Gran amor. [ZELDRIS Y TÚ] [NNT]

FINAL

Narrador.

Elizabeth recibió al bebé con una gran sonrisa, el bebé estaba realmente tranquilo.

Escucho pisadas que se acercaban a la habitación alterando un poco al bebé, que comenzó a sollozar.

Sus padres estaban inconcientes y no podían ayudarla así que solo espero que fuera diana la que iba hacia ahí.

—Wow es un hermoso bebé. –Dijo Meliodas acercandose.

—Si, es lindo. –apoyo ban. –Capi, ¿Que hace el padre tirado en lugar de recibir a su bebé? –Se burló ban.

Ambos se echaron a reír mirando a Zeldris y elizabeth se molestó.

—¿Pueden guardar algo de silencio o salir de aquí? –Dijo lo más calmada que pudo, ya era suficiente con que Zeldris se desmayara y a ella se lo complicará sostener al bebé en el parto. –¿Y se lo  podrían llevar?

—Elizabeth.. ¿Estás bien? –Le pregunto Meliodas.

—El bebé tiene que descansar. –Respondio. –Llevense a Zeldris, por favor.

Ambos asintieron, Meliodas cargo a Zeldris y salió junto a ban.

—¿Que le pasa a la princesa? –murmuro ban.

—No lo se, tal vez la hicieron enojar. –murmuro también.

—¿No será que no han tenid–

Diane interrumpió lo que ban iba a decir.

—¿Ya nacio el bebé capitán? –Dijo emocionada.

—Yap, pero elizabeth parece molesta. –Dijo el pensativo.

—Tal vez también quiere un bebé capi. –Rio divertido ban.

—Uhm.

Meliodas no dijo más y voto a Zeldris por algún lado de la taberna despertandolo.

Zeldris se levantó de golpe y Meliodas no pudo evitar reír cuando lo vio levantarse.

—¿Y Helena? –Fue lo primero que pregunto.

Meliodas iba a contestar, pero elizabeth se adelantó.

—Ella está bien. –Dijo bajando las escaleras. –Tambien tu bebé, y te pediría que no subieras ambos están tranquilos y para que te desmayes de nuevo por ver a tu bebé o a Helena.

—Elizabeth, ¿Estás bien? –pregunto hawk.

Elizabeth suspiro no sabiendo que decir, extrañamente se sentía de mal humor y tenía hambre.

—Solo iré a descansar, creo que estoy algo estresada. –murmuro, volviendo a subir las escaleras.

—Descansa. –Dijeron Diane y hawk al unísono.

Cuando elizabeth se fue pasaron varios segundos en silencio, hasta que diane hablo.

—¿Te desmayaste? –Le pregunto a Zeldris apunto de reír.

Zeldris se sonrojo

—Si, tal vez por eso la princesa se enojo. –Dijo ban.

—¡Fue un accidente! –Dijo el. –¡Estaba cansado! –Se defendió. –Fue eso.

Diane rio contagiando la risa a todos allí.

—Zel. –Llamo Meliodas acabando con las risas. –Tenemos que hablar. 

Zeldris asintió y camino hacia el, pero Meliodas se dirigió a fuera de la taberna, solo lo siguió con la mirada atenta de todos allí.

Cuando Zeldris llegó hasta Meliodas lo primero que hizo fue disculparse.