! – grita como queja.
- ¡Shhhh! – vuelven a silenciar en la sala.
África continúa corriendo y llega por fin a las escaleras. Las sube de dos en dos y entra en la siguiente sala. Esta se trata de una sala de estudio donde se puede hacer algo más de ruido ya que allí va la gente a estudiar en voz alta.
En esta sala, se encuentra la menor de las Olimpo. Arizona, debería de estar estudiando para su próximo examen, pero se ha quedado dormida sobre su mano.
África pasa corriendo por su lado y le aparta el brazo, haciendo que su cabeza caiga sobre la mesa y se escuche un golpe en toda la sala.
- No te duermas – se ríe África sin parar de correr.
- ¡Joder! ¡Que dolor! – se toca la frente Arizona del golpe que se ha dado.
Coge el móvil que tiene un poco de babas y lo desbloquea.
- Siri, ¿A que hora tengo el examen? – le pregunta a su asistente robótica.
- El examen de Comunicación y Marketing empezó hace veinticinco minutos – le contesta su móvil.
- Shhhh - dice una chica - Estoy intentando estudiar.
La gente la mira. Algunos se rien por el show que les ha ofrecido, otros parecen sentir pena por ella.
Arizona empieza a recoger rápidamente todas sus cosas que tiene encima de la mesa y las mete sin ningún orden en la mochila. Después sale corriendo para llegar al examen.
