¿Casualidad o destino?

252 41 2
                                    

Lo primero que me llama la atención es el azul de las mechas de su pelo corto y lo segundo, cuando voy a saludarla, ella saluda a Tyler.
-Tyyyyyy.- grita Melanie que se tira a sus brazos y se produce un largo abrazo.
-No sabes lo que te he echado de menos pequeña.- dice mientras la suelta.- Bueno, te presento a...
-¡¿Kat!?
-¡Melanieeee!
-¿Os conocéis?- nos pregunta Tyler bastante confuso.
-Espera, ¿el novio al que venías a ver era mi hermano? ¿cómo es que no me la habías presentado Ty?
-No socorro, no hace más de una hora que lo conozco.Espera, ¿sois hermanos?
Ahora sé porque Tyler me resultó familiar cuando lo ví, Melanie me había enseñado fotos de su grupo de rock y sino recuerdo mal, me dijo que el guitarrista era su hermano. Todo encaja pero ¿demasiada casualidad?
Ha llegado un chico con melena recogida en una bandana roja, supongo que será el bateria del que me adevertió Melanie:  "ya sé que es muy guapo pero no te hagas ilusiones porque es gay".
-A final he tenido que aparcar en el parking, mierda de ciudades.- resopla y se coloca el pelo.
-Matt tio, cuánto tiempo.- le dice Tyler y le da un abrazo.
-Vaya, veo que hasta has vuelto a triunfar en el amor.- dice mirándome.
-Hola, me llamo Katherine y no, no somos novios ni nada parecido.
-Oye, que os parece si entramos, pedimos y hablamos las cosas más despacio.- sugiere Tyler, al que ya no le tengo que buacar abreviatura porque Melanie ya le llama Ty.

Una vez que estamos dentro, me doy cuenta de que es un restaurante italiano por los cuadros de sus paredes. Nos sentamos en una mesa al lado de las ventanas que dan a la calle y pedimos espaguetis a la carbonara menos Melanie que los pide a la boloñesa.
-Y ¿de qué os conocéis?- nos pregunta Tyler a Melanie y a mí.
-Hemos venido sentadas juntas en el avión.- le responde Melanie.- ¿Y vosotros? Habrá tenido que ser amor a primera vista para invitarla a comer así tan de repente.
-A ver, a ver, que nadie ha dicho que yo vaya a invitar.- dice y todos le fulminamos con la mirada.
Llega el camarero con los platos, no ponemos a comer mientras que les cuento cómo y por qué me encontre con Tyler. Y tengo que decir que los espaguetis estaban más buenos que los que tomamos cuando estuvimos por el viaje de fin de curso en Italia.
Se han parado a hablar con el dueño del restaurante, era un viejo amigo de su padre. Yo me salgo a la puerta y pienso en lo qué voy a hacer. Me han insistido en que me quede con ellos y la verdad es que llevan razón, yo no he cruzado el Altlántico para volverme igual que estaba. Uno de mis sueños siempre había sido visitar USA y ahora que estoy aquí y he tenido la suerte de encontrar a esta gente, debería quedarme y disfrutar. Pero por otra parte, me encuentro hecha una mierda y por mucho que intente olvidarme de Luke, el más mínimo ricón de esta ciudad me recordara a él.
Me encantaría poder llamar a Angy y que me aconsejase como solo ella sabe hacer y no es solo que me encantaría, es que debería porque si se entera más tarde se va a enfadar pero no quiero preocuparla. Porque podría tener dos reacciones: "llevas razón, tienes que disfrutar" o "ni se te ocurra quedarte en casa de alguien que no conoces". Le tengo que  contestar al WhatsApp que me mandó antes de comer.
-Cieloo, ¿estás ya con Luke?
-Sii, hemos estado comiendo espaguetis.
Me lo pienso un rato antes de escribirlo pero no me queda alternativa sino quiero que coga un avión con tal de asegurarse de que estoy bien. Ahora me está llamando mi madre, esto lo tengo más fácil.
-¡Mamá!
-Holaaa, mi niña ¿cómo va todo?
-Muy bien, una ciudad muy bonita.
-Me alegro mucho, manda fotos cuando puedas.
-Vale y por allí ¿cómo van las cosas?
-Como siempre pero te extrañamos mucho.
-Y yo a vosotros pero nos veremos pronto, dale recuerdos a papá.
-Sí y ten cuidado con todo, te quiero.
-Yo también te quiero.
Soy hija única y al no tener hermanos a quienes pedir consejo, tengo mucha confianza con mi madre. Pero a ella, a parte de que se hubiese preocupado el doble que Angy, no se lo he contado porque quiero demasiado a Luke y cuando quieres a alguien siempre lo vas a cubrir aunque te haya herido a ti. Es lo que suele pasar con tu primer novio, cuando tus padres te preguntan sobre sus notas o sus amigos y aunque estos no sean muy buenos, les dices que son todos super empollones y que ninguno fuma. Pero creo que no solo es por querer a Luke, es porque los quiero aún más a ellos y no puedo defraudarlos.
Volvimos a la casa de Tyler y Melanie me enseñó la parte de arriba. Había tres habitaciones, la de Luke y dos de invitados, y un cuarto de baño. Tenían una decoración muy simple, excepto la de Luke por la mesa con el ordenador y algún otro cuadro, me gustaba más la parte de abajo.
-Pues, elige la habitación que quieras.
-¿Qué? No, bastante es que me dejáis quedarme.- No pueden ser tan buenos conmigo, no sabría como agradecerselo.- Dormiré en el sofá.
-Bueno, podemos turnarnos el sofá entre Matt, tú y yo.
-De verdad que no hace falta.
-Tú decides, siempre te queda la opción de dormir con mi hermano.
Dormir con alguien, llevo tanto tiempo durmiendo sola que se me ha olvidado la calidez que aportaban los brazos de Luke y no me gustaría recordarlo con alguien que no fuese él. No digo esto en voz alta pero creo que Melanie lo detecta por la expresión de mi cara.
-Sé lo que se siente cuando alguien te rompe el corazón y...
-Niña, necesitas deshogarte y yo sé la mejor manera.- dice Matt que acaba de entrar al salón.
-Qué buena idea tio.- le dice Melanie que parece haberlo entendido con la mirada.- Coge el dinero que hayas traído que nos vamos de compras.
-¿Cómo? Estoy super cansada del viaje y la última cosa que me apetece es meterme en probadores.
-Vamos nena no seas plasta.- me replica Matt dándome un empujoncito.
-Hágamos un trato, si me dejáis dormir unas dos horitas después me voy con vosotros y arrasamos el centro comercial.
-Trato hecho, pero en una horas como mucho nos vamos.- acuerda Melanie.
-Jooo, vale.
Me saco las converses y me tumbo en el sofá. No tardo mucho en dormirme pero tampoco me extraña después de todo lo que ha pasado en las últimas horas. Cuando me despierto oigo a Tyler discutir con alguien por teléfono.
-Que sí pesado, nos vemos a las cinco.
-Tyler, nos vamos ya ¿te vienes?- le pregunta Melanie.
-Tengo cosas que hacer, pasadlo bien.
-Lo que quieras, tú te lo pierdes.- le dice Matt.- Ey bella durmiente, te esperamos en el coche.
-Pero si me acabo de despertar.
-Data prisa.- me dice Melanie mientras sale por la puerta.
Me vuelvo a poner las zapatillas a prisa y corriendo y me despido de Tyler. Al que noto un poco raro ¿habrá sido la llamada?

No somos de cristal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora