Capítulo 40

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¡WOOW! acabo de ver qué mi historia llegó a los 2k de votos, ¡Gracias!

disfruten del capítulo;

Narrador.

Ban y Meliodas casi corrieron a abrazar a Elaine y Elizabeth, ambos se sentían tan aliviados de que ellas estuvieran bien.

Tan solo tenían que esperar a que Zeldris y helena volvieran a salvo.

(..,)

—¡Zeldris! –Grito helena cuando salió del shook en el que estaba.

Tenía que hacer algo y Zeldris no estaba escuchando.

—¡Ze-! –helena apenas pudo gemir eso, su parte baja dolía y dolía mucho. –Se quejo tirándose al piso protegiendo su bebé.

Dolía mucho y ella casi se estaba retorciendo de dolor, entonces Zeldris la miro llenándose de preocupación y dejando a Gelda muy mal herida.

—¿Helena? –Murmuro preocupado. –¿Que pasa? ¿Ella te hizo algo? –Su preocupación aumento al ver que Helena no respondía y solo se quejaba y se retorcía en el pasto de aquel lugar.

Zeldris no sabía que hacer miro a todos lados buscando ayuda pero solo se encontró con Gelda intentando levantarse, gruño molesto.

El solo quería proteger a Helena, ciertamente no le importaba mucho su bebé a quien protegería pero no a cambio o por sobre la vida de Helena.

Zeldris por impulso se levantó pero Helena lo tomo del tobillo con la poca conciencia que tenía y hablo.

—V-voy a tener al bebé Zel.. –Gimio con dolor. –Llevame con Elizabeth.. necesito su ayuda, ah.

Zeldris asintió repetidas veces y la cargo olvidándose de Gelda, porque nada era más importante que Helena ahora.

Formó sus alas con su materia negra y voló lo más rápido que pudo hacia la taberna, Si estaba lejos, pero volando no sería un problema. Llegaría más rápido.

Helena se retorció de dolor en sus brazos y Zeldris acelero como pudo, su fuerza no era mucha gracias al mandamiento de Grayroad, pero podía lograrlo y llegar con Meliodas asalvo.

Cuando Zeldris diviso la taberna, Merlin se atravesó en su camino y lo detuvo.

—Muevete tengo que irme, necesito a Elizabeth para que la ayude.

Merlin no se movió y solo lo observó por unos minutos hasta que Zeldris gruño enfadado.

—¿Te vas a quitar o no? –Gruño molesto.

Merlin sonrió con superioridad y hablo.

—Tranquilo Zeldris. –Rio levemente. –Solo quería darte esto, si es que Elizabeth no necesita de mi ayuda, aún así creo que te servirá, tu bebé probablemente necesite esto.

Merlin le extendió la sangre de Melascula.

Merlin quería estar presente, pero algo pasaría si ella estaba ahí así que simplemente lo vería desde afuera, después se iria en busca de Arthur, solo quería aprender algo que Elizabeth y ella podían hacer gustando su magia de diosas.

Zeldris enarco una ceja y tomo la sangre, Merlin salió de su camino y antes de que Zeldris se fuera.

—Ella sufrirá mucho al tener a ese bebé, espero te sirva de mucho esa sangre de demonio.

Y se fue, Zeldris frunció el ceño y continuo su camino.

No quería que Helena sufriera, pero era inevitable, ninguno de los dos sabía que reacciones tendría ella con el embarazo, y aunque debieron haber tenido más precauciones, en ese momento ninguno de los dos lo había pensado o bueno al menos el no había pensado muy bien en las consecuencias que tendría el embarazo.

Zeldris descendió con helena en sus brazos y abrió la puerta de la taberna de una patada, llamado la atención de todos en ella, no dejo que nadie hablara y el se adelantó a hacerlo.

—¡Helena necesita tu ayuda Elizabeth! –Casi grito. –Ayudala, ella tendrá al bebé.

—Llevemosla a su habitación. –Dijo sería Elizabeth.

Zeldris asintió y siguió a Elizabeth hasta la habitación.

Elizabeth espero a que Zeldris la colocará en la cama antes de ver cómo estaba ella, Zeldris la coloco con mucho cuidado en la cama y miro a Elizabeth esperando que hiciera algo.

Elizabeth la comenzó a checar asegurándose de que Helena estaba bien. Y podía decir con seguridad que ella lo estaba, lo que no podía deducir era porque el vientre de Helena estaba casi hirviendo.

Helena abrió sus ojos y siguio retorciéndose y buscando a Zeldris en su campo de visión, cuando lo encontró le sonrió débilmente y después miro a Elizabeth.

—Mamá.. –Susurro, como su voz no había sonado lo suficientemente fuerte, intento elevar su voz. –dijo que necesitaba sangre de un demonio, que no fuera familiar, para tenerlo necesito de tu ayuda y necesito tu sangre también...ahg... Duele. –Murmuro. –Ayudame por favor Elizabeth.

—Tranquila Helena, Merlin dijo que esto podría ayudar. –Zeldris le extendió la sangre a Elizabeth y ella asintió, mientras corría escaleras abajo para buscar lo que necesitaba.

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230220
Buen día

Gran amor. [ZELDRIS Y TÚ] [NNT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora